30 de enero de 2009

PARANA METAL

Ganó la extorsión del gobierno

En Paraná Metal (empresa autopartista ubicada en Villa Constitución) ganó el 'sí' a la propuesta de 10 puntos presentada por el Ministerio de Trabajo. Por exigencia del gobierno nacional, sólo fueron empadronados los 792 compañeros efectivos (sobre un total de 1.200 trabajadores de la planta). A los 390 trabajadores contratados y de las cooperativas no se les permitió votar. Votaron 735 trabajadores: 657 por el 'sí'; 76 por el 'no'. Hubo 1 voto en blanco y otro anulado.

Desde Prensa Obrera habíamos alertado que la propuesta era una extorsión, pues implicaba elegir entre el cierre de la fábrica y el despido, de un lado, y la aceptación de una reducción del salario (30%) y suspensiones, del otro. Las patronales industriales ya han salido a reclamar que el "modelo Paraná Metal" sea extendido a todas las empresas.

¿Cuál es ese "modelo Paraná Metal"? Rebajas y congelamientos salariales hasta el 2010; desconocimiento de convenios; suspensiones rotativas al 60% del sueldo; todos los contratados quedan afuera.

Ya en una línea de máxima, Funes de Rioja, el representante jurídico de las grandes patronales de la Argentina, adelantó que para ellos "hablar de aumentos es un disparate" (El Cronista, 26/1), reclamando la suspensión de las paritarias por rama y acuerdos "por empresa" frente a la crisis.

Contratados y tercerizadas

Como los contratados van a ser despedidos, se les impidió votar porque nadie vota a favor de su despido. No se los incluyó en los llamados '10 puntos', objeto de referendo.

La dirigencia de la UOM de Villa Constitución ha hecho de gestora del Ministerio de Trabajo ante los obreros. Aceptó el cercenamiento del voto de los que están luchando codo a codo, en la carpa, en las movilizaciones y en las rutas. Prefiere los despidos a una lucha por el reparto de las horas de trabajo y un programa de inversiones bajo control obrero. El Estado se ha comprometido a pagar entre el 15 y el 20% de los salarios, según las categorías, cuando podría haber nacionalizado y destinado esa plata a reequipar la fábrica. A 420 mil pesos de salarios por mes (600 pesos por 700 obreros), en un año gastará 5 millones de pesos, que corresponde pagar a la patronal.

Hace unos días, las cooperativas y los contratados realizaron una asamblea en la que resolvieron que hasta que no les paguen todo lo adeudado (les deben el año completo), no van a entrar a la fábrica aunque arreglen los efectivos. En teoría, 48 horas antes de ingresar a la planta, a los efectivos le estarían pagando lo adeudado, pero para las cooperativas y contratados no hay fecha alguna.

La votación

Los trabajadores de Paraná Metal fueron extorsionados. Eligieron "seguir peleando desde 'adentro' (como dijo un compañero a la prensa), con la conciencia de que no serán respetados ni los 10 puntos puestos a votación. La dirección de su gremio, siguiendo órdenes del gobierno, no les permitió deliberar entre diversas alternativas.

La dirección de la UOM aceptó, con el nombre de "recategorización", una descategorización, donde las categorías especializadas ya conquistadas por Paraná Metal serían anuladas (1.7, 1.8, 1.9, 1.10). En su lugar quedarían sólo las categorías comunes del CCT 260 y del Laudo 29.

Se ha votado una rebaja salarial que no está determinada en ningún acta ni la duración ni la cantidad de las suspensiones rotativas.

Rebajando salarios, desconociendo convenios y despidiendo contratados, el gobierno pretende mostrar a las patronales, que es mejor opción, frente a los conflictos sociales, que la oposición patronal de los Carrió y los Solá.

Pero la pelea por los puestos de trabajo en Paraná Metal, en Acindar y en Siderar y en toda la clase obrera recién comienza.

Juan Ferro

29 de enero de 2009

HAY REBELION CONTRA EL TARIFAZO

Una rebelión contra el aumento de las tarifas de luz se está produciendo en estas horas en el Gran Buenos Aires.

En Tigre, en San Fernando, en Lanús, en Pilar, en La Matanza, se organizan y desenvuelven movilizaciones populares cada vez más intensas.

La consigna que las unifica es la derogación total del tarifazo. Los vecinos marcharon a la residencia presidencial de Olivos el pasado viernes y volverán a hacerlo el próximo viernes, a partir de las 18 horas.

Las barriadas obreras han comprobado que no es cierto que el tarifazo afecta sólo a los "grandes consumidores".

Los consumos por encima de los 1.000 KWH incluyen las dos terceras partes de la clase obrera.

¿Cuántas familias abarrotan en un mismo hogar porque sus hijos casados no tienen vivienda?

¿Cuántas familias que carecen de agua potable tienen que apelar a un motor para sacar agua de un pozo usando bastante más que los 1.000 KWH puestos como límite?

¿Pero acaso no está la "tarifa social"? "Del millón y medio de personas que percibirán aumentos, solo 31.000 usuarios tienen la tarifa social", informa Clarín (23/1).

Además ha subido el transporte y el peaje, y se viene el aumento del agua.

La decisión de los aumentos obedece a dos causas: juntar las monedas para el pago de la deuda externa y satisfacer el reclamo de las distribuidoras privadas, que de lo contrario han amenazado con ir al 'default' con sus deudas externas.

Hagamos nuestra la consigna de los vecinos: "derogación total del aumento de tarifas de luz"; la exención del pago para todo trabajador desocupado y jubilado.

Constituyamos asambleas populares en cada barrio para organizar la movilización por cada uno de los reclamos de la población trabajadora.

Que la crisis la paguen los capitalistas.

28 de enero de 2009

LA COBARDÍA DE LOS ESCRITORES

Carta abierta a la Sociedad de Escritoras y Escritores de Argentina

No se trata de "la traición de los intelectuales", pero la declaración de la Comisión Directiva de la SEA contra la masacre de Gaza ha dejado al desnudo la cobardía de una cofradía de escritores, con más plumas que intelecto. Ocurre que, como lo refleja un ataque a la SEA por parte de Mario Goloboff, que la revista Ñ dio a conocer hace dos sábados, estos escritores se quejan por los tiempos de verbo de la declaración de la SEA, por la discordancia de sus adjetivos y por la parcialidad de sus enunciaciones (es decir que propugnan el exabrupto histórico y lingüístico de la imparcialidad en una sociedad dividida en clases), pero en ningún momento resulta posible saber qué piensan ellos de lo sucedido en la Franja de Gaza. Es claro que rechazan la condena de la SEA, pero no tienen el coraje de defender la acción criminal del Ejército sionista y resulta obvio que no han encontrado la forma de pararse en el medio sin delatar su complicidad con ella, o sea con esta nueva manifestación extrema del despojo social y la opresión nacional que sufre el pueblo de Palestina. Han elegido la conducta más pusilánime: juguetear con las palabras. Unos meses atrás, un agrupamiento conocido como "Carta Abierta", en el cual revistan también algunos de estos pusilánimes, logró publicar un torrente de palabras sobre el conflicto sojero sin pronunciarse sobre él en ningún momento, sino solamente para desentrañar su semántica, o sea el lenguaje del que se valía la Comisión de Enlace. Lo que descubrieron es más antiguo que la rueda: que los sojeros buscaban disimular sus intereses particulares como propios de la sociedad en su conjunto. A los intelectuales en cuestión no les importaba atacar la distorsión real de la realidad, a saber, que un puñado de capitalistas terratenientes explota a una mayoría de obreros y consumidores, sino sólo su distorsión enunciativa. Reescrito el texto, eventualmente, les sigue importando un bledo que la realidad siga con sus atropellos e injusticias.

Otra manifestación de la cobardía de los escritores (naturalmente que sólo la de los 'críticos' de la SEA) es que ahora algunas de ellos ha decidido renunciar a la SEA porque la entidad no se retractó de la declaración ni la rectificó. ¡Ni lo hubiera podido hacer, pues la posición de los demandantes es insondable! Dicen, por ejemplo, que "es obvio que condenan la masacre", pero no la han puesto en ningún lado blanco sobre negro. Y si la condenan, ¿en qué debería consistir la retractación? De todos modos, lo singular del asunto es la intolerancia de los escritores, que no pueden participar, en este caso en la SEA, desde la disidencia. Pero no lo pueden hacer porque no tienen nada que decir, como lo prueba el hecho de que nada han dicho; si fueran ellos la Comisión Directiva de la SEA, el sindicato de escritores se caracterizaría por el silencio, o sea la censura, en los asuntos sociales, es decir humanos. Una SEA sin palabras sería su ‘motto'. Un intelectual no puede pedir rectificaciones so pena de convertirse en un extorsionador; su obligación es refutar las proposiciones que sean, intelectualmente.

La incapacidad de actuar a partir de la disidencia, sin embargo, no solamente expresa una vocación irrefrenable por el oficialismo y por el orden de cosas existente, y una disposición a gozar de la calentura del sol. También pone de manifiesto un pluralismo deformado, que obligaría a las distintas voces a medirse o acomodarse al nivel de la más mediocre -esa misma que, como todo argumento, amenaza con romper el carnet. Lo que viene a demostrar que no hay nada más sectario que las sectas pluralistas.

En cualquier caso, tampoco es cuestión de dejarles a estos escritores el monopolio de la interpretación de los textos. Por más que se esfuercen jamás podrán superar a los grandes comentaristas del Talmud. Algunos de los escritores opinan que es un "abuso de lenguaje" referirse a la masacre de Gaza como genocidio, mucho más si es holocausto, o referirse al Estado de Israel como sionista. Pues que digan ellos cuales son las palabras apropiadas, mientras sean fieles a la realidad, en un caso de la masacre, en el otro de la condición excluyente del estado en cuestión, y por sobre todo que unan sus palabras a la acción y salgan a luchar para poner fin a la masacre del pueblo de Gaza por parte del Ejército israelí y sus crímenes de guerra. De todos modos, es cierto que ha habido un abuso de lenguaje, pero no el que los escritores pretenden. Para los escritores, el dolor de una madre en Auschwitz es mayor que en de una madre en Gaza; nada humano me es ajeno, pero algunos casos me resultan más ajenos que otros. Subir la categoría de la masacre pretende mostrar la igualdad de la condición humana. Por esta razón es legítima. No hay abuso de lenguaje, por parte de quienes equiparan las tragedias, sino un lenguaje abusivo de parte de quienes las minimizan. De todos modos, ni Gaza es Auschwitz ni los sionistas son nazis. Se trata de una distinción política muy importante, que ningún socialista o luchador dejaría de tener en cuenta. El imperialismo no ha logrado aplastar a la clase obrera ni creado con ello, de nuevo, las relaciones políticas que caracterizan al nazismo y a los campos de concentración. La tendencia del imperialismo a la reacción política y al fascismo no ha prosperado hasta sus extremos por el combate popular. Entre otros, por la resistencia de los pueblos, como el de Gaza (o el de Irak, o Líbano, o el pueblo argentino contra la dictadura, o los pueblos latinoamericanos contra los golpes de Estado). El sionismo no es el fascismo, pero encierra la tendencia al fascismo -si no pregúntenle a Z. Jabotinski, el jefe de lo que hoy es el Likud, que realizó diversos acuerdos con Mussolini en aquellos años. O el entrenamiento de los grupos de tareas en Centroamérica por parte de los servicios sionistas, o el apoyo a las dictaduras de Videla y de Pinochet. Lo que no es ya un abuso de lenguaje, ni lenguaje abusivo sino "el lenguaje del abuso", es la pretensión de poner un signo igual entre sionismo y judaísmo, y después de hacer esta amalgama decir que el Estado de Israel no es sionista. ¡Qué escándalo intelectual esta falacia descomunal de los dueños autodesignados de la exégesis y la semántica! Encajan a todo el judaísmo en el sionismo y después pretenden que el Estado de Israel no es sionista y que fue parido por la Revolución Francesa y los derechos del hombre y del ciudadano. Mientras el judaísmo es mesiánico y expresa una esperanza de emancipación universal, el sionismo es una de las diversas corrientes políticas que han poblado la historia moderna del judaísmo, la más reaccionaria (aunque en este arco se anotaran variantes de derecha y de izquierda), nacionalista, durante mucho tiempo minoritaria, que postula una colonización basada en la exclusión y la expulsión de los pueblos que habitan Palestina. Desde la declaración Balfour (1917) ha sido funcional a los intereses del imperialismo dominante en la región.

