29 de septiembre de 2011

Exigimos se cumplan los reclamos de los trabajadores de la salud

Anabel Allochis, candidata a diputada nacional por el Frente de Izquierda, exigió “el inmediato y completo cumplimiento de los reclamos de los trabajadores de la salud de Córdoba”.

Además agregó que “los trabajadores de los hospitales con su lucha por el salario y contra la precarización laboral están haciendo el mejor servicio a la salud pública, enfrentan a conducciones gremiales y políticas que apuestan al desarrollo de la salud privada, imponiéndola sobre el territorio del sistema público. No puede garantizarse la salud cuando los médicos tienen un básico que no supera los $2.500 mientras la canasta familiar llega a $6.000”. 

Asimismo dijo que “la precariedad laboral y la miseria salarial son incompatibles con la salud de la población. Rechazamos la privatización y los negociados a costa de la salud y defendemos un sistema único de salud fundado en la asistencia gratuita, integral y universal, sobre la base de la consolidación de todos los recursos bajo la dirección de trabajadores electos”.

Finalmente enfatizó un “fuerte repudio al gobierno provincial por haber reprimido la movilización de los trabajadores que se acercaron a la inauguración de la nueva Terminal de Ómnibus con el único objetivo de comunicar al gobernador y al resto de la comunidad sus reclamos”.
 
 
PARTIDO OBRERO
en el  Frente de Izquierda
 y de los Trabajadores

Conflicto de la salud: "A otro perro con ese hueso"

Las razones que Schiaretti esgrimió para no dar una respuesta a los justos reclamos de los trabajadores y dejar sin atención hospitalaria a la población es que él no puede dar un aumento salarial a 60 días de tener que entregar el gobierno.

El respeto al próximo gobernador sin embargo no le alcanzó para posponer una nueva vuelta de tuerca en el endeudamiento de la provincia. Nos encaja a todos los cordobeses una nueva carga de 200 millones de dólares "preventivamente". ¿Era muy costoso "prevenirse" dentro de 60 días?.

A otro perro con ese hueso. Schiaretti no da un aumento porque su política de salud es la mayor injerencia de los grupos privados en los hospitales públicos, y para eso se necesita desvalorizar al personal y al servicio. El endeudamiento también es su política para sostener a los capitalistas.

De la Sota se mantiene en silencio y eso que ganó por primera vez la gobernación, en diciembre de 1998, montado sobre la lucha de la salud contra Mestre. Debiera ser un poco más agradecido.

El Partido Obrero y el Frente de Izquierda más que nunca están a fondo con los trabajadores y sus reclamos.


Declaraciones de Eduardo Salas , ex candidato a gobernador de Córdoba por el Frente de Izquierda y de los Trabajadores.

Argentina conectada: Telefónica subsidiada

El gobierno impulsa, mediante el decreto 1552/2010, el Plan Nacional de Telecomunicaciones Argentina Conectada. El objetivo -dice- es fortalecer la "inclusión digital", pero promueve la mayor concentración monopólica y mediática de un pulpo internacional. Telefónica se convirtió en el principal controlador de Telecom Italia y, por lo tanto, de Telecom Argentina. Luego, Telefónica siguió concentrando acciones de Telecom en detrimento de los Werthein (la otra pata de Telecom). El plan en cuestión permite a Telefónica y Telecom desligarse de su responsabilidad de invertir en las zonas "menos rentables". El gobierno pretende desarrollar una red federal de fibra óptica a través de la Empresa Argentina de Soluciones Satelitales SA (AR-SAT), controlada por el Estado, pero no la financia con las ganancias de las telefónicas, sino con el dinero de los contribuyentes; o sea, mediante un nuevo festival de subsidios.

El plan "Argentina Conectada" es apoyado con bombos y platillos por la directiva de Foetra. El decreto respectivo (véase www.foetrabsas.org.ar) plantea la "ampliación de la cobertura de los servicios de telecomunicaciones" para fomentar la "competitividad del sector" y la "igualdad de posibilidades", lo que no es más que la habilitación del ingreso de las telefónicas a la televisión digital.

Pero los negocios van mucho más allá, porque Telefónica le cobra a Arsat una suma multimillonaria por hacer el transporte de la señal de televisión digital terrestre (unos 24 canales de TV). Arsat pone los equipos de trasmisión en los edificios de Telefónica y el Estado alquila y paga por ello, para transmitir la señal al resto del país. Telefónica no invierte un peso, porque la estructura ya esta dada, pero le cobra al Estado una cifra multimillonaria. Un negociado más y van...

Queda claro que las peripecias de la "lucha anti monopólica" del gobierno K van destinadas a beneficiar a ciertos monopolios y multimedios "amigos". Frente a esto, defendemos la autonomía de las organizaciones obreras y nos oponemos a la cooptación de Foetra por parte de un gobierno aliado de las empresas telefónicas, tercerizadoras y precarizadoras. Planteamos la apertura de los libros y el establecimiento del control obrero sobre las operaciones de las telefónicas. Reclamamos, asimismo, impuestos progresivos para el financiamiento (extensión y mantenimiento) de toda la red de telecomunicaciones, el acceso gratuito (o a bajo costo) de toda la población y el desarrollo de una verdadera industria estatal de las telecomunicaciones.


Flavio Pereyra
Pablo Eibuszyc

Delegados de Foetra Buenos Aires

La salud obrera también financia a la banca

15 mil millones de nuestros bolsillos, al agujero del tesoro público

Entre las obras sociales y el Pami, 15 mil millones de pesos están financiado el déficit público.

Por el lado de las obras sociales, hay dos rubros que administra el Estado desde la intocada "desregulación" menemista: el Fondo Solidario de Redistribución (FSR) y la Administración de Prestaciones Especiales (APE). De ellos, el Estado se está quedando, al día de hoy, con unos 10 mil millones, según se informó en el Congreso de Acami, una asociación de entidades civiles médicas, quienes se quejan amargamente por el aumento de los costos de la salud que afectan sus contratos.

El primero (FSR) tiene por función equilibrar el sistema asistiendo a aquellas obras cuyos ingresos, debido a bajos salarios, no alcancen a cubrir la cápita básica para acceder al PMO o Programa Médico Obligatorio. El segundo (APE) es un fondo especial para tratamientos de alta complejidad que desbordan el presupuesto de ciertas obras sociales -en especial, las más pequeñas. Cada año, el excedente de estos fondos enormes, que resultan de una retención de aportes del 10% del total de los 2.500 millones de pesos mensuales que recaudan las obras sociales, deben ser devueltos a todas las obras en forma proporcional a sus afiliados. No se hace. El Estado se lo queda ilegalmente, por lo que se ha formado esta bola de fondos a lo largo de la gestión kirchnerista.

En el caso del Pami, se acaba de suscribir una letra de tesorería con la tasa de las Lebac, que emite el Banco Central, por 1.630 millones de pesos. Pero no es la única, los "ahorros" del Pami en títulos del estado nacional suman ya 5.500 millones de pesos. Recordemos que los fondos del Pami provienen del aporte del 3% que hacemos todos los trabajadores mes a mes por encima del 11% jubilatorio.

Como se puede apreciar, en ambos casos (obras sociales y Pami) son dineros apartados del salario obrero con el objeto de la salud presente y de la salud futura de los trabajadores. Apartados de las cajas correspondientes, su traducción inmediata es el deterioro de la calidad de las prestaciones de salud en forma directa en el Pami.

En el caso de las obras sociales, la fuga de fondos se traduce de dos maneras: caída de las prestaciones y aumentos de los "coseguros" o aranceles que se pagan crecientemente por cada atención médica, estudios o internaciones. Esto es tan así, que hay una lluvia de demandas judiciales de familias afectadas porque sus obras no alcanzan los estándares mínimos del Programa Médico Obligatorio que es el (limitado) combito básico de salud, que cotiza con la cápita media establecida en la negociación con las cámaras de la medicina privada que contrata masivamente en todo el sistema. El nivel de juicios es tan alto que la Acami informa que el 5% del gasto de salud del sector se va en gastos de honorarios, indemnizaciones, peritos y otros gastos judiciales. De manera que a las retenciones indebidas del Estado, hay que sumarle este 5% derivado de esa retención y de los curros del sistema semiprivatizado desde el menemismo -cometas y vaciamientos de las dirigencias sindicales mediante.

Estos 15 millones van al agujero del presupuesto público con dos destinos esenciales: la deuda pública y los subsidios a las privatizadas. Estamos financiando a la banca y a los privatizadores con la salud obrera, además de los fondos de jubilados, de los salarios familiares, del Fondo de Desempleo, del impuesto al salario- para hablar de lo que los trabajadores ponemos directamente, más allá de los impuestos indirectos y las reservas del Banco Central que también financiamos vía inflación.

Moyano ha consentido todo a cambio de manejar el APE y privilegiar al grupo de gremios más íntimos. El resto de la burocracia lo cuestiona por esto, pero en absoluto denuncia al gobierno kirchnerista por el conjunto de la confiscación. Nuestras agrupaciones sindicales y candidatos del FIT tienen que denunciarla, reclamar los fondos y la apertura de libros de las obras sociales. Forma parte de la formación de una conciencia de clase y política respecto del kirchnerismo y es condición para el movimiento en marcha para expulsar la burocracia de los sindicatos.

Néstor Pitrola

Pasantías: una panzada para los empresarios

Cristina, al descubierto
 
A través del decreto 1374, publicado el 19 de septiembre, el Ejecutivo nacional aprobó el régimen general de pasantías que regirá en todo el ámbito del nivel de educación secundaria del Sistema Educativo Nacional.

El nuevo régimen tiene como único fin la utilización de 400 mil jóvenes como mano de obra gratuita. Los alumnos secundarios pasantes tendrán los mismos derechos que tiene un trabajador de la empresa donde realizan la pasantía, menos el salarial -¡un negoción! Este régimen se encuentra por detrás incluso del que rige hoy en la Ciudad de Buenos Aires, donde pasantes secundarios se encuentran cobrando alrededor de 800 pesos. Evidentemente, la participación en los debates sobre la reglamentación de las pasantías por parte de la UIA, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa y la Asociación de Empresarios Argentinos -AEA- no fue en vano.

Al servicio del capital

El ministro de Educación, Alberto Sileoni, justificó la medida apelando a la necesidad de "enlazar educación y trabajo" (Clarín, 21/9). Pero en la mayoría de los casos -un antecedente notable son las pasantías universitarias- el trabajo de los pasantes nada tiene que ver con la orientación de las carreras que siguen los jóvenes. El régimen de pasantías ya se encuentra funcionando hace años en las escuelas técnicas -de donde salen jóvenes con mano de obra calificada a costo cero. Otro antecedente, que desenmascara a fondo el objetivo de las pasantías, lo tenemos en el convenio firmado entre la UTN y la Volkswagen (del cual participó la mismísima CFK) para utilizar a los estudiantes de la UTN como mano de obra barata para la automotriz, incluso otorgándole incumbencias a la empresa a la hora de rediseñar los planes de estudio de las carreras.

Esto último es uno de los objetivos que persigue el Régimen de Pasantías para las unidades educativas, donde afirma que "Las instituciones y empresas, públicas o privadas donde se realicen las pasantías, podrán prestar su asesoramiento en la elaboración del Programa Anual de Pasantías de la jurisdicción o de cada unidad educativa" (Boletín Oficial, 19/9). Quiere decir que los planes de estudio, la orientación de las carreras, se irán amoldando cada vez más a los intereses del mercado.

Ahora bien: es indiscutible la necesidad de que la educación esté estrechamente ligada a las necesidades productivas de un país. Pero en el régimen capitalista, a "las necesidades productivas" no las dictan las necesidades sociales, sino la rentabilidad capitalista. Incluso cuando ésta expresa más a fondo su tendencia parasitaria y antagónica a los intereses y aspiraciones de las grandes mayorías.

El decreto se ocupa de dejar bien en claro que "El pasante deberá considerar información confidencial toda la que reciba o llegue a su conocimiento con motivo del desarrollo de su práctica en la organización (...)" (ídem). Es decir que se respeta el monopolio intelectual de los descubrimientos y/o desarrollos tecnológicos del cual se adueñan las patronales, en pos de defender su monopolio comercial.

Conclusión

El Régimen de pasantías aprobado por CFK está al servicio del lucro capitalista, a través de la superexplotación de los jóvenes. Por eso, la AEA manifestó "su más pleno apoyo a la decisión del gobierno nacional de impulsar las pasantías educativas" (Clarín, 21/9).

CFK ha decidido darle a la burguesía nacional un nuevo espaldarazo para afrontar el aumento de los costos de producción -que se producen como consecuencia de la inflación. El espaldarazo consiste en que 400 mil adolescentes trabajarán en forma gratuita para el empresariado nacional -siempre y cuando, claro, que no encuentre la resistencia del movimiento estudiantil y sus organizaciones.

Como se ve, de la mano del gobierno ‘nacional y popular', la educación se pone al servicio de la rentabilidad del capital.

Pablo Giachello

Binner pidió "desmistificar" sobre la toxicidad del glifosato

En defensa de los sojeros y de Monsanto

El gobernador de Santa Fe, Hermes Binner, dijo que, utilizado correctamente, el glifosato “es un producto que puede convivir perfectamente con el uso racional y la protección de la salud”. Respecto de las manifestaciones en contra de este agroquímico, dijo que “surgen siempre denuncias de que hay más casos de cáncer, pero si vamos a las estadísticas eso no está”. Binner pidió “desmitificar” acerca de la toxicidad del glifosato.

En diálogo con LT8, el gobernador santafesino se refirió a la resolución de la Justicia de San Jorge, que ratificó el fallo que limita las fumigaciones, que deberán hacerse a 800 metros del casco urbano -en el caso de las terrestres- y a 1.500 en el caso de las aéreas.

“Convengamos que el glifosato no es un producto nuevo, que lleva muchos años, hay una gran experiencia a nivel internacional, pero eso no quiere decir que no lo estudiemos nosotros, ni lo que no lo hagamos por las normas que plantea la ley provincial”, apuntó el gobernador.

“Hay que ver claramente cuál es el beneficio y el perjuicio que provoca (el glifosato)”, concluyó el gobernador (declaraciones a LT8 y La Región).

Dime quién aporta a tu campaña y te diré qué intereses defenderás.

A todos los compañeros que luchan consecuentemente en defensa del medioambiente, este 23 de octubre votemos al Frente de Izquierda. Metamos un bloque de izquierda, para que nuestro reclamo se escuche en el Congreso.

Carlos Blanco

"Bonapartismo con faldas"

Lo que sigue es la respuesta que Jorge Altamira envió a la periodista de Clarín, Susana Viau, con motivo de las referencias que hace en su columna del domingo 25/09, “La inflación, la libertad de prensa y Napoleón”. Viau alude a la posición sobre el bonapartismo que Altamira expuso en el programa de TN, “Código Político”, del jueves precedente.

La periodista Susana Viau dedica una parte de su columna del domingo a las declaraciones de la Presidenta acerca del bonapartismo y a la respuesta de Altamira a ellas. Su análisis es equivocado en ambos aspectos. En principio, atribuye al peronismo un carácter bonapartista, cuando esa caracterización se aplica a los regímenes y métodos de gobierno -no a los movimientos o partidos políticos. Para que se conforme un gobierno bonapartista (que concentra el arbitraje político entre las clases en una sola persona) no es suficiente la ideología: es necesario que se reúnan ciertas condiciones políticas.

Contra lo que dice Viau, Cristina Kirchner no “cayó en ninguna trampa al confundir a Napoleón I con Napoleón III”, porque es precisamente del primer Napoleón, no del segundo, que deriva la caracterizacióndel “bonapartismo” como régimen político moderno. Napoleón I, oficial y general de los gobiernos de la Revolución Francesa, neutraliza la pelea entre las clases en pugna que desata la revolución y establece una década de estabilidad política interna y guerras revolucionarias en el exterior. La Presidenta pretende inscribirse en esa tradición que arranca con Napoleón I, pero ¿están reunidas las condiciones para ello?

Altamira dio respuesta a esta cuestión en numerosos artículos y tesis en la prensa, así como en congresos de su partido mucho antes de que CFK hiciera alusión al asunto hace dos semanas. De modo que no es cierto lo que dice Viau: 1) que “Altamira no reparó en la metida de pata de la Presidenta” (no existe la metida de pata); 2) ni que “Altamira cayó en un exceso autorreferencial” al considerarse un blanco de la observación de la Presidenta acerca de “cierta izquierda” que caracteriza al gobierno de CFK como “un bonapartismo tardío”. Unos días antes de esta referencia al “bonapartismo” y a “cierta izquierda”, la Presidenta había atacado a los trabajadores del subte nucleados en el Frente de Izquierda (la comisión directiva del sindicato es kirchnerista, en la variante Yasky). Altamira, como se ve, se puso en el lugar correcto.

El bonapartismo en Argentina no nace con el primer gobierno de Perón: una caracterización semejante vale para Juan Manuel de Rosas, quien puso fin a las interminables crisis políticas que desató la Revolución de Mayo y también, hasta un cierto punto, para Hipólito Irigoyen. No es Milcíades Peña, en sus opúsculos sobre historia argentina, el primero en caracterizar a Perón como bonapartismo, según cree la periodista, sino Silvio Frondizi, en su libro (anterior) La Realidad Argentina -aunque es verdad que Frondizi alude “a un colaborador” de ese libro, que con certeza fue Peña. La caracterización que hace Peña del rol político de Evita, “bonapartismo con faldas” es una ¿elegante? salida literaria, nada más; las fuerzas armadas vetaron su postulación a vicepresidenta en 1951. Milcíades Peña perteneció a una corriente que sostenía que la clase obrera, bajo Perón, estaba representada por los partidos comunista y socialista, y que el 17 de octubre había sido protagonizado por el “lumpen proletariado y la policía”.

El fenómeno del bonapartismo en América Latina fue uno de los aportes teóricos fenomenales de León Trotsky, quien lo desarrolló a la luz de la experiencia del mexicano Lázaro Cárdenas (1936-40). Trotsky añadió que el bonapartismo en América Latina tenía la peculiaridad de representar, a su modo, a las tendencias nacionales que entraban en choque con el imperialismo. Este aspecto es negado o subestimado por Peña en relación con el gobierno de 1945-55.

Después del primer gobierno de Perón, el peronismo no volvió a poner ningún gobierno bonapartista. No lo fue, por supuesto, el de Cámpora-Lastiri, en tanto que el intento de Perón al reemplazarlo no prosperó -como bien se ve en su último discurso, el 12 de junio de 1974, en Plaza de Mayo. El de su sucesora fue un gobierno directamente fascistizante de la mano de la triple A. Tampoco lo fue el de Menem, pues no debe confundirse el gobierno personal que emana del presidencialismo argentino con el bonapartismo, que representa una forma especial que no se reduce al presidencialismo. Néstor Kirchner, por su lado, intentó varias formas de método de gobierno, desde un bipartidismo centroizquierda-centroderecha (que minimizaba al PJ, poblado de ‘centroderechistas’), un intento luego de ponerlo en el centro, hasta el aislamiento final depués de la 125 y la derrota electoral de 2009. Cuando le adjudicamos al gobierno actual el carácter de “bonapartismo tardío”, tomamos en cuenta la derrota reiterada que propinó al intento de la oposición de gobernar por medio del Congreso, a la cual le impuso, en distintos episodios de crisis, la estatización de las AFJP, el pago de la deuda con reservas del Banco Central y el manejo del Presupuesto por decreto. El 50% de votos que obtuvo la Presidenta en las primarias es la manifestación electoral de esta reversión política.