La cobardía de los escritores es un episodio menor de un desafío mayor: que los escritores se metan en la lucha política del pueblo; que sus agrupamientos sean un ámbito de politización; que los trabajadores puedan encontrar en sus escritores un aliado de su emancipación. Llamamos a los trabajadores a interesarse por la disputa política abierta en la SEA y a involucrarse en ella, decididamente.

Jorge Altamira

26 de enero de 2009

Schiaretti y Giacomino fogonean la especulación inmobiliaria

Schiaretti y Giacomino le están dando una nueva vuelta de tuerca a la especulación inmobiliaria en Córdoba. La construcción del nuevo "centro cívico" y la venta de los terrenos de la casa de gobierno y ex Pablo Pizzurno, son un nuevo negociado en beneficio de la empresa Electroingeniería, que gane o pierda la licitación, igual cobra, por esto de la "iniciativa privada". Electroingeniería ya había sido beneficiada recientemente con la aprobación, por parte de la legislatura de Córdoba del Cluster Tecnológico, que no es otra cosa que un emprendimiento inmobiliario, donde esta empresa levantará hoteles y countries, con los subsidios del Estado y con los servicios garantizados.

Este nuevo negociado solo producirá un impacto demoledor en los valores de la tierra que continuarán subiendo, y terminará expulsando hacia las afueras de la ciudad a miles de trabajadores que no podrán afrontar sus alquileres e impuestos.

Mientras la especulación marcha a todo galope, las esperanzas de 300 mil familias de Córdoba que carecen de viviendas se hacen trizas al igual que los espejitos de colores de los anuncios de la presidenta Fernández en materia de obras públicas.

El Partido Obrero denuncia, también, la estafa política de los concejales del Frente Cívico y del propio Luis Juez, que en nombre de la defensa de los espacios verdes se oponen a este negociado de Schiaretti y Giacomino, ya que fueron ellos, los fogoneros de la "concertación pública - privada" por la cual los desarrollistas urbanos estaban autorizados a violar todos los códigos de edificación.

El Partido Obrero plantea la necesidad de disponer de toda la tierra para llevar adelante un verdadero plan de viviendas, financiadas y cuyas cuotas no superen el 20% del ingreso familiar, a tasa de interés cero, financiada por un gravamen especial a la especulación inmobiliaria y a los fondos de inversión inmobiliaria. Investigación de los negocios de Electroingenieria, mediante la apertura de sus libros contables.

Manuel D´Alessandro

25 de enero de 2009

Altamira: "La oposición busca una devaluación del peso y un acuerdo con el FMI"


Publicado en "La Prensa" (24 de enero de 2009)

El secretario General del Partido Obrero aseguró que el kirchnerismo "no tiene una respuesta ante la bancarrota económica internacional, porque en el fondo es pura cáscara" y que "toda la oposición sabe que una devaluación se lleva puesto al gobierno de Cristina Fernández". Advirtió hoy que la oposición expresada en Eduardo Duhalde, Elisa Carrió y Mauricio Macri, entre otros, "está trabajando por una devaluación del peso y el retorno a un acuerdo con el FMI". Los siguientes son los principales tramos de la entrevista de Altamira con este medio:

- ¿Qué evaluación hace del gobierno nacional?

- El kirchnerismo, que es pura cáscara, se enfrenta a una crisis para la cual no tiene una salida ante la bancarrota económica internacional que hundió los precios de las materias primas que la Argentina exporta y se va a dar una crisis industrial. No pudo hacer frente a la fuga de capitales de cerca de 30 mil millones de dólares.

- ¿Cómo ve al resto de la oposición?

- La oposición está trabajando por una devaluación extraordinaria del peso y el retorno a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el kirchnerismo está resistiendo en forma inadecuada.

- ¿Quiénes de los opositores impulsa eso?

- En esto están Macri, Carrió, Prat Gay, Lavagna, González Fraga y Duhalde. Incluso Claudio Lozano y Solanas, aunque estos no dijeron nada sobre eso, dada la cantidad de pronunciamientos que los otros han hecho a favor de una mega devaluación, sorprende que alguien que se dedica a la economía como Lozano, evada el tema. El complejo sojero también está pidiendo una devaluación.

- ¿Que podría pasar ante semejante medida económica?

- Una devaluación sería catastrófica sin un acuerdo con el FMI. Por eso harían un acuerdo para obtener un préstamos para sostener esa devaluación y aceptar las exigencias del FMI.

Todos los dirigentes de esa oposición saben que una mega devaluación se lleva puesto al gobierno de Cristina Fernández. Están trabajando para la caída del gobierno.

- ¿Qué más afectaría una devaluación?

- Una devaluación del peso significaría una caída brutal de los salarios, porque los precios se van a disparar. Y por otro lado, como para las corporaciones de servicios como luz, gas y transportes, las tarifas están retrasadas, una devaluación las haría más retrasadas. Entonces, la recomposición del cuadro tarifario será una de las exigencias del FMI.

- ¿Entonces, qué debería hacer el gobierno?

- El kirchnerismo se dio cuenta de eso y por eso quiere voltear a Cobos. El kirchnerismo dice lo siguiente: si lo saco a Cobos, en caso de que me obliguen a renunciar, iría Pampuro (en la línea sucesoria por ser el presidente provisional del Senado), que es kirchnerista. Por eso, la esencia de las elecciones es bajo qué gobierno se van a hacer y bajo qué condiciones económica y sociales.

- ¿El gobierno debería tomar otras medidas?

- Lo único que puede parar ese golpe es que el gobierno tome efectivamente el control de la economía y lance un plan de reactivación. Si nacionalizase los bancos, le estaría pegando a la yugular de la fuga de capitales. En parte, el gobierno intuye esto y por eso nacionalizó las AFJP. Pero lo hace o para pagar la deuda o dar créditos que no van a poder ser devueltos por la crisis y la Anses quedará vaciada.

- ¿Y el Partido Obrero qué hará?

- El Partido Obrero (PO) está llamando la atención de la población trabajadora contra el golpe. Y llamando la atención porque el gobierno no le va a resolver los problemas a los compañeros de Siderar y Paraná Metal (que suspendieron a sus trabajadores hasta febrero).

Queremos intervenir en la crisis política para derrotar el golpe de la oposición y para derrotar la política del gobierno que agrava los problemas populares. La configuración política de fuerzas con la que el PO va a actuar, va a depender de la actitud de muchas fuerzas sociales y de izquierda, en la crisis.

- ¿Qué ocurre con los otros sectores de izquierda?

- En la crisis agraria, toda la izquierda se colocó del lado del complejo sojero. Y otra parte apoyó directamente al gobierno. Nosotros tuvimos una posición independiente. Nosotros no podríamos ir con los sojeros ni con los piqueteros truchos del gobierno.

- ¿Cómo juzga a esa izquierda que apoyó al campo?

- En el movimiento agrario, una parte, que llamaría pequeña burguesía agraria y que vio en el alto precio de la soja una posibilidad de desarrollo, se alineó con los grandes intereses agrarios. Otra izquierda lo ha hecho sólo por aventurera, como Vilma Ripoll que es un caso de decadencia política total.

- Hay otros dirigentes ubicados en el centroizquierda como Pino Solanas, Ibarra, entre otros. ¿Qué opina de ellos?

- Solanas se ha puesto de acuerdo con Ibarra, que renegoció en 2002 la deuda externa cuando era jefe de Gobierno y que pagó el 100 por ciento de la deuda. Redolarizó la deuda en pesos, mediante una cláusula que decía que se iba a ajustar por el aumento de la recaudación tributaria en la Ciudad. La Ciudad pagó una estafa fenomenal. ¿Solanas no sabe que Ibarra como jefe de Gobierno vetó la ley de seis horas para los trabajadores del subte y no sabe sobre esa estafa?. Y después se ve con Luis Juez (en Córdoba) que viene del menemismo.

- ¿Y la gestión de Macri en la Ciudad?
- Macri es un intento por ver si vuelve el menemismo, impulsa negocios inmobiliarios y choca con los trabajadores. La emprendió contra las becas de los estudiantes y en la Boca un padre perdió a casi la totalidad de sus hijos. Esa es la política de Macri: echar afuera a los trabajadores y transformar la ciudad en un paraíso de especuladores inmobiliarios. Le queda grande, porque el pueblo de la Ciudad no se lo va a permitir.

24 de enero de 2009

La crisis en la industria automotriz

Las "suspensiones" de Iveco son un lock-out

Iveco suspendió a 256 trabajadores (del plantel de contratados) hasta el 31 de marzo. Les pagará 1.350 pesos por mes, lo que representa un 60% del sueldo inicial pero mucho menos que los ingresos que estos trabajadores venían cobrando hasta noviembre (en virtud de las abundantes horas extras, casi duplicaban el ingreso inicial). Para los suspendidos que venían cobrando el 75% implica, además, una rebaja.

En el camino, la patronal se desprendió de más de 160 trabajadores contratados, a quienes presionó para que aceptaran una suerte de retiro voluntario. Las presiones siguen.

El objetivo de la patronal es preciso: desprenderse de todos los contratados (que superaban el 40% del total de la planta) y también de parte de los efectivos. En eso consiste su "reestructuración" en función de la crisis.

Iveco informó por intermedio, de la burocracia del Smata, que su planta ¿funcionará? con los trabajadores efectivos ¡una semana al mes! de aquí a abril. La patronal cuenta con un gran stock (la producción de Iveco creció un 59% en los primeros once meses de 2008, en comparación con igual período de 2007), incluido su nuevo camión económico, el Tector. Ese stock se formó con el trabajo de lunes a lunes, sobre todo de los contratados, a quienes ahora se quieren sacar de encima.

El nuevo ‘diagrama de producción' es un verdadero lockout patronal destinado a desprenderse de más de la mitad del personal. En abril estarán en discusión "nuevas" condiciones de trabajo, o sea mayor flexibilización laboral.

La adaptación de la burocracia del Smata a los propósitos patronales es total. Presentó la oferta empresarial como "lo más razonable frente a la grave crisis mundial". Pero, además, dio por tierra con los acuerdos anteriores, porque reconoció que los trabajadores de Gestamp y VW suspendidos no están cobrando la parte del subsidio que le corresponde poner al gobierno nacional (400 pesos).

En este cuadro, y con mucha bronca, los más de 120 trabajadores reunidos frente a la Secretaría de Trabajo terminaron aceptando los 1.350 pesos. Un grupo de trabajadores reclamó una urgente convocatoria a una asamblea general del Smata; la burocracia decidió hacer oídos sordos y huyó metiéndose en la Secretaría. Uno de los "delegados combativos" cambió el planteo de la asamblea del Smata por asamblea de Iveco, el próximo 2 de febrero, para discutir "la rotación del personal suspendido", una medida explicada en función de la "necesaria solidaridad de los efectivos con los contratados". ¡En lugar del reparto de las horas, plantean el reparto de las suspensiones! Es un planteo totalmente inútil: los trabajadores efectivos sólo trabajarán tres semanas en los próximos tres o cuatro meses, ¿qué se va a repartir?

¿Cómo actuar?

La burocracia y la patronal cargan las tintas sobre la crisis mundial con el objetivo de apabullar a los trabajadores y presentar cualquier alternativa que no sea el despido directo, por ejemplo las suspensiones, como una salida. Mientras tanto operan para hacer efectivos los despidos, como sucedió con los 160 contratados que se fueron. La presentan como una crisis coyuntural. La crisis no es coyuntural.

Frente al lock-out patronal corresponde que discutamos la nacionalización de las empresas y de los bancos, colocarlas bajo control obrero, establecer un plan económico en función de los intereses sociales y no los particulares de las patronales.

Los trabajadores que plantaron la necesidad de la asamblea general del Smata vieron más allá del conflicto de Iveco y propiciaron la medida que permitiría a los trabajadores actuar en forma homogénea.

En el marco de esta caracterización impulsamos la asamblea general para imponer la prohibición de los despidos y suspensiones, el reparto de las horas de trabajo sin afectar el salario, el aumento general de salarios y la apertura de los libros de las empresas.