Este bonapartismo es “tardío” porque nace al final del ciclo del kirchnerismo y del ciclo económico internacional que llevó el precio de la soja y los beneficios sojeros por las nubes. Los K perdieron en 2009 en el momento más fuerte del impacto de la crisis mundial en Argentina. Es también “tardío” porque la capacidad de arbitraje político en las condiciones de la bancarrota capitalista mundial es muy estrecha. Como todo bonapartismo, el episodio que vivimos ahora es una expresión de la completa crisis del régimen político y de los partidos tradicionales. La expresión risueña de la inviabilidad del experimento oficial es la pretensión de la Presidenta de reemplazar al justicialismo por La Cámpora o el cristinismo. El crecimiento del Frente de Izquierda es la contrapartida de la derrota de la derecha y de su improvisado intento parlamentarista, y del canto del cisne del intento bonapartista del gobierno actual.

Jorge Altamira, candidato a Presidente por el Frente de Izquierda y de los Trabajadores

28 de septiembre de 2011

A UN AÑO DEL ASESINATO DE MARIANO FERREYRA

El 20 de octubre, a Plaza de Mayo

El 20 de octubre se cumple el primer aniversario del crimen de nuestro compañero Mariano Ferreyra y de las gravísimas lesiones ocasionadas a Elsa Rodríguez y a otros militantes que se encontraban en lucha contra la tercerización en el ex ferrocarril Roca.

Ese día volveremos a la calle miles de trabajadores y ciudadanos para reclamar el castigo a todos los responsables del crimen, a sus autores materiales, a sus instigadores políticos, y a la Policía Federal y las patronales de Ugofe.

Movilización extraordinaria

En un país donde los crímenes contra los luchadores quedaron impunes, una movilización extraordinaria, al día siguiente del crimen de Mariano, reunió a más de 60.000 personas, y lo mismo ocurrió un mes después en un festival multitudinario.

Decenas de militantes y trabajadores ferroviarios desafiaron a la patota y mostraron ante la justicia los hilos conductores entre la banda criminal y la burocracia de la Unión Ferroviaria.

Bajo esta presión monumental, Favale, Sánchez y otros fueron a parar a la cárcel. Meses después, caían detenidos el mismo Pedraza y su segundo, el "Gallego" Fernández.

El gobierno y la burocracia

El kirchnerismo jamás condenó a la burocracia ferroviaria.

El crimen de Mariano puso de manifiesto al triángulo corrupto entre los privatizadores, el Estado y la propia burocracia sindical; en este negocio, los Pedraza lucraban, a título de empresarios, con la miseria salarial de miles de tercerizados.

La lucha persistente de los ferroviarios precarizados logró la incorporación a planta permanente de miles de compañeros tercerizados.

Los Pedraza fundan su expectativa de conseguir la impunidad en la protección del régimen político al cual sirven; la burocracia sindical ferroviaria continúa en la administración del ferrocarril.

Los integrantes y jefes de la Policía Federal que liberaron la zona en favor de la patota están procesados solamente por "abandono de persona", un delito menor que encubre la acción deliberada de las fuerzas policiales para habilitar el crimen y la fuga de los criminales.

Tampoco existe imputación contra los funcionarios políticos que estaban a cargo de la Federal y no podían ignorar lo que ocurría en Barracas.

El patrocinio legal de estos policías ha sido aportado por el flamante Ministerio de Seguridad de Nilda Garré.

En estos días, después del ataque de la Presidenta a los delegados clasistas del subte, la burocracia de la UTA desató otra patoteada -esta vez, contra los choferes de la 60.

Una gran movilización el 20

El 20 de octubre es una cita de hierro que convoca a los trabajadores y jóvenes que batallan contra la precarización laboral, por la recuperación de los sindicatos y por una nueva dirección política y sindical para la clase obrera.

1- Cárcel y perpetua para Pedraza, Fernández y toda la patota.

2- Que la Federal y sus responsables que liberaron la zona sean juzgados por los que les cabe, o sea, como partícipes del crimen.

3- Fuera la burocracia y sus socios, los privatizadores, del ferrocarril. Por su renacionalización, bajo la gestión de trabajadores.

4- Fuera la burocracia de los sindicatos.

5- Basta de tercerizaciones, contrato permanente y el convenio mejor en cada industria.


Convocamos a todas las organizaciones obreras, populares y democráticas a marchar a Plaza de Mayo, el jueves 20 de octubre, por el castigo a TODOS los culpables.

Los candidatos a diputados por Córdoba del Frente de Izquierda

A votar por los luchadores obreros y socialistas del Frente de Izquierda para que los reclamos del pueblo trabajador se hagan sentir en el congreso nacional.

25 de septiembre de 2011

23 de octubre: Votar al Frente de Izquierda y de los Trabajadores

Apoyemos la fórmula presidencial Altamira-Castillo y el ingreso de diputados de izquierda al Congreso Nacional, por un salario igual al costo de la canasta familiar con una jornada laboral de ocho horas, y por una alternativa política de los trabajadores.

22 de septiembre de 2011

Córdoba capital: Balance de las elecciones municipales

Con el 36% de los votos (la votación más baja que haya obtenido un intendente electo desde el ’83 hasta la fecha), la UCR logró recuperar después de doce años la intendencia de la capital cordobesa.

La elección sirvió, además, para propinar una derrota a Campana, el candidato del gobernador Schiaretti, quien quedó tercero, con el 21%, siete puntos por debajo de Olga Riutort, que fue por fuera del PJ oficial.

Esteban Dómina, el candidato de Juez y Binner, quedó cuarto con menos del 8% de los votos. Entre el 7 de agosto, cuando fueron las elecciones provinciales, y el domingo pasado, el Frente Cívico perdió en la Capital más de 200 mil votos y se redujo a la quinta parte.

Para Schiaretti y varios comentaristas políticos en Córdoba, los resultados habrían marcado el retorno al bipartidismo ‘clásico': el radicalismo en lugar del juecismo.

Sin embargo, el 7 de agosto ganó Juez; el 14, Cristina, y ahora Mestre: ninguno tiene asegurado nada. Cristina no tendrá representantes propios ni en la Legislatura provincial ni en el Concejo capitalino; De la Sota no los tiene en el municipio; Alfonsín apenas superó el 15% en las primarias nacionales en este distrito. El intendente electo, Ramón Mestre, llamó a la convivencia a De la Sota y Cristina.

La economía provincial, por su parte, entró en terreno farragoso: la industria automotriz local está en alerta rojo ante los anuncios recesivos que vienen de Brasil. Tampoco están bien las finanzas provinciales. La deuda contraída aumentó un 10% en 18 meses como resultado de la paulatina devaluación del peso, los Boncor (bonos de la provincia) habían sido emitidos con un dólar a 3,82. El gobierno provincial salió a endeudarse por otros 278 millones de dólares.

Frente de Izquierda

El Frente de Izquierda retrocedió en votos respecto de las elecciones anteriores. Obtuvimos 9.300 votos, el 1,4% de los válidos, cuando en la Ciudad habíamos conseguido el 2,5% para gobernador el 7 de agosto y el 6% para presidente en las ‘primarias'.

La posibilidad de consagrar concejales se plasmó en una campaña (repartimos casi 100 mil ejemplares de nuestra plataforma). Tuvimos en contra el poco conocimiento de nuestros candidatos por parte del electorado y la feroz campaña mediática de los tres primeros (se calcula que gastaron cerca de 70 millones de pesos). No contamos con la ventaja del amplio reconocimiento con que cuentan Liliana Olivero y Eduardo Salas, ni del de Jorge Altamira, ni del impacto de la campaña por los 400 mil votos. De alguna manera refleja una aún débil influencia del Frente de Izquierda como tal en la provincia. Otra circunstancia negativa es la imposibilidad que impone el sistema de votación para separar el voto a intendente del voto a los concejales.

Ahora tenemos el desafío de superarnos el 23 de octubre.

Eduardo Salas

Anses: a quién sirve el Fondo de Garantía

En una reciente conferencia, el titular de la entidad, Diego Bossio, afirmó que la Anses apuesta a inversiones "que generen trabajo y potencien la economía". Según Bossio, la Anses incrementará "su participación en proyectos productivos" (Página/12, 16/9). Según esta versión, los fondos de la Anses -integrados por los aportes acumulados de los trabajadores- estarían siendo administrados de acuerdo con los intereses de la mayoría nacional y en función de un plan de conjunto. En la conferencia donde se dijo esto, estaba presente el presidente del fondo de pensiones de Japón. Llevado por las afirmaciones de Bossi, el cronista del diario llega a decir que "a diferencia de la experiencia argentina, el fondo nipón no invierte sus abundantes recursos en proyectos productivos, sino en acciones y bonos" (ídem).

Pero el "fondo" argentino no difiere del japonés -es lo que demuestran los propios informes de la Anses que llevan la firma de Bossio. A diciembre de 2010, el 55% de su cartera estaba colocada en títulos públicos. Son los bonos de deuda que el Estado le compró a acreedores internacionales o, lo que es lo mismo, el pago de la deuda externa con la plata de los jubilados. Otro 15% está colocado en acciones y títulos privados. En el caso de los títulos públicos, una devaluación o una bancarrota fiscal conduciría a igual destino a esa porción sustancial del "fondo de garantía". Las acciones privadas, por su parte, están sujetas a los vaivenes de los negocios capitalistas. Está claro, por lo tanto, que el "fondo de garantía" y sus resultados están condicionados a la marcha de los capitalistas y de su Estado.

Pero en lo que refiere a los "proyectos productivos" -el 11% de la cartera-, también se trata de recursos dirigidos, directa o indirectamente, a capitales privados. Tenemos, por un lado, al programa de "incentivos a la industria automotriz", que se reparte principalmente entre Peugeot, General Motors, VW y Ford -el que se llevó 450 millones en 2010. Una de las inversiones más importantes -casi 400 millones de dólares- fue destinada a la construcción de una nueva central eléctrica de la empresa cordobesa de energía. La obra -adjudicada a Siemens y al grupo K Electroenergía- está siendo investigada por sobreprecios.

Mal que le pese a Bossio, la evolución del Fondo de Garantía está sometida al destino de las corporaciones capitalistas, no del interés social general. Si la asignación universal por hijo y otras prestaciones sociales las paga la Anses, ello le permite al presupuesto nacional liberar recursos para, por ejemplo, seguir subsidiando a los privatizadores. Por lo tanto, el sistema previsional de los K continúa siendo un régimen de capitalización gerenciado por el Estado. La mayor prueba de ello es que el fondo no "sustenta" lo que debería ser su objetivo elemental: asegurar el pago del 82% móvil a los jubilados. En cambio, los haberes están sometidos a una "movilidad" que los relaciona, entre otros factores, con la recaudación del sistema previsional. Como lo haría una AFJP, el fondo condiciona el haber jubilatorio a los resultados de sus colocaciones, que a su vez dependen de la marcha de la deuda pública y de los dividendos capitalistas.

Para que el fondo sirva a la "economía en general", sus recursos -y los de toda la Anses -deberían ser colocados bajo la gestión de trabajadores y jubilados. A partir de allí, asegurar el pago del 82% móvil, reforzando sus ingresos con la restitución de los aportes patronales e impuestos extraordinarios a la clase capitalista que -precarización mediante- ha sido beneficiaria de la evasión previsional. Asegurando esa reivindicación fundamental, los fondos previsionales acumulados pueden ser aplicados a un plan de obras públicas y reindustrialización, en función de los intereses de la mayoría trabajadora y bajo su control directo.


Marcelo Ramal

El malestar de "Carta Abierta" con la caricatura de Tecnópolis

Con el título “Tecnología y lengua nacional”, Horacio González acaba de publicar un artículo en Página/12 (15/9). El texto traduce el inconformismo del autor frente a la propaganda oficial que rodea la mega-exposición Tecnópolis. Aunque el director de la Biblioteca Nacional es poco explícito, no le resulta, sin embargo, “satisfactorio, ni tampoco suficiente” que se insista en hablar de “sociedad del conocimiento” ni que se equipare el avance de los “medios tecnológicos” como sinónimo de “democracia social”, o a las “tecnologías de la información” como promotoras de una “vida emancipada”. Obvio: el lenguaje oficial es un viaje al pasado, cuando el positivismo ponía un signo igual entre la tecnología y el desarrollo de las fuerzas productivas del individuo social, así como al ‘orden’ con el ‘progreso’. González descubrió en Tecnópolis que su gobierno preferido reedita el ‘modelo’ del roquismo y de la “generación del ’80”, o el ‘cientificismo’ del frondicismo de los años ’60. A González se le escapa, sin embargo, lo fundamental: que a este ‘neo positivismo’ se lo llevó puesto la declinación del capitalismo, ni qué hablar de la bancarrota capitalista actual que se desarrolla frente a nuestros propios ojos. No se trata siquiera de que González desconfíe del planteo oficial, sino solamente de su lenguaje -o, mejor, de su ropaje- el macaneo de la propaganda del gobierno. Por eso llama a recrear un “léxico” que dé cuenta de las “nuevas tecnologías autónomas” y confluya con un aggiornamiento de la “lengua nacional”.

El embellecimiento oficial a una suerte de “revolución científica-técnica- productiva” recuerda, también, el lenguaje de los autorreformadores del stalinismo en la década de los ’60-’70, es decir en las vísperas de su disolución. El estudioso K del lenguaje olvida una premisa fundamental: la lengua no traiciona. La intelectualidad hacía un culto abstracto de la ciencia y la tecnología, porque en el ámbito de la cultura estaliniana -y también de la izquierda liberal norteamericana- era el caballito de batalla de una “convergencia” entre capitalismo y socialismo. Uno de los íconos de este planteo fue Daniel Bell, recientemente fallecido, quien difundió la tesis de una sociedad “postindustrial” basada en la información y el conocimiento. La historia no se movía hacia adelante por medio de la revolución, sino por medio de la técnica y el saber científico; no por la lucha de clases, sino por el laboratorio y la academia; no por la clase obrera, sino por los científicos.

A la ideología “cientificista”, en los ’70, se la presentó como una ciencia “rebelde” nativa, según la denominación de Oscar Varsavsky, o como la posibilidad de una práctica tecnológica “autónoma” en los planteos de Jorge Sábato o Amílcar Herrera. El asunto no pasó nunca del verbo a la acción. Ni hubiera podido, porque ni la ciencia ni su forma aplicada pueden superar por sí los límites del régimen político que las condiciona. ¿Hace falta recordar que Perón había vuelto al país no para abrir paso a la liberación de las fuerzas creativas de la nación, sino para imponer a Isabelita y López Rega?

Lo que hoy molesta a González en el discurso oficial es más viejo que el caracú. El antiguo cientificismo propugnaba la invasión del capital extranjero en la esfera de la industria, como la primera fase del capitalismo en los países atrasados (Haya de la Torre). El brasileño Fernando Henrique Cardoso postuló la superación del antagonismo entre “dependencia y desarrollo”. Tecnópolis es una caricatura de aquel cientificismo; está preñada de un neoliberalismo ‘tardío’, ya que mantiene las privatizaciones de los noventa, la tercerización y precarización del trabajo, la sojización agraria (el capital financiero en el campo) y las políticas sociales ‘recomendadas’ por el Banco Mundial. Promueve la unidad del saber, los negocios y las “agencias” de innovación para lucrar en nichos rentables (software, biotecnología). Los Kirchner han seguido la línea de un Ministerio de Educación sin escuelas. Más que una “sociedad del conocimiento”, tenemos un embrutecimiento que no cesa, como lo prueban las más diversas evaluaciones educativas internacionales.

No es el velo del lenguaje lo que hay descorrer, sino el de la política. Cuando González sostiene que “los actuales proyectos (los del modelo oficial) han enaltecido la idea de ciencia” no es la lengua la que le juega, a él mismo, una mala pasada. Es su defectuosa comprensión de los límites insuperables de la causa kirchnerista: una improvisación para atajar la ‘emergencia’ heredada de 2001, que se enfrenta ahora a una ‘emergencia’ de carácter planetario.


Pablo Rieznik

Schoklender, las Madres... y la SIDE

La extorsión de Sergio Schoklender, en principio, resultó eficaz. El síntoma más palpable de eso es que el gobierno intenta lo imposible: tomar distancia de Madres de Plaza de Mayo. El gran bocón del oficialismo, Aníbal Fernández, dice ahora que la empresa constructora -fraudulenta y corrompida- en que se ha transformado la entidad de Hebe de Bonafini debe arreglar "internamente" sus asuntos y que el gobierno no volverá a darle dinero. El problema es que "sus asuntos" consisten en una enorme estafa con dineros públicos y, según denuncia Schoklender, involucran a los servicios de inteligencia del Estado. Esa sociedad entre Madres y la Side es, entre otras cosas, lo que ha estallado por el escándalo.

Dice Schoklender que el hombre enviado por Aníbal Fernández para que guardara silencio es un agente de la Side: Fernando Poncino. La versión resulta creíble porque Poncino es íntimo de Miguel Núñez, ex portavoz de Cristina Kirchner cuando ella era senadora. Poncino conoció a la actual Presidenta en 2003, cuando él se dedicaba a espiar a los legisladores y Néstor Kirchner ya era jefe del Ejecutivo. En esa época empezó la carrera de Poncino en el círculo K hasta convertirse en lo que es hoy: una de las piezas clave de la Casa Rosada en la estructura de la Side.

Poncino también es asesor de Nilda Garré desde los tiempos en que la hoy titular de Seguridad era viceministra del Interior en el gobierno de Fernando de la Rúa, y colaboró con Jaime Stiusso (véase Prensa Obrera Nº 1.189) en el armado judicial que quiso involucrar a Irán con el atentado a la Amia.

Director periodístico

En estos días, Poncino tiene una tarea de importancia mayor: es el "director periodístico", por cuenta de la Side y del gobierno, de "6,7,8" y de otros programas y medios oficialistas. La calidad de esos programas habla de la calidad de su orientador.

Ese es el tipo que, según explicó Schoklender con lujo de detalles, le dijo: "Quedate tranquilo, no te preocupés que Aníbal no se olvida de los amigos... No insistás en que te indaguen, después del 23 de octubre el caso se pincha".

La cuestión, además, toma otra entidad porque, en el circo parlamentario que lo tuvo de protagonista, Schoklender se negaba a develar el nombre de Poncino, hasta que, cuando lo apuraron, dijo: "No me acuerdo, pero es público, es el que aparece en la foto del balcón" (publicada por La Nación el 24 de julio).