Eduardo Salas

Trabajadores metalmecánicos

PTS: Crónica de una adaptación a la burocracia

El PTS ha debido cambiar de chaqueta y reconocer que los trabajadores de Gestamp "están disconformes con el acuerdo que firmó el Smata" (LVO 309). Se refieren al acuerdo que convirtió los despidos en suspensiones con un subsidio de 1.050 pesos (equivalente al 52,5% de lo que cobraban). En reiterados artículos y declaraciones, el PTS lo había considerado un "triunfo" o un "verdadero paso adelante". Los trabajadores de Gestamp tenían de ese acuerdo la misma caracterización que el PO. Ahora sabemos, por boca de la burocracia del Smata, que los trabajadores no están recibiendo la totalidad del subsidio (Nación no pagó los 400 pesos mensuales comprometidos).

El "error" del PTS responde a una adaptación sistemática a la burocracia del Smata desde que comenzó el conflicto en las metalmecánicas de Córdoba y que aún continúa.

El PTS consideró un "gran triunfo" de los trabajadores de Gestamp que la burocracia se ocupara de reclamar su reincorporación, considerando que no se trataba de trabajadores permanentes, sino contratados. Pero después que la burocracia se "ocupó", los trabajadores quedaron afuera. El PTS discrimina, como la patronal, entre contratados y efectivos, o sea la precariedad laboral.

El PTS se opuso a que los despedidos de Gestamp bloquearan la entrada a la planta el 1º de diciembre, en nombre de un compromiso de la burocracia de "interceder" por ellos. Esa adaptación a las patronales y a la burocracia también ocurrió en VW e Iveco. Más de un mes después, y luego de que el PO lo señalara reiteradamente (en Prensa Obrera y en declaraciones), en LVO Nº 309 un "trabajador de Iveco" critica la política de la burocracia de negociar fábrica por fábrica dividiendo a los trabajadores que habían logrado armar una movilización común el 1º de diciembre. Sin embargo, el pasado 14, frente a la Secretaría de Trabajo, del mismo "trabajador de Iveco" respondió al planteo de una asamblea general del Smata, hecho a viva voz por un grupo de activistas, con "hagamos una asamblea de Iveco"; es decir, mantengamos la división.

A lo largo del conflicto, el PTS mantuvo silencio como partido y la agrupación de la cual participa sacó sólo una declaración. Los artículos de LVO se limitaron a una crónica de la lucha y a silenciar la política de la burocracia; no existe un solo concepto sobre ésta. Seguramente, porque el PTS no tiene una política distinta: considera que convertir contratados despedidos en contratados suspendidos es un triunfo, porque "esto es un cambio histórico contra el ‘sentido común' impuesto por las patronales y la burocracia en relación a los contratados" (respuesta al PO). Exactamente lo mismo dice la burocracia para defender la entrega de los contratados mediante esos acuerdos.

El PTS rechazó nuestra aseveración de que las suspensiones son la antesala de los despidos, asegurando que "no entendemos nada" del tema. Pero la patronal de Iveco logró que 160 contratados abandonaran la empresa (muchos de ellos activistas), y está desenvolviendo una campaña feroz con el resto; lo mismo sucede con los de Gestamp y VW. O sea: está sucediendo lo que el PO señaló y el PTS descalificó.

El PTS finge que la crisis automotriz y el conflicto son coyunturales, prefiere mirar para otro lado. Por eso tampoco ha levantado un programa de conjunto, como la nacionalización de los bancos y las empresas estratégicas, un plan económico de la clase obrera, el control obrero de la producción, los comités de fábrica. Por eso ni ha mencionado la ocupación de fábrica o la asamblea general del Smata. El PO fue desarrollando este programa a lo largo de todo el conflicto.

Las críticas al PTS responden a la necesidad de determinar la política de la clase obrera frente a la crisis capitalista. El PTS ha contestado con chicanas y mentiras, y con intrigas contra el conjunto de la izquierda. Ha terminado rectificándose en forma vergonzante, pero no cambia su seguidismo a la burocracia.

Eduardo Salas

22 de enero de 2009

Obama, la cuenta regresiva

El argentino Carlos Escudé acaba de escribir en el Cronista que "Obama no es un negro sino un graduado de Harvard". Seguramente no lo ve del mismo modo la mayoría de los dos millones de personas que asistieron a su toma de gobierno, pero Escudé tiene razón: "Es un miembro de la elite negra que integra el establishment blanco". Llega al gobierno luego de un largo proceso de asimilación de esta elite al Estado, en el cual ya ha ocupado numerosos puestos ejecutivos y nada menos que la jefatura del Pentágono (Colin Powell) o la secretaría de Estado (Condoleezza Rice). Obama se convierte en presidente cuando prevalece un largo reflujo en las luchas populares en Norteamérica, incluida especialmente la de los derechos civiles. Que un negro arribe a la presidencia para integrar a las diversidades sociales del país, habla por sí solo de su carácter reaccionario. La desigualdad social en perjuicio de los sectores étnicos minoritarios, o de las mujeres, no se ha atenuado sino acentuado en Estados Unidos. Obama no sube como culminación de un proceso de conquistas de negros o hispanos, sino de retrocesos - como lo demuestra, destacadamente, la expulsión creciente de trabajadores inmigrantes. El entusiasmo popular por la llegada de Obama al gobierno traduce, precisamente, la ilusión de que su presidencia sirva para invertir la tendencia.

Consciente de la situación contradictoria en la que se encuentra, o más bien de su fraude a la fe pública, Obama ha comenzado a matizar sus consignas. Su slogan de la campaña electoral, "el cambio es posible", se ha transformado, por esas sutilezas del lenguaje que le dan de comer a los kirchneristas de ‘Carta Abierta', en una versión devaluada: "Por un cambio que sea creíble (o en el que podamos creer)", lo cual es una contradicción ignominiosa. Del cambio ‘creíble' se hace cargo la naturaleza todos los días, espontáneamente -el cambio, por la acción consciente del hombre, solamente es tal cuando rompe los límites de la situación establecida. Obama ya ha puesto a funcionar la ley de "las expectativas decrecientes": ¿Pero qué otra cosa podría hacer, si dedicó su campaña a la promesa de una "seguridad social" para todos, y tiene que asumir con la declaración de quiebra del sistema financiero de los Estados Unidos? ¿O con la promesa de irse de Irak, que ahora condiciona a lo que le diga el general Petraeus, que es el autor del último plan de Bush, que relanza ("surge") la intervención militar? Obama ya tiene previsto entregar varios billones de dólares más, pero no para la ‘seguridad social' de la población vulnerable sino de los capitalistas. El equipo económico de Obama está compuesto por entero por los que impulsaron la especulación financiera que está acabando en zozobra, o sea por los agentes de los bancos. De ahí que se apresten a crear un banco nuevo, que deberá hacerse cargo de todos los créditos y activos sin valor que los bancos no pueden vender, naturalmente a cargo del Estado. Los negros que fueron a Washington, el martes pasado, van a pasar el resto de sus vidas pagando la factura que les va a dejar Obama -eso si encuentran trabajo. Naturalmente, si Obama fracasa, que es lo más probable, levantará cabeza la hiena del fascismo blanco-protestante-anglosajón, para echarle la culpa a ‘los negros'.

La presidencia de Obama no augura nada bueno en política exterior. Sus asesores no se han cansado de repetir que cambiará los métodos de Bush, pero no los objetivos. Semejante definición hará las delicias de los políticos de carrera de Argentina, porque es lo que se llama una "política de Estado" (‘los cambios en los que se pueda creer'), aunque ahora mismo estén reclamando una mega devaluación del peso y el retorno del FMI. En línea con los ‘objetivos', Bush firmó un "memorándum de entendimiento" con Israel para monitorear Gaza, 48 horas antes de la asunción de Obama - lo que no podría haber hecho sin su ‘okay'. Su jefe de gabinete, Ram Emmanuel, es un veterano de una tropa de elite del ejército sionista; no debe sorprender entonces de que Obama asegure que no va a negociar con el "terrorista" Hamas, que ganó las elecciones en Gaza, hace tres años, con mucha mayor contundencia democrática que él. El cambio ‘metodológico' que promete Obama, siempre al servicio de los objetivos definidos por Bush, sería ‘convencer' a los gobiernos europeos (y a Japón, Rusia y China) para que se sumen al reforzamiento político y militar de Israel en el Medio Oriente. Esto permite suponer una mayor violencia en las relaciones con las burguesías europeas, no una disminución de la violencia en Medio Oriente.

Obama no aspira ni a poner fin al ‘estado de excepción' establecido por Bush, que le permite detener a personas sin orden judicial, retenerlas en prisiones especiales y por tiempo indeterminado y juzgarlas fuera del marco constitucional, o que le permite espiar las comunicaciones privadas -o sea suspender el derecho (‘habeas corpus'); es decir exiliar a la persona de la sociedad. En efecto, quiere cerrar la cárcel de Guantánamo, pero no sabe qué hacer con los retenidos allí, porque no está dispuesto a reconocerles un estatuto legal ni mucho menos a juzgar a sus carceleros y torturadores, y a los responsables políticos del ‘estado de excepción' (Bush, Cheney, la mayoría del Congreso y la Corte Suprema).

Con 47 años de edad y solamente cuatro en el Senado, Obama aparece como un ‘outsider', un advenedizo. Esta característica no asegura de ninguna manera que sea una personalidad independiente, ni tampoco sólida; simplemente, que el ‘establishment' político norteamericano se encuentra en una profunda crisis, después de haber votado guerras y paquetes económicos que han llevado a Estados Unidos a la peor crisis de la historia mundial del capitalismo. Pone en evidencia una capacidad de manipulación y de compromiso - de otra manera no hubiera batido los récords de recaudación para una campaña electoral (al punto que terminó pagando las deudas de campaña de Hillary Clinton). Su demagogia y carisma es un recurso apresurado del que se están sirviendo los explotadores contra los explotados. Los comentaristas dicen que a Obama lo distingue su insistencia en los ‘valores', no las políticas - pero se olvidan que lo mismo dijeron de Bush (bautizado en su momento como "conservador compasivo"). La diferencia es que Bush predicaba los ‘valores' del cowboy y Obama los del sacrificio y el esfuerzo. Bush preparaba la guerra, mientras Obama necesita inculcar la resignación frente a la crisis: una desocupación que, bien contada, llegará al 17 por ciento en marzo y que no durará ni uno, ni dos, ni tres años.

Obama deberá quebrar las ilusiones populares en el marco de un capitalismo en bancarrota y de un régimen político en crisis. Las contradicciones históricas de Estados Unidos son potencialmente más violentas que en la mayor parte del mundo, no menos. Las ha disimulado por su enorme riqueza, que en una proporción elevada se origina en la explotación a escala mundial. Pero las cosas han cambiado, al grado de que ‘no se pueden creer'. En las últimas horas, economistas y banqueros destacados proclamaron la defunción de la banca y la inminencia de su nacionalización. Cuando se concrete (el premio Nobel de Economía, Paul Krugman, reclama nacionalizar la oferta financiera y la demanda de inversiones (The New York Review of Books, 12/12/08), habremos llegado a un estadio nunca visto en la historia del capitalismo. Así como dijimos una vez, que antes de que un Bush retorne a Bolivia (posibilidad de un golpe militar o derechista), era más probable que un Evo Morales llegara al gobierno de Estados Unidos, ahora decimos que una nacionalización de la banca obligaría a la burguesía yanqui a gobernar con los métodos del partido comunista de China.

Las cosas se han puesto muy interesantes, por cierto.

Jorge Altamira

Que devuelvan Guantánamo a Cuba

Barack Obama se ha comprometido a cerrar el campo de concentración y torturas instalado por Washington en su base militar de Guantánamo, Cuba. Pero no le será fácil hacerlo.

Ocurre que los detenidos se encuentran bajo un régimen de excepción, sin que se les hubieran formulado cargos penales ni fueran sometidos a juicio regular. Simplemente, están secuestrados por el gobierno norteamericano, bajo jurisdicción de "comisiones militares", que no son justicia militar ni tribunales civiles. Para cerrar el campo, los abogados de Obama deberán encontrar las "figuras legales" que conviertan a los secuestrados en presos con garantías constitucionales, lo cual es rechazado por una parte de los "servicios" del Estado. Por eso, Obama ha pedido a algunos gobiernos "amigos" que acepten hacerse cargo de los prisioneros, hasta ahora sin éxito.

El cierre no viene solo; trae una amnistía general. Los funcionarios del nuevo Ejecutivo fueron muy claros al respecto: no habrá investigación ni juicios a los que idearon los métodos de tortura y los aplicaron en la base, ni toda la cadena militar que hay entre unos y otros. Destacados parlamentarios oficialistas, como Nancy Pelosi, presidente de la Cámara de Representantes, rechazan este indulto.