"La foto del balcón" fue tomada cuando la Guardia de Infantería desalojó, por orden de Nilda Garré, la obra que Madres construía en Castañares y General Paz. Con sus obreros en huelga por salarios impagos, parte de los edificios fue ocupada por un grupo de personas sin techo. Garré mandó a la infantería y, en medio del procedimiento, Poncino apareció en un balcón con matones de la Uocra. Como se ve, el hombre dirige los medios K y es el puente -cuesta y hasta resulta doloroso decirlo- entre la Side y ese carnaval fúnebre en que la cooptación política ha convertido a las Madres de Plaza de Mayo.

Por esos días de julio, conviene recordar, en medio del escándalo, Mauricio Macri le giraba casi 10 millones de pesos a la Fundación Madres.

Ahora, Fernández quiere despegar al gobierno nacional de toda esta porquería. Es imposible: ¿Cómo le rebate al extorsionador Schoklender la denuncia de que el Ministerio de Planificación, conducido por Julio De Vido, tenía oficinas en la fundación, y que el secretario de Obras Públicas, Abel Fatala, iba a Madres dos veces por semana?

En definitiva, el manejo fraudulento de casi 800 millones de pesos ha destapado una olla maloliente, que tiene todo lo que se necesita: organizaciones sociales cooptadas, un Estado corrompido y hasta un juez, Norberto Oyarbide, que habla todos los días con el jefe de gabinete. Nada novedoso, aunque se debe señalar la obra más trágica del kirchnerismo: haber hundido a las Madres de Plaza de Mayo, nada menos, en semejante sumidero.


Alejandro Guerrero

La Universidad vota al Frente de Izquierda

La izquierda independiente del gobierno y el Partido Obrero en primer lugar fueron los ganadores sin atenuantes en las elecciones de la UBA, la primera universidad del país.

Cincuenta mil estudiantes votaron por las listas que enfrentaron, en todas las facultades, a las camarillas universitarias y al gobierno K y conquistaron nueve de los trece centros en disputa.

Para algunos, fue solamente el dato político de “la semana”. Para los que miran más lejos, es el dato central de un período político.

Como nunca, el kirchnerismo empeñó todos sus recursos para desbancar a la izquierda de la Federación Universitaria.

Pero el fracaso nunca fue mayor: la juventud le dio la espalda a un “armado” regado con los generosos recursos del Estado, pero sin ningún planteo transformador. Al fin de cuentas, los K cogobiernan la UBA con las viejas camarillas radicales “destituyentes”, transitoriamente reconvertidas al oficialismo.

Los peronistas setentistas solían decir que “la universidad no es una isla”. ¿Entonces? Saquemos las conclusiones políticas. La juventud que votó a la izquierda es la que padece la precarización laboral, cuando no la desocupación más cruda.

Es la que tiene vedado el acceso a la vivienda y a los alquileres.

Es la que soporta la inseguridad de un aparato represivo en descomposición y entrelazado con el crimen organizado. Esa juventud, por lo tanto, produjo un pronunciamiento político.

Hace sólo cinco semanas lo había hecho a la escala del país: el voto al Frente de Izquierda tuvo en los jóvenes su expresión más numerosa.

Al calor de ese impulso, las listas del PO y de la izquierda no se limitaron a “retener” los centros: aumentaron, sin excepciones, las cifras del pasado. O sea que canalizaron una tendencia de carácter general.

Es el síntoma de un desplazamiento político, que progresa a caballo de una sorda insatisfacción popular. La “indignación” de Argentina no es aún explosiva, pero para expresarse se sirve de organizaciones con un programa definido.

Saquemos las conclusiones de la victoria universitaria, redoblando el apoyo al Frente de Izquierda en todo el país.

15 de septiembre de 2011

Planteo del Frente de Izquierda ante la crisis hídrica provincial agravada por los incendios

En las sierras cordobesas la situación en torno al agua empeora cada día. De poco han servido los nuevos pozos, los cortes semanales del suministro que soportamos desde 2009 y la tan publicitada obra de La Calera. No se ha logrado impedir que la crisis hídrica se profundice.

Nos preguntamos porqué.

En los últimos años, tanto el gobierno provincial como los municipios se han dedicado a aprobar loteo tras loteo, favoreciendo negocios millonarios de los pulpos inmobiliarios. Los barrios privados y countries se multiplican con la misma rapidez que perdemos lo poco que queda de bosque nativo. Se urbaniza todo lo que está a mano, no importan las nacientes de los arroyos, los cauces y la preservación de las cuencas hídricas.

Se ha festejado con algarabía la obra denominada “camino del cuadrado”. Con ella aumenta el valor de la tierra de los especuladores y se propician sus emprendimientos. A causa de esta obra se destruyó la reserva natural “Vaquerías”, lo cual se hizo en forma deliberada, ya que se presentó el daño como un hecho consumado. Sólo después de producido el enorme daño ambiental, y a raíz de una auditora de la propietaria de la reserva, la Universidad de Córdoba, se ha prometido una reparación por parte del gobierno de Schiaretti, que se calcula tardará 30 años en realizarse y costará más de 100 millones de pesos.

Todo ello fue puesto sobre aviso por varios especialistas y organizaciones ambientalistas y de vecinos de la zona. No les importó un bledo; arrasaron. Tampoco les importaron las advertencias sobre el aumento del riesgo de incendio que esta obra traería en toda la zona. Así, en el último incendio llegamos a perder el 75% de la reserva natural “La Quebrada” con las consecuencias que esto implica: mayor evaporación y menor caudal en los ríos.

Con la pérdida del arroyo Vaquerías, el tapado de vertientes, la alteración del cauce de ríos y arroyos, y el aumento de riesgo de incendios que se favorece desde el propio gobierno, no es muy difícil imaginar dónde está la causa y los responsables de la crisis hídrica que se vive en las sierras de Córdoba.

Unos días atrás Bugliotti, uno de los responsables de la situación, anunció que obtendría la financiación por parte de la Nación para la construcción de un acueducto para las Sierras Chicas. El hecho de que haya sido el especulador inmobiliario el que hizo el anuncio de la supuesta nueva obra pública, da cuenta de hacia dónde se dirige el beneficio de la misma: Bugliotti construye un mega emprendimiento en la ciudad de Salsipuedes. Los intendentes de la zona y el gobierno provincial no abren la boca al respecto.

La crisis hídrica se profundiza, sin embargo los gobiernos locales y provincial siguen tirando de la cuerda en beneficio de un puñado de capitalistas. Ya el año pasado, el PJ, la UCR y Juez votaron en la Legislatura de Córdoba la mal llamada “ley de bosques”, cuyo nombre real debe ser ley de desmonte, y lo hicieron por cuenta y orden de los pulpos sojeros.

Sin embargo, la crisis no termina ahí. Bajo el pretexto de endilgarle a la población la responsabilidad del asunto, se impuso hace años el denominado impuesto al fuego que pagan los consumidores de energía eléctrica, no los especuladores. Los millones que se han recaudado con este impuesto no sirvieron para prevenir ni combatir el fuego, como lo expresó un ambientalista a propósito de los últimos incendios: mas allá de la abnegada tarea de los bomberos voluntarios, el fuego se extinguió cuado no quedaba nada por quemar. Es decir, encima de todo siempre pagamos los trabajadores.

Sobre la base de esta caracterización, desde la Izquierda proponemos el siguiente programa de salida:

1. Preservación y recuperación de los bosques con las especies nativas, verdaderas “fabricas de agua”.

2. Derogación de la ley de “desmonte” y aprobación del proyecto consensuado en la Comisión de Ecología de la Legislatura de Córdoba.

3. Suspensión de factibilidad a cualquier nuevo loteo.

4. Poner fin al acaparamiento privado del suelo, por parte de los especuladores, declarándolo de utilidad pública.

5. Impuestos progresivos al capital inmobiliario y sojero, destinado a solucionar integralmente la crisis hídrica.

6. El sistema de provisión de agua debe ser un sistema unificado estatal bajo control de usuarios y trabajadores.


Pongamos en pie una asamblea regional de vecinos en defensa del agua y el ambiente.

Se realizó la conferencia de prensa del Frente de Izquierda hacia octubre

"El ingreso de la izquierda al Congreso cambiaría las tendencias políticas del país"













En el día de la fecha, jueves 15 de octubre, en el Hotel Conte, ciudad de Buenos Aires, el Frente de Izquierda y de los Trabajadores realizó una conferencia de prensa en donde anunció los nuevos desafíos y sus planteos programáticos hacia octubre. Tomaron la palabra José Castillo, candidato a tercer diputado por Capital Federal e integrante de IS; Cristian Castillo, candidato a vicepresidente e integrante del PTS, y cerró Jorge Altamira, candidato a presidente de la nación e integrante del Partido Obrero.

Estuvieron presentes además Néstor Pitrola, primer candidato a diputado nacional por la Provincia de Bs. As.; Gabriel Solano primer candidato a diputado nacional por Capital Federal; Myrian Bregman, candidata a diputada por Capital; Edgardo Reynoso, candidato a senador por la Provincia de Buenos Aires, y José Montes, candidato a gobernador por esa provincia.

Jorge Altamira, en su discurso, señaló: “Las elecciones del 23 de octubre serán el escenario donde se va a discutir la estructura política futura del país. En las primarias de agosto, la oposición tradicional, sojera y derechista quedó pulverizada, y el Frente de Izquierda produjo un ascenso. Lo que se plantea ahora, por lo tanto, es la posibilidad de que el kirchnerismo sea enfrentado, no por los derechistas derrotados, sino por una oposición de izquierda. Si logramos el ingreso del Frente de Izquierda al Congreso, ese hecho cambiará las tendencias políticas del país, y le abriría a los trabajadores una perspectiva enorme. Sería una señal política a la clase obrera argentina de que por fin puede tener su partido, su dirección y su programa propios, y por lo tanto que puede colocarse como alternativa de poder”.