Pero aún después del eventual cierre del campo de concentración, queda la base militar. Guantánamo no pertenece a Estados Unidos; es parte integral del territorio de Cuba. El punto no admite discusión. Cuba fue obligada a ceder ese territorio cuando estaba militarmente ocupada por Estados Unidos.

Reclamamos la devolución a Cuba del territorio que ocupa la base.

HAY EN MARCHA UN PLAN PARA HACERNOS PAGAR LA CRISIS

La extorsión que el Ministerio de Trabajo pretende imponer a los obreros de Paraná Metal, reúne los elementos fundamentales del plan del gobierno y su ‘burguesía nacional' frente a la crisis capitalista.

La patronal quebrada de Paraná Metal será reemplazada por un interventor designado por el gobierno, pero que no es otro que un accionista de Acindar, Arturo Acevedo - del palo del kirchnerismo y un asociado de la Belga Mineiro.

La función de Acevedo es presidir el desguace de Paraná Metal, notoriamente obsoleta, para entregarla a un ‘inversor' ya digitado, Carlos Leone, que la comprará a precio de remate.

El desguace principal afectará a la fuerza de trabajo, pues los salarios serán primero reducidos y luego congelados; una parte de la remuneración será pagada por el Estado; un elevado número de trabajadores quedará suspendido, con el cobro del 70 por ciento de sus sueldos básicos (no de bolsillo).

Este plan, si logra quebrar la resistencia de los trabajadores, que es lo que esperan los funcionarios y la burocracia sindical de la CTA, sería el modelo para la ‘solución' de los otros conflictos por despidos provocados por la bancarrota capitalista.

Los conflictos principales atañen a Siderar, del pulpo Techint, y próximamente a Aluar, el pulpo del aluminio; en conjunto se prevé el despido de los contratados, suspensiones y reducción de los salarios

En Iveco, Renault y Volkswagen, en Córdoba, las suspensiones de trabajadores han sido prorrogadas, con el cobro del 70 por ciento sobre el básico.

Pero estas salidas apuntan más alto: pues suponen la reducción y/o el congelamiento de los salarios de todos los trabajadores de Argentina.

Si los José Rodríguez y los Alberto Piccinnini firman acuerdos de reducción y congelamiento salarial, o suspensiones por el 70 por ciento del salario corriente de un trabajador, ¿de qué aumento de salarios están hablando los Moyano, los Yasky o los De Gennaro?

El mazazo contra Paraná Metal anuncia una política de desvalorización salarial generalizada para el conjunto de todos trabajadores - que las patronales y el gobierno justificarán, como lo hacen en Paraná Metal, con el argumento de ‘la crisis'.

El plan apunta también contra los jubilados, a los que se promete para marzo un aumento del 11 por ciento, cuando de acuerdo a los parámetros de la reciente ley, no debería bajar del 16-18 por ciento.

¿De qué reactivación hablan los chirolitas del oficialismo, toda vez que están promoviendo la rebaja de los salarios y las suspensiones, y por lo tanto una caída espectacular del consumo personal?

Ningún plan de obras públicas puede compensar una reducción salarial, porque mientras la reducción del salario afecta al consumo de forma inmediata, la obra pública demora largos meses en tironear la demanda.

¿O el gobierno quiere financiar los negocios de la plata contratista con los salarios de 2002?

La desvalorización de los salarios y de las jubilaciones también están inscriptas en el plan que fogonean los Carrió, Buzzi, Sola, Reutemann, Duhalde, Macri, con la complicidad del matrimonio oficial, para devaluar el peso y volver a los planes del FMI.

Como los Bush, los Obama o los Sarkozy, los Kirchner (y los opositores patronales) están empeñados en rescatar al capital, responsable de la crisis, no a los trabajadores, que deberán pagar con su sacrificio el salvataje imposible del capitalismo.

Porque cualquiera que haya visto los noticiarios de TV, se habrá enterado que la banca mundial quebró - ‘finito'; está sostenida por el pulmotor de la emisión monetaria y el subsidio fiscal, o sea al borde de la nacionalización.

El sacrificio de los trabajadores en beneficio del capital es inútil, no resolverá la crisis sino que hundirá más a la producción; en esto consiste el impasse histórico que trae aparejado la bancarrota capitalista mundial.

No hay que rescatar al capital, sino que hay que rescatar, del capital, a los trabajadores, a la sociedad, al parque industrial.

No permitamos ninguna suspensión, ningún despido, ninguna rebaja salarial.

Que se repartan las horas de trabajo al cien por cien del salario; que el personal afectado por una reconversión reciba un seguro de desempleo, sea contratado o permanente, por el cien por cien del salario; que se establezca un salario mínimo igual al costo de la canasta familiar y que se destine la recaudación fiscal al 82% móvil para las jubilaciones y no al pago de la deuda externa; que las paritarias discutan los salarios y condiciones de trabajo con delegados elegidos en asambleas.

Podemos asegurar estas reivindicaciones, si en lugar de dilapidar los recursos para salvar al capitalismo tomamos los recursos que el capitalismo no quiere ni puede poner a trabajar, para un plan de desarrollo nacional.

Esto plantea la nacionalización sin compensación de los bancos, los monopolios comerciales y las empresas que cierran o suspendan, bajo control de los trabajadores.

Está en bancarrota el capitalismo, no la humanidad; rescatemos los recursos de la humanidad, sus posibilidades, su cultura y su tecnología de las manos del capital, y pongámoslos al servicio de la gran mayoría.

El embajador de Israel se suma al pedido de criminalización de las protestas contra la masacre en Gaza

Según informa la Agencia Judía de Noticias (21/1), el embajador de Israel, Daniel Gazit, se sumó a la ofensiva del presidente de la Daia, Aldo Donzis, quien pidió al gobierno argentino la "judicialización", bajo pretexto de antisemitismo, de los que se movilizan contra la masacre sionista en Gaza.

Según Gazit, cada vez que "el Estado hebreo sale a defenderse contra el terror siempre hay grupos antisemitas para sementar el odio contra Israel y los judíos". El embajador denomina 'defenderse' al bombardeo criminal e indiscriminado de la población civil de Gaza, y 'grupos antisemitas' a los que se movilizan contra esa masacre. El embajador no señala la represión contra israelíes, judíos y árabes, que se movilizan en Israel contra la misma masacre, como una expresión de antisemitismo del Estado sionista. La ONU se ha visto forzada a crear un grupo de trabajo para investigar los crímenes de guerra cometidos por Israel en Gaza, y el Estado de Israel ya ha formado una comisión de juristas para preparar su defensa. No del terror sino de la acusación de crímenes de guerra.

No es cierto que la movilización contra los crímenes del sionismo atice el antisemitismo. Los círculos de la alta burguesía mundial, históricamente antisemitas (los cristianos evangélicos que apoyan al lobby sionista en Estados Unidos son descendientes del racista y antisemita Klu Klux Klan), se distancian de esos sentimientos cuando observan que Israel y el sionismo 'se juegan' por los intereses del imperialismo mundial. La movilización popular contra las masacres, por el contrario, si logra incorporar a grandes masas, eleva la politización de éstas, les da una comprensión más completa del proceso social, y derrota de este modo los prejuicios antisemitas. Nunca se ha visto antisemitismo en un escenario de ascenso luchas populares, y siempre en los períodos de reflujo. El embajador y el presidente de la Daia tendrían que abocarse al deber elemental de recordar, en sus discursos o peroratas, que el período auténticamente antisemita en Argentina tuvo lugar bajo la dictadura militar. En esa época, cuando los trabajadores estaban derrotados, y gobernaban los amigos de Israel como Videla, Martínez de Hoz, los Alemann, los chicos judíos morían en las cámaras de los grupos de tareas, doblemente torturados por su condición judía. Cuando en 1982 nos movilizamos, en Buenos Aires, contra la masacre sionista-cristiano-falangista en Sabra y Chatila, la dictadura antisemita se batía en retirada y los luchadores populares volvían por sus fueros. En el período infausto de la dictadura, como en el de Pinochet en Chile, Israel colaboraba con las dictaduras militares (y sus fuerzas especiales entrenaban a los grupos de tareas en Centroamérica) y sus 'delegaciones' eran cómplices con su silencio. Esto fue demostrado en una comisión reunida en! la Knesset (parlamento) de Israel, con la presencia de Herman Schiller.

Nosotros acusamos, los luchadores, los socialistas. Ustedes, embajador y presidente de la Daia, en lo que atañe al antisemitismo, se encuentran en el banco de los acusados.

Jorge Altamira

21 de enero de 2009

INFAMIA DEL PRESIDENTE DE LA DAIA CONTRA EL PARTIDO OBRERO

En el día de ayer, los diarios Clarín y Ámbito Financiero dan a conocer una denuncia del titular de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas contra supuestos pronunciamientos "antisemitas" y "llamamientos a pogromos" por parte de Jorge Altamira y del Partido Obrero. Aldo Donzis hizo este planteo ante Sergio Massa y Aníbal Fernández.

Se trata sencillamente de una infamia. Basta para probarlo la lectura de Prensa Obrera y los pronunciamientos y videos de nuestra página de Internet. Donzis le ha pedido al gobierno argentino "judicializar" a quienes participan de las movilizaciones contra los crímenes de guerra contra el pueblo de Gaza, o sea criminalizar la protesta social.

La amalgama judaísmo-sionismo es una pérfida maniobra del sionismo, en primer lugar para borrar dos siglos historia del movimiento socialista judío. El sionismo es la antípoda del judaísmo, porque el mensaje mesiánico del judaísmo, esencialmente universal, es lo contrario de la demagogia chauvinista, discriminatoria y bélico criminal que ha caracterizado al sionismo. Numerosos intelectuales judíos han denunciado la masacre contra Gaza como "genocidio" y "holocausto"; al muro levantado contra los palestinos como "el Muro del Apartheid"; y al enclaustramiento del pueblo de Gaza como "un campo de concentración".

Mientras que la imputación de la DAIA contra el PO es una infamia, no lo es la condena de toda la comunidad progresista del país a la complicidad de la dirección de la DAIA y del gobierno de Israel con el régimen criminal de la dictadura militar argentina. Los secuestros, torturas y asesinatos de ciudadanos argentino-judíos, por parte de la dictadura de Videla, han sido el mayor episodio de antisemitismo y pogrom de toda la historia de América Latina. Numerosos sectores de la comunidad judía han denunciado la ineficacia y hasta la complicidad de quienes nos acusan con el encubrimiento de los autores del atentado contra la AMIA y con la tentativa de usar este atentado al servicio de la política criminal de los Estados Unidos en el Medio Oriente.

Jorge Altamira

DISCURSO DE JORGE ALTAMIRA FRENTE A LA EMBAJADA DE ISRAEL EN OCASIÓN DE LA MANIFESTACION DEL 6 DE ENERO DE 2009 EN DEFENSA DEL PUEBLO DE GAZA

Compañeras y compañeros, en el día de ayer ocurrió algo extremadamente instructivo. Un conjunto de diplomáticos de la Unión Europea le pidieron al gobierno de Israel que cesara el fuego y que permitiera el ingreso de una ayuda humanitaria a la Franja de Gaza. Cuando terminaron las deliberaciones, la canciller del gobierno israelí salió para anunciar los resultados. Y anunció que el gobierno israelí estaba decidido a terminar por completo con la obra emprendida con la invasión, que era acabar por completo con la estructura política, social y territorial de Gaza. Según el diario Il Corriere Della Sera de hoy, la noticia de que el gobierno de Israel está dispuesto a llevar la masacre hasta sus últimas consecuencias provocó un salto del 7% en la bolsa de Tel Aviv. El capital financiero internacional, el que despide a los trabajadores de la General Motors, el de este financiero Madoff, que estafo por 50 mil millones a sus clientes, el que despide en Córdoba, el que cesantea o vacía en Indugraf, el que despide a los compañeros contratados, celebró en la bolsa de Tel Aviv la continuación de la masacre del pueblo palestino. Y hay gente que cuestiona la afirmación de que ésta es una guerra capitalista, de opresión, de salvajismo, para defender un orden internacional que se basa en la explotación de la inmensa mayoría del mundo por un puñado de ricachones y parásitos que no vacilan en ensangrentar a la humanidad para defender sus privilegios. El pueblo judío de Israel tendría que mirar a la bolsa de Tel Aviv para comprender que sus aliados están en la Franja de Gaza y sus enemigos están en las cámaras de comercio y las cámaras industriales, sean de judíos o de no judíos. Y en parte también lo comprenden: hace 48 horas 150 mil manifestantes marcharon en el norte de Israel para reclamar el retiro de las tropas, el cese del fuego respecto a Gaza, compuesto por una mayoría de árabes con ciudadanía israelí. Pero en la jornada siguiente 15 mil manifestaron en la propia capital por el mismo reclamo, pertenecientes a las organizaciones de izquierda revolucionaria y a las organizaciones sociales dentro de Israel. El Partido Obrero llama a oponer a la masacre del pueblo palestino por medio la unidad internacional de los trabajadores, sin divisiones nacionales, para aplastar al imperialismo mundial en todas sus manifestaciones, fuentes de miseria, de masacre y de guerra. Este es nuestro mensaje socialista.

Naturalmente, bajo la presión de la opinión pública hay algunos gobiernos europeos que están intentando por vía diplomática un cese de fuego. Pero ya vimos cómo operaron en el pasado: mientras ellos negocian ese cese de fuego, los comandos y las tropas de ocupación siguen con su labor de masacre. Y ustedes van a ver que ese cese del fuego lo van a conseguir cuando el último resistente haya muerto. Y saldrán sobre cadáveres de los luchadores a proclamar la victoria de la diplomacia internacional. Denunciamos a estos sinvergüenzas: Sarkozy, Merkel, Zapatero, que juegan con la sangre y la resistencia de los pueblos. Sarkozy ha viajado a Siria para reclamar que si cesa la resistencia del pueblo palestino, él va a negociar en Tel Aviv un cese del fuego. Si cesa una huelga, el patrón no manda más a los matones a reprimir los piquetes de huelga. Si cesa la lucha, la policía vuelve a la comisaría. ¿Pero cómo podemos renunciar a esa lucha? Nosotros defendemos la causa nacional palestina no como una finalidad en sí misma, y esto tiene que quedar muy claro, porque nosotros no somos nacionalistas sino que nosotros somos socialistas, nosotros defendemos la lucha nacional palestina como una herramienta de combate contra la opresión internacional del imperialismo, que permita a los trabajadores de todo el mundo acabar con el capitalismo mundial e instaurar una república mundial socialista de trabajadores y de campesinos.

Esta guerra ha mostrado todas las miserias: la miseria nacional y popular de Cristina y su marido, que tienen las bolas suficientes hoy para ir a la Esma y decirle a alguien que baje el retrato de Videla, pero que no tienen el coraje político de enfrentar al Estado sionista y decirle, en nombre de los mismos derechos humanos por los que luchamos en Argentina, en nombre de esos derechos humanos, que rompe toda relación con Israel si no cesa la masacre. Y lo puede hacer Chávez, y lo puede hacer Tabaré Vásquez, y lo puede hacer Lula. No lo hacen, pero cuando tuvieron que coquetear con la OLP y el movimiento palestino para sacarse lustre de progresistas y ganar las elecciones en sus países, qué diferentes que eran. En los congresos del Partido de los Trabajadores de Brasil, las delegaciones palestinas se paseaban y codeaban con Lula, porque eso le servía a Lula para trampear al pueblo brasileño y terminar gobernando para el FMI. Ahora Lula le dice a estos resistentes, casa por casa, les dice si te he visto no me acuerdo, tenes que acatar a la ONU, tenes que acatar a Obama, etc. Y como se leyó desde esta tribuna durante el acto, ¿dónde está Carrió? Carrió, la de la trasparencia republicana, la mujer incorruptible, la mujer que quiere y que sostiene que simplemente respetando la democracia los pueblos pueden superar sus niveles de miseria. Esta charlatana de Hanna Arendt, de la transparencia y del republicanismo, es cómplice de una de las peores masacres que ha visto la humanidad. Hay que ir a los barrios y explicarlo, no hay que perdonarle políticamente a la Carrió, a los Scioli, a los Macri y por fin a los Lozano, a los Solanas, a los Tumini, que nadie los vio en la manifestación de hoy. En esta tribuna, yo tenía al lado mío a Mario Cafiero y le pregunté dónde están tus socios políticos Solanas y Lozano, y me contestó que él no es un orgánico de la centroizquierda y que no puede responder por los demás. Pero esta gente, en una ciudad con tan importante colectividad judía, cuida más los votos de octubre del 2009 que la sangre de los pueblos y la lucha. Por eso le digo a Solanas: si por los votos podes traficar la lucha histórica de los pueblos, metéte los ferrocarriles e YPF en el culo; que el día que seas presidente las vas a privatizar como Menem, las vas a privatizar como De la Rúa; ningún ferrocarril, ningún pozo de petróleo, ninguna empresa estatal vale la sangre de los luchadores que en el mundo están buscando un camino de liberación. El Partido Obrero no está para dar lecciones, el Partido Obrero está para ponerle el hombro a todos aquellos que luchan y para decirles que el objetivo de nuestro apoyo es el socialismo, acabar con los Bush y con los Obama, con los Maddof, con la General Motors, acabar con la bolsa de Tel Aviv y con el merval de Buenos Aires, e instaurar en el mundo una república socialista que haga que la vida merezca ser vivida.

Quiero concluir con lo siguiente: la manifestación, la marcha callejera es un instrumento importante de los pueblos, no es algo rutinario, no se hace para cumplir ni constituye un ritual. Es uno de los instrumentos que tenemos: uno, para presionar sobre los Estados y para presionar sobre los gobiernos; dos, para desarrollar la conciencia emancipadora de las nuevas fuerzas que se incorporan a la lucha. Por eso llamo a tomar en serio estas manifestaciones, a repetirlas en los barrios, a hacer actos, mesas redondas, a sacar a la gente de las casas con una convocatoria para detener la mano del imperialismo mundial, porque si detenemos la mano del imperialismo mundial en el marco de esta crisis capitalista tan inmensa, nos estaremos ayudando a nosotros mismos en la lucha para que la crisis capitalista la paguen los capitalistas y no los trabajadores, y para que los próximos sucesos que protagonicemos nos lleven a victorias cada ! vez mayores y nos acerquen a una victoria definitiva.

Gracias compañeros, y mantener las banderas altas y la disposición de combate.

18 de enero de 2009

ALTO A LA MASACRE

Comité de Solidaridad con el Pueblo Palestino

El Comité de Solidaridad con el Pueblo Palestino, conformado en Córdoba por más de 30 organizaciones políticas y sociales que se unen al reclamo mundial por el cese del ataque israelí contra la población de Gaza, pone en conocimiento de la población trabajadora y el conjunto de la ciudadanía democrática sus próximas actividades.

Esclarecimiento y movilización

El Comité ha programado también para el próximo lunes 19 una JORNADA CULTURAL DE ESCLARECIMIENTO, a partir de las 19,30 hs. en la Plazoleta del Fundador, con una radio abierta.

En tanto, el jueves 22 se realizará una marcha en el marco de la JORNADA NACIONAL DE MOVILIZACION. La concentración está prevista para las 19 hs. en Colón y la Cañada para marchar hasta el Consulado de Israel, ubicado en Vélez Sársfield 82 donde se realizará el acto de repudio a los ataques israelíes contra el pueblo palestino y culminar en Plaza San Martín, donde se desarrollará un Festival con la participación de intelectuales y artistas de distintas disciplinas.

El Comité de Solidaridad con el Pueblo Palestino viene manifestando con marchas y otras actividades, el más enérgico repudio al criminal bombardeo y posterior invasión israelí sobre la Franja de Gaza, reclamando:

1. EL INMEDIATO Y DEFINITIVO ALTO A LA MASACRE que está realizando el Estado terrorista de Israel con su ejército en la Franja de Gaza, con el respaldo del imperialismo yanki y la Unión Europea. Por el derecho al retorno de los palestinos a sus tierras. Por su derecho a elegir sus representantes y ejercer su independencia y soberanía nacional.
2. EL RETIRO INMEDIATO DE LAS FUERZAS DE OCUPACION y que se permita la entrada de alimentos y organismos sanitarios.
3. LA RUPTURA DIPLOMATICA Y COMERCIAL de la Argentina y el MERCOSUR con el gobierno sionista y genocida de Israel. Apoyo al boicot de los productos de origen y capital israelí.
4. EL LEVANTAMIENTO URGENTE DEL BLOQUEO impuesto a la Franja de Gaza por Israel y Egipto y el derribamiento del muro del apartheid.
5. LIBERTAD A LOS MAS DE 12000 PRESOS POLITICOS PALESTINOS (entre ellos más de 2000 niños/as, mujeres y menores de 18 años) en cárceles israelíes y solidaridad con el pueblo palestino y sus organizaciones de resistencia.
6. POR EL RETIRO DE LAS TROPAS YANKIS de Irak, Afganistán y todo el Medio Oriente.


LUNES 19 DE ENERO – 19.30 hs.: "JORNADA CULTURAL Y DE ESCLARECIMIENTO" - Plazoleta del Fundador.

JUEVES 22 DE ENERO - 19 hs.: "JORNADA NACIONAL DE MOVILIZACION" - Colón y Cañada - Marcha al Consulado de Israel y Festival en Plaza San Martín.



Comité de Solidaridad con el Pueblo Palestino:

Asociación de Ex-Presos Políticos de Córdoba - Asociación Civil Alfil - Centro de Estudios Agustín Tosco - MPR - PSOL - PC (Partido Comunista) - PL (Partido de la Liberación) - CESARC Histórico - MLN 26 de Julio - PTS ( Partido de los Trabajadores Socialistas) - PO (Partido Obrero) - Corriente Nacional y Popular 25 de Mayo - MPR Quebracho - IS (Izquierda Socialista) - UniDHos - MST (Movimiento Socialista de los Trabajadores) - MPSOL - Corriente Nacional y Popular del Partido Intransigente - MTR (Movimiento Teresa Rodríguez) - ADIUC - MAS - Partido Humanista - Humanismo y Liberación - CCODAV (Coordinadora Córdoba en Defensa del Agua y la Vida) - Centro de Residente Bolivianos - OLN Fogoneros - Comisión Junto a Bolivia - Agrupación Montoneros - Poder Popular - Agrupación Mate Cocido - PR (ml) - Comunicadores Solidarios - Colectivo Los Galpones - Agrupación Cultural "El Sacudón" - Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas de Córdoba - Mil por Cuba - Cesarc - Hoy por Cuba - Juventud del MLN 29 (Integrantes de MASCUBA Córdoba) - Legisladora Provincial Adela Coria (Frente Cívico y Social) - SERPAJ (Servicio Paz y Justicia) Regional Córdoba - Cooperativa de Trabajo Documental "El Cuarto Patio" - Sindicato Unión Obrera Gráfica - Corriente Atilio López - Colectivo Artístico Arte y Parte - Movimiento Cultural "El Juntadero" - Movimiento Poetas de la Calle - Abuelas e Hijos de Plaza de Mayo de Córdoba - Biblioteca Popular Maria Saleme - Agrupación Barrial Independiente Celeste y Blanca - Colectivo Indymedia Córdoba - Peperina Rebelde - CUBa-MBS - ............. (siguen firmas).


Los interesados pueden comunicarse a los teléfonos (0351) 155508128 – 155477903 ó 152139903

E-mail: jtorriglia@hotmail.com; jmartiren@hotmail.com; cin_ga@hotmail.com; mtrcordoba@yahoo.com

15 de enero de 2009

Metalmecánicos de Córdoba

PTS: a confesión de partes ...

¿Fue o no fue un triunfo el pase de los despidos a suspensiones en Gestamp?

En la respuesta a las críticas al PO (LVO 309), ahora el PTS nos dice que los trabajadores de Gestamp "están disconformes con el acuerdo que firmó el Smata". Sería la primera vez que un trabajador está disconforme con un triunfo, como caracterizó el PTS a las suspensiones. Generalmente, los únicos disconformes con los triunfos obreros son la patronal y la burocracia.

Esta voltereta (y no es la única) está hecha en medio de mentiras. Sigue insistiendo que en ocasión de la preparación del acto del 19-20 de diciembre nos opusimos a que hablaran los trabajadores de Gestamp porque eran "desocupados". Es mentira. Nos opusimos (el PO y todas las corrientes) a que hablara alguien del PTS en nombre de trabajadores a los cuales no representaba. Para peor, que hablara para ensalzar un "triunfo" del cual los ahora el PTS dice que los trabajadores "están disconformes".