Jorge Altamira en Córdoba: Una gran repercusión política

El lunes pasado, el Frente de Izquierda de Córdoba desplegó una enorme actividad, con la vista puesta en las elecciones del domingo en la ciudad capital. En una jornada muy intensa, los integrantes del FIT acompañaron el recorrido de Jorge Altamira por una veintena de medios de comunicación y diarios locales y nacionales, que culminó en una concurrida conferencia de prensa. Altamira impulsó el voto a la lista del Frente, que integran Daniel Báez, candidato a intendente, y Leticia Celli y Manuel D'Alessandro, candidatos a concejales. Luego de la ratificación de la banca de Liliana Olivero el 7 de agosto, el Frente aumentó su votación en la capital el 14 de agosto, lo que ofrece ahora una posibilidad de ingresar en el Concejo Deliberante. Como lo ha establecido el Frente, esa posición será gestionada en forma colectiva y rotativa por el conjunto de los candidatos.

La gira tuvo un éxito mediático indudable, que se verificó en la extensión de los espacios que le fueron concedidos a Altamira, así como en la repercusión en diarios porteños y nacionales que se hicieron eco de la visita del candidato presidencial del Frente a la provincia. Asimismo, la visita permitió desarrollar de forma minuciosa el carácter contradictorio de la elección de CFK, que deberá arbitrar un conflicto social creciente, en el marco de una atomización muy fuerte del conjunto de las instituciones que integran el régimen político actual. Altamira destacó también el ataque de la Presidenta contra los trabajadores del Subte -luego de haber circulado profusamente por las cámaras empresarias en los días previos- como una comprobación de que el gobierno ve a su adversario en el movimiento obrero independiente y en el Frente de Izquierda. Inadvertidamente, Cristina Kirchner desvió su ataque tradicional contra los ‘destituyentes' de derecha, para centrar en la izquierda a su oposición política principal. Estamos ante un giro potencial en las relaciones políticas que han dominado bajo el kirchnerismo. La gira de Altamira por la ciudad de Córdoba permitió convertir a la capital de la provincia en el escenario para desplegar la posición conquistada por el Frente de Izquierda luego de las ‘primarias' del 14.

La seguidilla de elecciones no nos ha dado el tiempo para instalar a nuestros candidatos a concejales ante el medio amplio de la opinión pública, pero tenemos la expectativa de que el electorado que acompañó la renovación de la banca de Liliana y a la fórmula presidencial en las ‘primarias', se manifieste de nuevo el domingo que viene con el ingreso de concejales de izquierda en el Concejo Deliberante. De conquistar este objetivo, quedaría planteado de manera inmediatamente posterior la pelea por el ingreso de un diputado nacional por la provincia al Congreso de la Nación.

Eduardo Salas

Universidad Nacional de Córdoba: No a la maniobra del Rectorado y Franja Morada

Las elecciones deben ser en octubre
 
Hace algunas semanas, el rectorado y Franja Morada aprobaron en el Consejo Superior de la UNC la postergación de las elecciones de consejeros y consiliarios estudiantiles para junio de 2012, además de resolver la auto prórroga de sus mandatos por ocho meses.

El argumento: sincronizar todas las elecciones, para “fortalecer las instituciones y favorecer la democracia universitaria”. Con ese mismo criterio, Franja Morada (con el respaldo de La Bisagra), el MNR de Ingeniería, el GECIM (ex Mega) y el Geadi (Frente Cívico) resolvieron, en la representativa de centros de estudiantes de la FUC, prorrogarse a sí mismos en la conducción de los mismos y postergar las elecciones hasta junio de 2012.

Sin duda, se trata de una maniobra podrida de las camarillas y la burocracia de Franja Morada, que busca como principal objetivo avanzar en el disciplinamiento del conjunto de los claustros y, por sobre todo, del movimiento estudiantil -regimentando las elecciones de arriba hacia abajo, para fortalecer un régimen de camarillas que haga pasar mejor la política privatista en la universidad.

Ese fue el objetivo estratégico trazado desde el comienzo por la alianza progre-radical, la que vino a desenvolver a fondo la aplicación de la Ley de Educación Superior menemista -que el gobierno derechista de González no pudo imponer, por la masiva movilización de la comunidad educativa en 2005.

El saldo es el avance de la Coneau en más facultades que en la era González y la proliferación de convenios con empresas; con ello la subordinación de los planes de estudio e investigaciones al servicio del lucro capitalista, el deterioro creciente de las condiciones de cursado y la calidad académica, mientras los estudiantes debemos sortear el cupo al ingreso y las restricciones al cursado y egreso.

Violando los principios más elementales de la democracia, y atacando como nunca lo que queda de las conquistas de los reformistas del ‘18, arremeten contra la democracia universitaria y el cogobierno para cuidar su caja.

La famosa “sincronización” es una herramienta al servicio de este objetivo -que, a su vez, pretende dirimir una interna entre las camarillas gobernantes para establecer la sucesión de Scotto en el rectorado. Quien mejor ha quedado parado para este propósito es el aparato radical de Franja Morada, el cual se ha reconstruido bajo el gobierno “progresista” y es el que resulta beneficiado por la postergación de las elecciones.

La sincronización de las elecciones apunta a conservar a la burocracia estudiantil enquistada en los centros de estudiantes y mantenerlos paralizados, mientras avanza la política privatista en la UNC.

Llamamos a denunciar el objetivo político de esta maniobra podrida y a enfrentarlo con una fuerte campaña en toda la universidad para que las elecciones se realicen en octubre -cuando vence el mandato de las actuales conducciones, consejeros y consiliarios. Sólo de esta forma podremos prepararnos para recuperar los centros de estudiantes, desplazando a las agrupaciones adheridas al Rectorado y poniéndolos al servicio de nuestras luchas.


Cintia M. Frencia

Desarrollemos una oposición de izquierda

Después de un periplo coqueto por todas las cámaras empresariales, Cristina Kirchner decidió descargar su bronca contra los trabajadores del subte, en otra expresión de la condición de clase de su gobierno. Días después del discurso oficial, el régimen de explotación laboral de los Roggio y Cirigliano se cobraba decenas de heridos y víctimas fatales. La tendinitis que ‘alegró’ el discurso de CFK quedó desenmascarada enseguida por los delegados del subte, quienes denunciaron la inminencia de un tarifazo en el transporte -admitido sin ‘peros' por el ministro Schiavi. Para la Presidenta, "es fácil ser revolucionario en democracia, bajo mi gobierno", como si los K hubieran movido un dedo para acabar con la dictadura, o como si no hubieran sido precisamente estos revolucionarios los que la combatieron en la más dura clandestinidad. Nunca, por otra parte, la democracia burguesa hizo fácil la labor de los revolucionarios, porque une a la represión de sus aparatos de seguridad o de las patotas que encubre (Pedraza y la policía mancomunados), la manipulación de los monopolios de la comunicación y el ejercicio de la censura.

Políticamente, el discurso antiobrero contra los trabajadores del subte y contra los revolucionarios tiene toda la huella de la confrontación política contra el Frente de Izquierda -algo que acredita la condición de ‘estadista' que sus acólitos le atribuyen, porque advierte que en Argentina se desarrolla, desde hace tiempo, una oposición obrera y socialista, en el marco de una bancarrota capitalista mundial sin parangón ya en la historia. CFK sabe muy bien que el movimiento de lucha del subte se forjó en los días del "neoliberalismo", cuando los Kirchner participaban del gobierno de la flexibilidad laboral. En la batalla contra Ibarra por la jornada de seis horas, los kirchneristas se pusieron del otro lado de la barricada -con Alberto Fernández a la cabeza, se fueron de viaje cuando se necesitaban los votos para insistir en la ley vetada por Ibarra. El ataque de la candidata del 50% a los delegados no puede separarse de la agenda del Frente de Izquierda en la campaña electoral: la lucha por la recuperación de los sindicatos contra la burocracia, o la defensa de los centros de estudiantes y federaciones independientes frente a las camarillas radical-kirchneristas. En estos mismos días, un diario porteño retrató el carácter de la lucha política en las elecciones universitarias en la UBA con fotos de Cristina, de Boudou y de Altamira. En esta universidad se enfrentan los arribistas del poder y los militantes revolucionarios.

Resucitando a la derecha


El kirchnerismo se opone con todas sus fuerzas al desarrollo de una oposición política a su izquierda; prefiere el negocio de extorsionar al pueblo con el peligro de la "derecha". Ahora que esa derecha quedó pulverizada electoralmente, el kirchnerismo está empeñado en mantenerla a flote. Rescata, por un lado, a los Binner -para que la bronca social no alimente la votación del Frente de Izquierda- y también avanza en acuerdos con Macri. Como todos los bonapartes del pasado, CFK quiere designar a su propia (inocua) oposición. El Plan Agropecuario -que promete soja, monocultivo y tóxicos para el campo en las próximas décadas- es una oferta excelente para los intereses agrarios que protege el Frente binnerista. Binner le dio el vuelto con la oposición a que Shocklender vaya a declarar al Congreso -aunque lo que el gobierno teme más es que abra la boca el secretario de Obras Públicas, José López.

La hostilidad del kirchnerismo a la izquierda delata la inminencia de los tarifazos y la devaluación del peso. La salida de capitales está protagonizada por gran parte de los que le dieron el voto al kirchnerismo el 14 de agosto.