Los dirigentes del PTS se han creado un anticuerpo contra las críticas del PO: no importa lo que el PO diga porque el PO no tiene influencia en la lucha. Pero si el PTS sólo pudiera opinar sobre lo que ocurre allí donde tiene influencia, dejaría de sacar su periódico; esto vale para Córdoba y para el Smata. Las críticas son también una forma de ganarse una influencia, no para encubrirse a sí mismo con chicanas. Que nuestra crítica tiene influencia lo prueban los trabajadores que dicen que "están disconformes" con lo que el PTS presenta como un "triunfo".

En un artículo de "un trabajador de Iveco" de la misma edición (309) se crítica por primera vez en los últimos dos meses a la burocracia por la política de dividir fábrica por fábrica, y ha aparecido la consigna del "reparto de las horas de trabajo", estas dos cosas ¡como subtítulos! O sea que se toman las posiciones del PO. Además, los 1.050 pesos ya no son el 60%. Son sólo 1.050 pesos que los trabajadores de Iveco, ahora nos cuentan, han rechazado (por lo que el PO sacó una declaración diciéndoles a los trabajadores que tenían razón en rechazarlo y reclamar el 75%).

De todas maneras, el artículo sigue revelando una adaptación a la burocracia. El PTS no habla de la ocupación de fábrica. Hay que discutir la ocupación de fábrica porque la patronal ya ha anunciado, en la "cena de fin de año", que va a despedir no sólo a las contratados sino también a los efectivos, porque piensa reducir a casi un tercio la producción diaria de camiones. La planta está siendo vaciada, ya se han trasladado camiones a Materfer, y no se sabe exactamente qué pasa con las áreas productivas; nuevamente se ha suspendido a todo el personal por una semana; es decir, la patronal se prepara para la guerra. En el artículo del "trabajador de Iveco" se hace un fuerte hincapié en la política de división de la burocracia y llama a disputarle "hombre a hombre a la burocracia", explicarles a los trabajadores que los delegados títeres desmoralizan, a hacer nuevos cortes y movilizaciones, etc., pero ¿para qué? ¿Para ir de nuevo a la puerta de la Secretaría de Trabajo?, ¿para "influir" en las negociaciones? La ocupación de fábrica está siendo discutida por el activismo y está impuesta por la situación: la patronal va a todo o nada.

Volviendo a la respuesta del PTS al PO, hay que denunciar que durante las movilizaciones los "mecánicos del PTS" se dedicaban a mandar mensajes de texto a los trabajadores que hablaban con el PO, diciéndoles que no se acercaran a nosotros porque "era peligroso". En una de las caravanas, le mandaron un mensaje al trabajador que en su auto llevaba a activistas de Tribuna Docente diciéndole que los baje del auto (cosa que el trabajador, por supuesto, no hizo). Estas actitudes fueron no sólo con respecto a nuestra organización, sino al resto de la izquierda que se acercó a las movilizaciones y caravanas. El PTS actúa como una mafia de intrigantes.

Eduardo Salas

Viernes 16/01 - 23:30 hs.: FESTIVAL SOLIDARIO CON EL PUEBLO PALESTINO

En repudio a la masacre que lleva a cabo el Estado sionista sobre Gaza

Con bandas, intervenciones, murgas y más ...

Exigimos:

* Cese de la agresión militar sionista a Gaza.

* Retiro de Israel de todos los territorios ocupados.

* Liberación de todos los presos políticos palestinos de las cárceles sionistas.

* Juicio y castigo a todos los responsables de los crímenes de guerra contra el pueblo palestino.

* Abajo el bloqueo a Gaza impuesto por Israel y Egipto, abajo el muro del apartheid y liberación de todas las fronteras

* Derecho al retorno para los palestinos.

* Anulación del acuerdo de libre comercio entre el Mercosur e Israel.


Viernes 16/01 - 23:30 Hs. - Santa Rosa esq. Mariano Castex - Alberdi

8 de enero de 2009

LA SOLUCION FINAL


La finalidad política de la barbarie que está acometiendo Israel en Gaza es sepultar para siempre la resistencia nacional y reducir a la población a un conglomerado sin identidad política ni nacional.

Política y humanamente, es un genocidio.

Para llevar hasta el final una tesis fundacional del sionismo -darle "las tierras sin pueblo (el palestino) al pueblo sin tierras (el israelí)"- es necesario suprimir a ese pueblo y confiscar su territorio.

Todas las propuestas de tregua o de cese del fuego en danza han sido rechazadas por Israel (y por su mandante, Estados Unidos) en función de esa premisa: los palestinos solamente tendrán derecho a sobrevivir (y a conmemorar a sus familiares salvajemente asesinados) si abandonan toda resistencia a la ocupación militar, a la confiscación de tierras y viviendas, por la libertad personal y, claro, por la autonomía política.

Israel dice que pelea por el reconocimiento de su derecho a la existencia -que casi todos los Estados, sin embargo, han consagrado- y que por la misma razón aplasta al pueblo palestino -cuyo derecho a la existencia nacional ningún Estado, sin embargo, acepta.

La masacre de Gaza es una tentativa de imponer la solución final a la cuestión palestina.
Esta solución final apunta a consolidar el orden internacional armado por el imperialismo contra sus clases trabajadoras y las naciones más débiles y sometidas.

Por eso recibe el apoyo de todos los Estados, en especial de los regímenes árabes, y más aun cuando la bancarrota internacional amenaza al conjunto del capitalismo.

Se trata, sin embargo, de una fantasía reaccionaria y bárbara, que deberá fracasar en forma incluso más contundente que la tentativa de solución final que el hitlerismo intentó contra el pueblo judío.

En primer lugar, porque deberá enfrentar una resistencia nacional que no disminuirá sino que crecerá, como ha ocurrido en las últimas siete décadas y, por sobre todo, en envergadura y calidad.

En segundo lugar, porque deberá enfrentar el derrumbe del capitalismo mundial y del inestable orden político actual, y la lucha popular que este derrumbe desencadenará en el mundo entero.

La atrocidad de lo que está ocurriendo en Palestina echa una nueva luz sobre ‘nuestra' política local -pues desde los Kirchner hasta los Macri, Reutemann, Carrió o Binner se ha formado una santa alianza de encubrimiento de la masacre de Gaza.

Pero por sobre todo ha echado una luz definitiva sobre los Solanas, Lozano, De Gennaro, Ibarra, Bonasso, Luis Juez y sus símiles, quienes han decidido que la mejor opinión es el silencio.

Los cómplices políticos o vergonzantes de estos crímenes contra los derechos nacionales y los humanos más elementales no serán capaces nunca de levantar un meñique por la defensa de nuestros derechos nacionales y de la lucha de los trabajadores - como no fueron capaces de hacerlo nunca en el pasado.

Trabajadores de todos los países, unámonos contra la barbarie imperialista.

7 de enero de 2009

Jueves 08/01 - 18:30 Hs.: GRAN MOVILIZACIÓN CONTRA LA MASACRE AL PUEBLO PALESTINO

El Partido Obrero, junto a organizaciones sociales, sindicales, estudiantiles y de derechos humamos, convoca al pueblo de Córdoba a movilizar y manifestar su repudio ante la masacre perpetrada por el Estado terrorista de Israel contra el pueblo palestino.

* Alto a la masacre del Estado terrorista de Israel y su ejercito en Gaza. Retiro inmediato de su fuerza de ocupación.
* Ruptura diplomática y comercial de Argentina y el MerCoSur con el Estado sionista y genocida de Israel.
* Levantamiento inmediato del bloqueo impuesto a la Franja de Gaza por Israel y Egipto.
* Solidaridad con la resistencia popular Palestina. Exigimos la libertad de los más de 12000 presos políticos (incluidos más de 2000 niños/as) palestinos en cárceles israelíes.
* Retiro inmediato de las tropas yankis de Irak, Afganistán y todo el medio oriente.


Concentración y Marcha: COLON Y GENERAL PAZ
JUEVES 8 DE ENERO - 18:30 HS.

HACIA EL CONSULADO DE ISRAEL
Vélez Sarsfield 87

Comuníquese con Eduardo Salas: (0351) 155-477025

6 de enero de 2009

Charla debate en Alberdi


LA LUCHA POPULAR POR EL DERECHO A LA VIVIENDA

Proyección del documental “Manzana 30” (Ojo Obrero, 2007)

MIERCOLES 05/01 – 18:30 HS.

Santa Rosa 2601

Invitan:

Partido Obrero
Polo Obrero

2 de enero de 2009

Lozano, Kritz y el Banco Mundial

¿Y si el subsidio por hijo que proponen Lozano, Solanas, De Gennaro (y ahora probablemente su flamante aliado, el ex menemista y el ex kirchnerista Luis Juez) no fuera otra cosa que una propuesta disfrazada de los grandes capitales en el marco de la presente bancarrota capitalista internacional?

En su discurso en la Cámara de Diputados el 10 de diciembre, al tratarse las "medidas anti-crisis", que luego retomó bajo forma de artículo en su virtual oficina de prensa (Crítica, 20/10), Lozano no dice una sola palabra contra la devaluación del peso. El silencio es significativo porque en el recinto se escucharon voces que sí la propusieron, incluido un acuerdo con el FMI. O sea que Lozano se hizo, como se diría, ‘el boludo', y esto por partida doble, porque la devaluación es reclamada abiertamente por la inmensa mayoría de los capitalistas, por toda la oposición patronal y por una gran parte del oficialismo - como Curia o Aldo Ferrer, y hasta por Agustín Rossi, quien acaba de presentar un proyecto de ley para eliminar las retenciones a la soja. La consecuencia directa de la devaluación sería una enorme desvalorización de los salarios de los trabajadores y una redistribución regresiva brutal de los ingresos. Pero todo tiene su explicación: Lozano está en yunta con Eduardo Buzzi, el lobbysta de la ‘burguesía rural' (la única y verdadera, según Lozano), que integra con Eduardo Duhalde el Movimiento por un Modelo Productivo. Duhalde hizo público su reclamo de un acuerdo con el FMI y un dólar a 4,40 pesos de inmediato.

El subsidio por madre e hijo que propugna Lozano jamás lograría producir una redistribución progresiva del ingreso, por la simple razón de que carece de las dimensiones para ello. Lo único que podría hacerlo, en un marco capitalista, sería una gran suba de salarios y la vigencia irrestricta del derecho al trabajo - e incluso esto solamente sería efectivo mediante un enérgico control obrero que impidiera que esas mejoras se tradujeran en mayor inflación o en un bloqueo de inversiones. Mucho menos, por lo tanto, serían capaces de producir una redistribución en el marco de una mega devaluación, cuyo punto de partida sería un masivo empobrecimiento de los trabajadores con o sin empleo.

Es interesante observar que Lozano no presenta su programa en el cuadro de un planteo de intervención contra el capital, empezando, claro, por una denuncia de la devaluación, sino con uno dirigido contra los trabajadores. Es así que opone la eliminación de la ‘tablita de Machinea', que para Lozano beneficia a "los sectores de ingresos altos" (como los petroleros, los metalúrgicos calificados, los mineros, un sector amplio del personal de informática), a la prioridad del subsidio por hijo y madre, lo cual equivale a postular que este subsidio lo paguen los obreros de salarios mayores. Lo que postula Lozano es la redistribución de la pobreza. Aclaremos, de paso, que la ‘tablita de Machinea' es un mecanismo de confiscación más amplio del salario de lo que entrevé Lozano, pues incluye la desvalorización del piso del mínimo no imponible, de modo que hoy se encuentra gravado un salario equivalente al costo de una canasta familiar. No es casual que la burocracia sindical que comulga con Lozano (los Yasky, De Gennaro, Wasiejko, del neumático, o los burócratas metalúrgicos de Villa Constitución) haya entregado la lucha salarial de los afiliados a sus sindicatos, pues resultarían privilegiados frente a las jefas de hogar, los trabajadores en negro, los desocupados y los que ganan menos del mínimo. En su momento, Lozano ‘calculó' el mínimo ‘normal' en una suma equivalente a 1.700 pesos (ver Prensa Obrera Nº 1.048, 31 de julio de 2008).

El desenmascaramiento de la supuesta posición progresista de Lozano en materia de ingresos viene a cuento porque coincide con el planteo PRINCIPAL de los grupos capitalistas, sus asesores y el Banco Mundial, en el marco de la crisis en curso. La palabra de orden de esta gente es crear una red de seguridad social - lo que permite anticipar los despidos masivos que están preparando. La asistencia social funcionaría, de este modo, como la contrapartida de la tolerancia a los despidos en masa. El principal factor de cesantía masiva sería, naturalmente, una mega devaluación, que Lozano y compañía otorgan en cuanto callan.

Es lo que propone el asesor de empresas Kritz. Ante la existencia de 11,5 millones de pobres y 3,9 millones de indigentes, Kritz aconseja "ir a un planteo de contingencia, de distribución directa de ingresos (...) dirigir políticas a la población más vulnerable" (La Nación, 23/12). El asesor resalta el costo (bajo) y los beneficios (altos) de la política que defiende: "Un plan de asistencia alimentaria costaría entre medio y un punto del producto bruto, y me parece que no tener medidas para los más pobres ahora es tomar demasiado riesgo (...)". O sea que incluso ni siquiera este plan menesteroso está dictado por la justicia sino por el miedo. "Los montos de los programas, añade Kritz, deberían estar relacionados con la línea de indigencia (eso implica el valor de una canasta de alimentos básicos que, para una familia tipo, está estimada por el cuestionado Indec en 444 pesos, mientras el plan Jefes otorga 150 pesos)" (ídem). Kritz dice claramente que el objetivo político de la "redistribución" es crear una red de seguridad social (barata) para que las empresas puedan despedir a todos los que quieran. La alternativa, dice Kritz, es arriesgarse a una rebelión popular. Lo mismo dice el Banco Mundial, el cual acaba de reprochar a China que su plan de reactivación contemple numerosas obras de infraestructuras, cuando debería priorizar el establecimiento de una red de asistencia social. A diferencia del seguro por desempleo, estas redes son financiadas por los contribuyentes, no por los patrones, y no constituyen una proporción fija y alta en relación con los salarios vigentes.

Pero, además, una redistribución de ingresos que no afecta al capital, no es tal. Para que sea válida debería plantear la distribución de las horas de trabajo disponibles entre el conjunto de la población activa (menos el personal que debería recibir formación profesional, a cargo de las empresas, y además de eso una elevación de los salarios). Este es un aspecto del problema, el otro es metodológico, porque la propuesta de los Lozano y de los Kritz supone la intervención del aparato del Estado y por lo tanto la formación de una sociedad y un Estado clientelares; la lucha por la incorporación de todo el mundo al trabajo y por el aumento de los salarios, supone la movilización independiente de las masas, o sea fuera de la tutela estatal.

Los planteos de Lozano coinciden con los de Kritz, porque constituyen la única respuesta ‘viable' del capital frente a la crisis. La bancarrota capitalista supone la desvalorización de los capitales, de modo que un ‘economista' que se precie de tal jamás financiaría una transferencia de ingresos a los sectores populares a partir de una imposición sobre el capital. Los bancos, en el mundo, reciben plata del Estado, no lo contrario. La quiebra de los bancos crea la ilusión óptica de que la riqueza social ha desaparecido, cuando lo que se desvanece es el capital, no la forma material de lo que se ha producido bajo su hegemonía. Los desalojos crecen por millones, pero las casas están ahí; lo mismo ocurre con los despedidos y las fábricas. Se trata de tomar el control del capital, cuya realidad capitalista se ha desmoronado con antecedencia, para darle un carácter social a la riqueza efectivamente creada. Para los economistas que especulan con las categorías del capitalismo, esto es simplemente inimaginable, por eso prefieren sacarle a un pobre con trabajo para darle (nada) a otro que no lo tiene. Mientras tanto, la sociedad paga el derrumbe capitalista y ayuda con su sacrificio a restablecer un orden social superado.

Lo ‘maravilloso' del nuevo engendro centroizquierdista, que ha juntado a los Tumini con los Juez y con los Solanas, Cafiero y Lozano, más los Ibarra y quizá los Alberto Fernández - es que tenemos a los ex nacionales y populares entreverados con los sojeros que descubrieron tardíamente a una burguesía rural que no resiste una caída de precios, más los agentes de las AFJP, que le pagaron a éstas la totalidad de la deuda pública de la Ciudad, con un enorme premio adicional. Con semejante política pretenden no volver a fracasar. En 1993, ‘Pino' Solanas votó la intervención de Schiaretti a Santiago del Estero, contra el santiagueñazo - ahora acompañan el golpe de mercado, la devaluación, que podría culminar más allá de lo comercial.

Jorge Altamira

El primer crimen de guerra de Obama

Israel masacra a los palestinos de Gaza

Israel lanzó un ataque artero (una masacre) contra la Franja de Gaza. Desde hace tres días, aviones y helicópteros de combate están machacando el estrecho territorio donde viven hacinados un millón y medio de palestinos. El saldo provisional es de 400 muertos y más de 1.000 heridos. Las morgues y los hospitales están colapsados. Los atacantes utilizan bombas de fragmentación; por eso, los cadáveres llegaron a la morgue "en pedazos" (El País, 29/12). El primer ataque, el sábado 27, fue lanzado a la hora en que los niños salían de las escuelas y las mujeres se dirigían a las compras (ídem); el número de muertos y heridos civiles es enorme. Es la mayor masacre de la población palestina en la Franja de Gaza en la actual generación; para encontrar algo similar hay que remontarse cuarenta años hasta la Guerra de los Seis Días.

El ataque fue respaldado de manera unánime por todos los partidos sionistas, incluidos aquellos que se dicen de izquierda. Como siempre, el papel más despreciable en este concierto lo ocupan los "izquierdistas" y los "pacifistas". Amos Oz, fundador del movimiento "Paz Ahora" llega a escribir que "está claro que el deseo ferviente de Hamas es inducir a Israel a que emprenda una operación militar (...) el cálculo es sencillo (...) si mueren muchísimos palestinos inocentes, tantísimo mejor" (La Nación, 27/12). Este escritor es un sinvergüenza.

La masacre israelí toma como excusa el fin de la tregua establecida hace seis meses por Hamas, que gobierna la Franja de Gaza, pero por sobre todo necesita propiciar un golpe mortal a los palestinos y a Hamas, para dejar libre el terreno al próximo gobierno de Obama. Los cohetes que dispara la milicia palestina son artesanales, de escaso alcance, incapaces de provocar grandes daños y un elevado número de víctimas. La desproporción de la respuesta sionista es abismal: el Estado sionista utiliza aviones de última generación, helicópteros sofisticados y toneladas de bombas "inteligentes" guiadas por sistemas de alta precisión. Como denuncia un sitio web judío que rechaza la guerra: "No hay nada de gloria o de valor en volar sobre una gigantesca prisión y dispararle a su pueblo usando helicópteros y jets de combate" (ynet.com, 29/12).

Una deliberada política de masacre

Israel abandonó la Franja de Gaza en 2005. Aunque Gaza pasó a ser gobernada por la Autoridad Palestina, Israel controlaba todos los accesos a la Franja y ejercía el control de su costa y de su espacio aéreo. El retiro de Israel convirtió a Gaza en una prisión a cielo abierto; el ejército sionista era el carcelero. Por eso, el Estado sionista seguía manteniendo todas las obligaciones respecto de la población civil que la ley internacional fija para las potencias ocupantes.

En enero de 2006 se realizaron las elecciones de la Autoridad Palestina: Hamas le impuso una derrota abrumadora a la OLP del presidente Abu Mazen. El voto por Hamas fue la expresión de un repudio popular masivo a la dirección de la OLP, involucrada en múltiples casos de corrupción y que mostraba una completa impotencia frente a las agresiones sionistas.

Con el ascenso de Hamas al gobierno, Israel comenzó a estrechar el cerco sobre Gaza. Los pasos se cerraron al acceso de mercancías elementales como alimentos, medicinas, combustibles. Israel desató una guerra económica que arruinó al comercio y a las empresas palestinas. La desocupación creció al 70%; la mayoría de las fábricas cerraron; sin trabajo, la población estaba condenada a alimentarse de la ayuda asistencial. La falta de materiales de reparación desató una crisis sanitaria de enorme envergadura, pues los sistemas de cloacas colapsaron. Israel retenía los impuestos que debía girar a Gaza; también bloqueaba la ayuda internacional.

Israel no se limitó a cercar Gaza. Junto con la OLP, conspiró para derrocar al gobierno de Hamas. El golpe de Estado que impulsaron, en junio de 2007, fracasó y la OLP fue expulsada de Gaza. Entonces Israel reforzó el cerco económico, bloqueando incluso el acceso de mercancías elementales, como la harina para fabricar pan. El 75% de la población sufre "hambre extrema" (El País, 28/12). El cerco contra Gaza adquiere un carácter internacional: Egipto colabora estrechamente con Israel para mantener los pasos cerrados; la Unión Europea y Estados Unidos respaldan el sitio sobre Gaza.

El objetivo del cerco sionista era provocar el dislocamiento del gobierno de Hamas.
El cese del fuego, propuesto unilateralmente y efectivamente cumplido por Hamas, buscaba aliviar el cerco sobre la población palestina. Hamas se comprometió a no lanzar (y evitar que se lanzaran) cohetes contra el sur de Israel a cambio del compromiso israelí de abrir los puestos fronterizos al paso de mercancías y el fin de la política de "asesinatos selectivos" (contra dirigentes palestinos).

Durante varios meses, Hamas cumplió e hizo cumplir el cese del fuego a las restantes milicias palestinas. Israel no lo cumplió nunca. Lo reconoce el general retirado Shmuel Zakai, antiguo comandante del ejército israelí en Gaza. "Podríamos haber aflojado el cerco sobre Gaza, de manera tal que los palestinos, Hamas, comprendieran de que restringir el fuego era en su propio interés. Usted no puede hacer que la tierra explote, dejar a los palestinos en Gaza en la penuria económica y esperar que Hamas se siente a esperar y no haga nada" (Haaretz, 27/12). Es claro que el Estado sionista viene preparando la masacre que acaba de lanzar desde hace mucho.

Como dice el propio general, el lanzamiento de cohetes era la única manera que Israel había dejado a Hamas para "renegociar la tregua en mejores condiciones" (ídem).

Una semana antes del vencimiento de la tregua, el cerco era tan brutal que habían cerrado la mayoría de las panaderías, los bancos y hasta las agencias internacionales de socorro debieron dejar de operar por falta de alimentos, medios y recursos. Antes de que la tregua venciera, el semanario británico The Economist (20/12), en una nota editorial, reclamaba que "Israel afloje su cerco económico sobre Gaza" y que sólo si, una vez que se aflojara, las milicias continuaban disparando cohetes contra Israel, el estado sionista debería responder por medios militares. En el propio campo sionista, hubo numerosos reclamos de "aceptar la oferta de Hamas" (Larry Derfner, The Jerusalem Post, 24/12).

El 19 de diciembre, "a cambio de levantar el bloqueo sobre la Franja, Hamas ofreció en el mismo día 19 una reanudación por tiempo indefinido de una tregua" (El País, 28/12).

Israel rechazó la tregua y lanzó contra Gaza el ataque más descomunal que se tenga memoria.

El objetivo del ataque no es volver a ocupar Gaza: "el plan del ejército es golpear y salir", declara un especialista israelí (Corriere della Sera, 27/12). Primero con los aviones; después van a lanzar los tanques contra la población civil. El objetivo es propinarle un golpe demoledor a Hamas y esperar que, luego del retiro de los tanques y el fin de los bombardeos, Hamas capitule o sea desplazada del poder por la Autoridad Palestina de Abu Mazen. El cerco no se aflojará; la masacre continuará.

El primer crimen de guerra de Obama

Barack Obama ha llenado el "vacío de poder" dejado por el fracaso de la presidencia de Bush; ninguna decisión del gobierno norteamericano o de su Congreso se toma sin consultarlo. Lo mismo debe decirse de Israel, aliado estratégico del imperialismo norteamericano en el Medio Oriente. Obama comparte con Bush nada menos que al ministro de Defensa.

El cerco sobre Gaza se fue empeorando y reforzándose durante el desarrollo de la campaña electoral norteamericana. El candidato Obama nunca lo objetó ni lo criticó. Al contrario, "durante la campaña electoral el presidente electo se empeñó más que cualquier otro candidato en la defensa de Israel", recuerda el italiano Corriere della Sera (28/12). Nombró secretaria de Estado a Hillary Clinton, otra reconocida defensora del Estado de Israel; tampoco a ella se le escuchó criticar el cerco de Gaza y el intento de someter por el hambre a la población palestina.