El voto al Frente de Izquierda

La constitución del Frente le ha dado una expresión política a las luchas antiburocráticas al interior de las empresas y los sindicatos. El ingreso a la elección general nos ha dado la oportunidad de dirigirnos a millones de trabajadores, incluso -y principalmente- a aquellos que no han tenido una experiencia directa o personal de lucha de clases. Luchamos por llevar diputados del Frente al Congreso nacional. Los medios insisten en estos días de que se trata de una elección "cantada", pero un ingreso del Frente de Izquierda al Congreso significaría un cambio en las relaciones políticas en el país: la aparición de una oposición de izquierda terminaría con la extorsión política del kirchnerismo a los trabajadores: ‘nosotros o la derecha’ (aunque la mayor parte de la derecha se anida en el gobierno). En las vísperas de un derrumbe de la Unión Europea, no sería poca cosa.

Para sepultar a la derecha no hay otra garantía que el voto al Frente de Izquierda. Sólo una oposición de izquierda al gobierno kirchnerista, en el país y en el Congreso, desarrollará un programa de salida a la crisis capitalista a partir de las aspiraciones obreras y populares.

Marcelo Ramal

El vaciamiento de YPF, con viento de cola

En la petrolera española Repsol, controlante de casi el 60% de YPF, acaba de producirse una fuerte movida accionaria. La constructora española Sacyr y la petrolera mexicana Pemex se pusieron de acuerdo para tomar la rienda de Repsol, mediante un pacto que reúne el 30% de las acciones. Para efectivizar el pacto, Pemex salió a comprar acciones en la Bolsa con un préstamo de 1.200 millones de euros.

Montaña de deudas

La movida de Sacyr-Pemex en Repsol sacudió al propio gobierno español. Ocurre que las dos compañías soportan una montaña de deudas. Pemex carga con un pasivo de 53.000 millones de dólares, mientras sobrevuelan sobre ella los planes de privatización. Precisamente, la “internacionalización” de Pemex -vía su mayor participación en Repsol- es una de las condiciones que hace apetecible esa privatización. Sacyr, por su parte, está en defol con la deuda que contrajo para su negocio inmobiliario y aún debe la totalidad de los 5200 millones que tomó prestados para comprar el 20% de Repsol en 2006. No sorprende, entonces, que el “asalto” a Repsol estuviera fogoneado por los acreedores de Sacyr y de Pemex, quienes le “exigieron tomar el control de Repsol YPF (como condición) para refinanciar su deuda” (Cronista, 7/9). El banco que actuó como ´facilitador´ de la ampliación de capital de Pemex en Repsol, el francés Crédit Agricole, es el principal acreedor de Sacyr. La nueva alianza de accionistas apuntaría, por lo tanto, a lograr que Repsol “haga caja” para pagar las deudas, sea por la vía de un mayor reparto de dividendos o por la “conversión en liquidez de algunos activos o inversiones” (El País, 1/9). Los críticos del acuerdo temen -con razón- que Sacyr-Pemex endeuden a Repsol para rescatar a sus propias finanzas quebradas y la lleven a un desguace o al rescate por parte del Estado español.

YPF

El gabinete kirchnerista es un cómplice declarado de estas operaciones. El grupo Eskenazi, instalado en YPF por un acuerdo entre Repsol y los K, ha firmado la distribución abusiva de dividendos, como lo reclamaban los españoles, a expensas de los planes de inversión y exploración de hidrocarburos, o de la financiación de parte de ellos con nueva deuda. En la última década, YPF consumió el 76% de sus reservas de gas y más de la mitad de las de petróleo. Después del ingreso de Ezkenazi, la distribución de utilidades entre los accionistas llegó hasta el 90% de las utilidades, cuando “el promedio mundial de dividendos de las empresas petroleras se ubican en el 26%” (Cronista, 5/9). Esos recursos resarcieron a los accionistas de Repsol, en medio de la bancarrota internacional, y también a Ezkenazi, quien está pagando con los dividendos que recibe el préstamo que contrajo para entrar en la compañía -o sea que los K aceptaron que cobrara dividendos un grupo que no había puesto aún un solo peso. Ezkenazi acaba de anunciar nuevas inversiones para la exploración de gas esquiso, pero que serán financiadas con el ingreso de contratistas de servicios o integralmente con deuda. Esto, mientras se siguen distribuyendo la casi totalidad de las utilidades.

Ezkenazi y los K siguen con atención la movida en Repsol, convencidos de que ésta tiene la intención de irse de YPF y la expectativa de avanzar accionariamente sobre el 57% restante de la empresa, con los dividendos que se distribuyan. La orientación de los empresarios “Nac y pop” es “hacer caja” con YPF, ahora con los aumentos prometidos en los combustibles y agravando la desinversión y el endeudamiento. El gobierno que dice “blindarse” frente a la crisis mundial es incapaz de “blindar” a YPF de una nueva tentativa de desguace, que está directamente relacionada con esa crisis. Las nuevas maniobras en Repsol plantean, como nunca, la necesidad de renacionalizar YPF sin resarcir a sus vaciadores, bajo gestión de sus trabajadores.

Marcelo Ramal

Una ley de tierras para una "patria sojera"

Convalida la entrega de tierras y las expropiaciones de campesinos

Definitivamente, la presidenta Cristina Kirchner ha cambiado su discurso, aunque no de política. Si durante el conflicto agrario, en 2008, llamaba desde la tribuna a evitar la sojización del país, ahora se ha transformado en una impulsora directa del “poroto”. Según acaba de anunciar en Tecnópolis, espera para 2020 que la cosecha se incremente en un 50%, llegando a los 150 millones de toneladas, y que la cantidad de hectáreas dedicadas al cultivo tengan un incremento de la misma proporción. Hasta el sojero Nº 1 del país, el periodista Héctor Huergo, festejó que la Presidenta se sume a lo que él denomina la “segunda revolución de las pampas”.

El “plan agropecuario” que se acaba de anunciar viene al dedo para analizar el proyecto de “ley de tierras” del gobierno. El proyecto pone un techo de 1.000 hectáreas a las nuevas propiedades de extranjeros y un límite del 20% del territorio que pueda estar en manos foráneas. La lista de grandes propietarios extranjeros que se vieron beneficiados con la política K quedan afuera del marco de la ley: los Benetton, con su millón de hectáreas en la Patagonia, la aseguradora yanqui AIG, que posee en Salta 1,5 millón de hectáreas (el 7% de la provincia), la chilena Arauco, asociada a capitales argentinos, que tiene el 6% del territorio de Misiones, o el empresario de Estados Unidos Douglas Tompkins, quien posee territorios con recursos naturales vinculados con el agua -tanto en la Patagonia como en los Esteros del Iberá en Corrientes, incluido el Acuífero Guaraní, que es la mayor reserva de agua dulce del mundo.

La lista es interminable y no sólo tiene a la familia Bush con 30 mil hectáreas en Córdoba, sino a los principales monopolios mineros del mundo, los que poseen el 91% de los emprendimientos en ese rubro del país, la mayoría de ellos en zonas fronterizas de los Andes o a través de la Cordillera. La nueva ley no afecta “la seguridad jurídica de las inversiones”.

Esas tierras, en general, están pagadas a precios de remate y en zonas reclamadas por comunidades originarias y campesinas. Se estima -aunque los cálculos difieren significativamente- que la cantidad de tierras en manos extranjeras es del 10% del territorio -la mitad de lo que autoriza la propuesta que llegó al Congreso. El proyecto, por otro lado, excluye de la norma a los extranjeros que se asocien a capitales nacionales hasta un 49% del capital. Se trata apenas de una formalidad, pues bastaría que el capital extranjero financie con créditos el desarrollo del proyecto compartido para convertirse en el dueño privilegiado de la asociación. Es claramente lo que busca el proyecto, pensando en el ingreso de capitales de China, como acaba de ocurrir con una asociación comercial con productores de Río Negro (330 mil hectáreas), enteramente financiado por capitales de China para exportar la totalidad de la producción a ese país. El pretexto de la “extranjerización” sirve como pantalla para ocultar la expansión de los grandes capitales financieros en el agro, los que contratan los servicios del campo (siembra-cosecha) o alquilan los lotes que les interesan. Gustavo Grobocopatel, uno de los mayores propietarios y arrendadores de tierras, acaba de plantear, precisamente, la necesidad de ampliar el plazo mínimo de los arrendamientos a cinco años y de eliminar el “arriendo accidental” (La Nación, 13/9). La Federación Agraria ha advertido hacia adónde apunta el proyecto agrario: “por el camino actual, podremos llegar a los 160 millones de toneladas, pero con miles de chacareros que quedaron en el camino... y un puñado de pooles de siembra y grandes empresas mantendrán su situación dominante”. Hay que añadir a esto que las grandes propiedades agrarias pagan impuestos inmobiliarios sobre valores fiscales que equivalen al 15% del valor de mercado de la tierra.

La oposición patronal no rechaza el proyecto. El peronismo federal, la UCR y Binner ya han consensuado con el gobierno excluir de las restricciones a los capitalistas extranjeros que tienen residencia en la Argentina. Binner tampoco plantea prohibir la compra por extranjeros de tierras con recursos naturales, como fuentes de agua, sino sólo su “protección”.