A mediados de año, cuando visitó Israel, Obama declaró que "ningún país aceptaría que llovieran misiles sobre la cabeza de sus ciudadanos. ‘Si alguien estuviese dirigiendo cohetes a la casa donde duermen mis dos hijas por la noche, haría todo lo que estuviera en mi poder para detenerlo'..." (La Nación, 29/12).

Obama "no dijo nada acerca de la nueva ofensiva en Gaza, los asentamientos sionistas y la división entre los palestinos", agrega el especialista británico Robert Fisk (Página/12, 29/12).

En resumen, el acuerdo de Obama y del nuevo gobierno norteamericano con la masacre de Gaza es total y completo.

Pero así como el calendario electoral israelí empuja a los candidatos a respaldar la masacre y a exigir bombardeos todavía mayores, también el calendario político norteamericano establece sus reglas: la matanza debe estar concluida antes del 20 de enero, cuando Obama asuma la presidencia. Así, el hombre que aprueba la masacre del pueblo palestino podrá presentarse como un "promotor de la paz".

La masacre de Gaza es el primer crimen de guerra de Barack Obama. Ya allegarán otros, pero que el presidente electo haya elegido como su primer "teatro de operaciones" la Franja de Gaza es todo un anticipo de lo que será su gobierno.

Obama respalda una masacre que quiere rendir por las bombas, el hambre, el asesinato indiscriminado de civiles y el robo de tierras los derechos nacionales del pueblo palestino.

Luis Oviedo

La lucha contra los despidos y suspensiones en la industria automotriz

El PTS confirma todo

El PTS ha escrito un artículo para contestar a nuestra caracterización (publicada en PO Nº 1.068) de que están adaptados a la burocracia del Smata, al saludar "como un triunfo" y "un paso adelante" la aceptación de las suspensiones en la industria automotriz. La respuesta no sólo confirma nuestra caracterización; la profundiza.

Los motivos de por qué las suspensiones serían "un paso adelante" no aparecen a lo largo de los ¡15.000 caracteres! que ocupa la respuesta. Lo que sí aparecen son deformaciones de la realidad.

Se afirma que con este acuerdo "se mantiene la unidad dentro de las fábricas", pero ¡los trabajadores suspendidos están fuera de la empresa, no adentro! Esta simple "realidad" llevó a los trabajadores de General Motors Rosario a rechazar la propuesta de la patronal (similar a la acordada por el Smata en Córdoba) y a plantearse la ocupación de la planta (como ocurrió el viernes 19, que la burocracia disfrazó de bloqueo). Los compañeros de GM se aferraron a que los trabajadores debían quedar dentro de la empresa, porque fuera de ella los convertía en despedidos anticipados, como (repetimos) sucedió en Ford en 2002. Trátese de efectivos o contratados, si están adentro es una realidad, si están afuera es otra.

Para justificar su posición, el PTS camelea los números. Sostiene todo el tiempo que los trabajadores de Gestamp "obtuvieron" el 60% de sus salarios, pero no es así. Les pagarán el 52,5% de lo que cobraban sin hacer horas extras (cobraban 1.800 pesos en efectivo, más 200 pesos en tickets canasta que, a su vez, es el 45% de lo que cobra la inmensa mayoría de los efectivos de Gestamp). Al camelear las cifras, el PTS embellece un acuerdo que los trabajadores rechazan. La única crítica que hacen a la burocracia es que firmó el acuerdo "sin llamar a asamblea para consultar a las bases". Pero si el Smata hubiera llamado a esa asamblea, el PTS habría votado con la burocracia a favor de las suspensiones.

Si se revisa La Verdad Obrera, desde mediados de noviembre no hay críticas a la burocracia; tampoco las hay en los volantes del PTS; simple y sencillamente, en el mes de mayor desenvolvimiento del conflicto no sacaron un solo volante. El único, de la 29 de Mayo, es una crónica de la jornada del 1º de diciembre donde, perdido entre varios párrafos, se dice que "el Smata debe concretar la movilización con cese de actividades cuanto antes".

El PTS no solamente se ha adaptado a la burocracia, también comparte sus argumentos. En la Comisión de Trabajo de la Legislatura, el secretario adjunto del Smata, Angel Tello, se tomó un buen tiempo para explicar que el objetivo de ellos era que las patronales reconocieran alguna responsabilidad sobre los eventuales, al darles un subsidio. ¿Qué nos dice el PTS? "Esto es un cambio histórico contra el ‘sentido común' impuesto por las patronales y la burocracia en relación a los contratados". ¿Cuál es el cambio histórico? Los trabajadores han quedado afuera, con un subsidio del 52% de sus ingresos, a partir de un salario menor al de los efectivos.

Para el PTS, el gran "logro" es que "impusieron que el Smata baje a discutir la reincorporación". Este concepto está repetido en La Verdad Obrera y fue escrito por los "despedidos de Gestamp" en su adhesión al acto del 19 y 20. Sin embargo, el supuesto compromiso de la burocracia se transforma, en los hechos, en un argumento contra la lucha efectiva: en una reunión realizada por el comité de lucha de Gestamp el sábado 29 de noviembre, los "mecánicos del PTS" desalentaron las posiciones de los despedidos de ir el 1º de diciembre a bloquear la entrada a Gestamp con el argumento de que tenían el "compromiso" de la burocracia de "bajar a negociar".

El "gran logro" que presenta el PTS es una patraña de la burocracia. Cuando la directiva del Smata vio que la política de aceptar los despidos de los contratados era rechazada por los trabajadores, como sucedió en la asamblea de VW, decidió convocar a una movilización el 1º de diciembre y trató por todos los medios de que no se juntaran con los trabajadores de Iveco y los de Gestamp. Y aunque no lo logró, sí pudo imponer una fractura de las negociaciones. Así se fueron desgranando las movilizaciones, sostenidas fundamentalmente por los trabajadores de Iveco. De esto el PTS ni habla, emborrachado en su "triunfo". No se va encontrar una sola línea en LVO que desnude la política de la burocracia. LVO se dedica a cronicar la lucha, pero no a delimitarse de la burocracia sindical. En su ‘refutación' del PO explica el 60% (en realidad, como explicamos, el 52,5%) de Gestamp en función de las condiciones de Gestamp; los de Iveco en función de la situación de los trabajadores de Iveco. Así fábrica por fábrica. Si esto no es adaptación, ¿cómo se llama?

¿Victoria o derrota?

El PTS pretende que nos peleemos con los trabajadores de Gestamp. Nosotros estaríamos atacándolos al advertirles que pueden quedar en la calle, mientras ellos los estarían defendiendo al elogiar "su paso adelante". Es muy burdo. Los trabajadores despedidos de Gestamp han hecho "esfuerzos extraordinarios para mantener una lucha contra los despidos" (PO Nº 1.066). El problema no son los trabajadores de Gestamp, el problema es la burocracia a quien el PTS agradece que "baje a discutir la reincorporación", aunque lo haya hecho "sin asamblea de base". La burocracia no lucha por la reincorporación y ha pateado el problema para adelante a costa del 47,5% de los haberes de los trabajadores y a que queden alejados de la planta, sometidos a las presiones de la patronal, de las consultoras y de la miseria. Los trabajadores no han sido derrotados, porque la lucha sigue, pero de ningún modo consiguieron un triunfo. El trabajador citado en el reportaje publicado por LVO (307) lo dice con toda claridad: "¿Sabés por qué yo no aplaudo? Porque queremos volver a trabajar, no me gusta estar subsidiado". En lugar de reafirmarlo en este concepto el entrevistador explica cómo lo convenció del "gran paso adelante". ¿Así se crea una conciencia antipatronal y antiburocrática? ¿Así se desenvuelve el espíritu crítico en una clase que tiene la tarea de tomar el poder? El trabajo político del PTS es de freno, es reaccionario.

Ni 75% ni 60% (52,5% reales): ocupación de fábrica

El PTS cree haber encontrado una contradicción en nuestro apoyo al reclamo del 75% de los suspendidos de Iveco. Puede ser que para el PTS la diferencia de pesos entre el 75% y el 52,5% no sea mucho; para un trabajador que apenas araña los 2.000 pesos sí es mucho (exactamente 450 pesos). Así y todo el problema no es de porcentajes.

Los trabajadores de Iveco quedaron para el final, cuando ya se había cerrado el acuerdo de VW (fuertemente rechazado), cuando se había firmado el de Gestamp. Con estos "triunfos" en la mano, la burocracia les planteó que estaban rechazando los 500 pesos que ofrecía la patronal y que "luchaba" por los 1.050 pesos. Los trabajadores los reputearon y exigieron el 75%, que vienen cobrando hasta ahora. Obligaron a que hablaran los "delegados combativos" (que habían entrado con la burocracia a negociar). La intervención de éstos dejó a los obreros más preocupados (lo menos que les dijeron fue "son unos tibios") y se aferraron más al 75%. El PO salió a apoyar este planteo porque allí se habían parado los trabajadores para defenderse de la burocracia y de la patronal. Para una corriente como la nuestra -que sacó ocho declaraciones distintas en un mes e hizo cinco actos en puertas de fábricas rechazando los despidos y suspensiones, planteando el reparto de las horas de trabajo, reclamando la asamblea general de los metalmecánicos y desnudando la política de la burocracia y del gobierno-, apoyar el punto de defensa al que se aferraban los trabajadores no es una contradicción, es un punto de partida para retomar la lucha de fondo. Además, el 75% está planteado en el convenio del Smata, con lo cual a los contratados en este punto se les aplicaría el mismo derecho que a los efectivos, lo que habría creado un antecedente de continuidad laboral, algo muy distinto a un subsidio.

Es evidente que el 75% no es una salida, lo sostuvimos en ocho declaraciones distintas repartidas en un mes y en los cinco actos realizados en puertas de fábricas, planteamos que la salida era el rechazo a los despidos y suspensiones, el reparto de las horas de trabajo, la asamblea general de los metalmecánicos y desnudamos la política de la burocracia y del gobierno. El PO salió a apoyar este planteo porque allí se habían parado los trabajadores para defenderse de la burocracia y de la patronal, pero no sostuvimos que era una victoria.

La salida es preparar la ocupación de fábrica para imponer el reparto de las horas trabajo, tarea que el activismo discute abiertamente. El PTS sigue vendiendo "victorias" y "pasos adelante", colocando a los trabajadores a discutir si el 50, el 60 o el 75.

Una cuestión de aparato

El PTS quiere ocultar su posición podrida con chicanas. No tienen ninguna importancia.

No se entiende por qué rechazan el proyecto que presentó el bloque del FIT (que integramos) para prohibir los despidos y las suspensiones, establecer el reparto de las horas de trabajo, crear las comisiones obreras de control, etc. ¿Cuál es el crimen de lanzar una campaña para difundir el proyecto (que es un programa de salida a los despidos y suspensiones), buscar adhesiones y propender a la organización de las masas para imponerlo? (como aclaración, basta leer bien el artículo del PO Nº 1.068 sobre el proyecto de ley; ahí no se dice que el proyecto del diputado patronal Varas es similar sino "aunque se refieren al mismo problema, son diametralmente opuestos" y se lo critica de punta a punta.)

El PTS nos acusa de defender (y mal) "nuestro pequeño aparato" y que debiéramos quitarnos "la anteojera sectaria... para no quedar por fuera de los combates". Agradecemos el consejo pero no creemos que corresponda, el "aparato del PO" no es el problema. El problema central es cómo enfrentar la crisis capitalista con una política independiente y no para apoyar las "salidas" que nos manda la patronal, por intermedio de la burocracia. La lucha del PTS en los conflictos es adaptarse a la burocracia o al propio Estado. Sucedió recientemente con el caso de Eli Díaz: el Ceprodh como abogados querellantes pidieron para el violador de Eli 20 años de prisión, la fiscalía pidió sólo ocho (menos que los años que él violó a Eli). Finalmente le dieron ocho, y el PTS y el Ceprodh lo consideraron un triunfo porque, lógicamente, ocho es más que nada. En el medio se perdieron de poner el acento en desnudar el carácter de clase de la justicia, de la protección del Estado a los patrones violadores. Siempre hay un argumento para defender estas posiciones, pero lo que prima es la defensa de su "aparato", llámese Ceprodh o "mecánicos del PTS".

Eduardo Salas