El proyecto tiene una elevada dosis de demagogia, en la búsqueda de mantener la iniciativa en un período electoral. Por otro lado, procura mantener la presión sobre los capitalistas, en el marco de la crisis mundial, con la advertencia de una ‘profundización del modelo’. Al precio actual de la tierra, determinado por el elevado precio de la tierra y la bajísima tasa de interés, a nadie le interesa comprar los campos. La aprobación de la ley consolidaría los ‘derechos adquiridos’ de los actuales poseedores foráneos de tierras y de la oligarquía local que se ha apropiado de tierras fiscales y expropiado a los campesinos. Lo que está planteado en lo inmediato, precisamente, es la revisión de todas las compras de tierras de las dos últimas décadas por los grandes propietarios -sean extranjeros o locales- y la aplicación de impuestos rurales progresivos sobre el valor venal de la tierra.

Gabriel Solano

Manifiesto fundacional del Frente de Artistas

A partir de la conformación del Frente de Izquierda, cientos de artistas de distintas disciplinas (música, cine, teatro, danza, plástica, etc.) a lo largo y ancho del país comenzaron a dar su apoyo a este nuevo polo clasista de la izquierda revolucionaria, participando de comités de bases, encuentros, reuniones, etc. Fue tal el desarrollo de este nuevo agrupamiento, que músicos reconocidos como Maikel de Kapanga o Ciro de Jauría participaron de un spot electoral contra la proscripción que intentaba imponer las elecciones primarias -la que superamos holgadamente. Pero el apoyo no quedó solamente en la campaña electoral: impulsada por organizaciones de artistas como Músicos Unidos por el Rock (MUR), Ojo Obrero y LuchArte, se llevó a cabo el Encuentro de Artistas en apoyo al Frente de Izquierda, en donde lanzamos el Frente de Artistas internacionalista, anticapitalista e independiente de gobiernos y patronales. Como uno de nuestros primeros pasos, elaboramos colectivamente el Manifiesto fundacional, el cual expresa nuestra caracterización y nuestra perspectiva frente a la crisis capitalista.

Grandes rebeliones populares sacuden al mundo. Los trabajadores y la juventud se levantan, desde los más diversos puntos geográficos, para terminar con la catástrofe que la crisis capitalista impone. Desde la revolución árabe en Egipto, Libia o Siria hasta las impresionantes huelgas generales en Grecia e Inglaterra, pasando por los indignados de España y Francia hasta llegar a las movilizaciones de masas por la educación pública en Chile y toda Latinoamérica, se multiplican las expresiones que piden a gritos un cambio de raíz para la situación que vivimos.

El Frente de Artistas nace con la necesidad de hacernos protagonistas de esta lucha global. Nuestra inspiración nos la dan todos esos jóvenes que, con una gran valentía, realizando una hazaña histórica que se expande sin parar, nos muestran la alternativa de un nuevo camino, un nuevo comienzo para este mundo.

Sucede que somos testigos de una enorme crisis capitalista internacional que golpea hasta lo más hondo del sistema. Los Estados, al borde de la bancarrota, intentan salvar de forma fallida, una y otra vez, a bancos y grandes empresas que quebraron. Estos salvatajes desesperados se realizan sobre la base del ajuste y la precarización de las condiciones de vida de millones de trabajadores y jóvenes a lo largo del mundo, con despidos masivos, aumento de la edad jubilatoria, reducción del gasto social, hambre, crisis nucleares; o sea, con el reforzamiento de los pilares del capitalismo: la explotación y la desigualdad. El sistema ha colapsado por sus propias contradicciones, y los que crearon las condiciones para la crisis pretenden que la paguemos los trabajadores. Los pueblos no lo van a permitir, por eso se están levantando. El Frente de Artistas se pronuncia anticapitalista y, como tal, planteamos la reorganización de la sociedad sobre nuevas bases, donde, de una vez por todas, el pueblo trabajador sea el que gobierne.

Esta crisis también golpea al arte: los gobiernos se alían con los grandes empresarios "artísticos" para avanzar en la privatización de la cultura. Así, ellos consiguen ganancias extraordinarias, mientras los artistas somos superexplotados y mientras es desmantelado el espacio cultural público. En el capitalismo, el arte, o sea el acto personal de libertad que debería significar la creación, es convertido en una mercancía, un producto, o sea, un acto impersonal. El "mercado artístico" le pone techo a la libertad creativa y la envasa según su necesidad para hacerla negocio. Quienes no siguen esos lineamientos son marginados de los circuitos artísticos. Nosotros planteamos que el Estado debe hacerse cargo de financiar todo tipo de actividad artística y cultural para que todas las expresiones artísticas puedan desarrollarse, sin importar su estilo, género, contenido o ideología. Tenemos que construir fuertes organizaciones de artistas que tomen esta reivindicación central y desenvuelvan un programa para darle una salida a las problemáticas que padecemos. Uno de los fines principales que deben tener estas organizaciones es, al desarrollarse, conformar listas en los distintos sindicatos y/o gremios en los cuales intervenimos y que son, en su mayoría, conducidos por burócratas que están al servicio del Estado y las patronales. La pelea es por recuperar los sindicatos y devolvérselos a los trabajadores de la cultura, a quienes les han sido arrebatados. Mientras muchos intentan poner al artista en el lugar de un mercader o un ser iluminado, para que seamos desclasados sin conciencia ni perspectiva, desde el Frente de Artistas nos pronunciamos como parte de la clase trabajadora. Porque las estrellas solamente están en el cielo.

Nos oponemos a los enormes aparatos de cooptación que construyen los gobiernos del mundo, con grandes prebendas para los artistas que estén dispuestos a obedecer. Quieren atar la cultura a los intereses del Estado para regimentarla y controlarla. El Frente de Artistas dice NO a la cooptación y SI a la independencia política de gobiernos y patronales. Luchamos por un arte libre e independiente, pero para que sea posible, debemos ligar esa lucha a una pelea anticapitalista para acabar con la explotación del hombre por el hombre y dar paso a un gobierno de los trabajadores para que los que decidamos seamos nosotros, no un monopolio o un gobierno capitalista.

El Frente de Artistas no tiene fronteras ni quiere tenerlas: es internacionalista, como la conciencia de la clase obrera, que es una sola. Invitamos a todos los artistas a hacerse parte de esta conciencia global y a unirse a nuestro Frente. El capitalismo tiene fecha de vencimiento, derrotémoslo y vayamos hacia una perspectiva superadora. Ese es nuestro horizonte.

Frente de Artistas

La extorsión de Sergio Schoklender

“Ya avisó: no está dispuesto a caer solo” (La Nación, 9/9).

Sergio Schoklender, en efecto, ha lanzado públicamente un operativo de extorsión ante la posibilidad de quedar detenido por la estafa cometida por la Fundación Madres de Plaza de Mayo con dineros públicos. Es una extorsión mafiosa que golpea, con toda su porquería, muy cerca de la línea de flotación de un gobierno corrompido hasta los huesos. Y ha logrado un primer éxito: el juez Norberto Oyarbide, después de permanecer largamente sentado sobre el expediente, reactivó la causa aunque, de todos modos, nada se resolverá hasta después de las elecciones de octubre.

En principio, un escrito presentado por Schoklender en el juzgado se refiere a contratos de su empresa Meldorek con el gobernador del Chaco, Jorge Capitanich; el intendente de Tigre, Sergio Massa; el gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora; y el de Buenos Aires, Daniel Scioli. También dice que en los aviones de Meldorek viajaban la ministra de Industria, Débora Giorgi, Capitanich y Pablo Moyano.

En otra parte de su denuncia, Schoklender señala que la hija de Hebe de Bonafini, Alejandra, ejecutó operaciones inmobiliarias por 470 mil dólares, que compró una vivienda en 300 mil dólares y un departamento en 90 mil, que luego vendió en 20 mil... a Meldorek. También habla de cuentas aún activas de Madres en el exterior, y advierte que tiene “mucho más para decir”.

Sobre todo, Schoklender apunta contra el ministro de Planificación, Julio de Vido; el secretario de Obras Públicas, José López; y el de Vivienda, Abel Fatala. Ese es el punto más sensible en este caso para el gobierno K.

Al mismo tiempo, Schoklender admitió que Meldorek es suya, pero, según dijo, repartió las acciones entre sus socios Alejandro Gotkin y Gustavo Seventich, “y otros que van a causar sorpresa”. Esa amenaza debe haber alterado la digestión de más de uno en el gobierno.

Porquerías conocidas

Las denuncias de Schoklender, sin embargo, sólo remueven porquerías conocidas. La primera, que el gobierno nacional envió 765 millones de dólares a las Madres de Plaza de Mayo para construir viviendas y centros de salud. Ese dinero, en gran parte, fue desviado, malversado, robado, sin que el Ministerio de Planificación -responsable de controlar su manejo- abriera la boca. Aunque por un monto menor, el sayo le cabe también al gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, encabezado por Mauricio Macri. Incluso, Planificación firmó certificados falsos de avance de obra, que daban por hechos trabajos que no se habían ni empezado, para, de esa manera, habilitar nuevos giros de dinero.

Véase en qué ha transformado la cooptación política del Estado a una institución histórica de defensa de las libertades, como Madres de Plaza de Mayo: en una empresa corrompida, que debe ser defendida de los reclamos de sus obreros por la Guardia de Infantería de la Policía Federal.

Alejandro Guerrero

Anses: primero los bancos

La Anses se quedará con 6.200 millones de pesos del bolsillo de los trabajadores con hijos y de los cesanteados, como consecuencia del recorte del salario familiar por hijo y el seguro del Fondo de Desempleo.

El salario familiar sigue atado a la “tablita” menemista de los ‘90, con el agravante de que los topes de esa tablita fueron aumentados después de dos años en 16,7% (de 2.400 a 2.800 para un salario de 270 pesos por hijo), en un 11,1% (de 3.600 a 4.000 pesos para un salario de 204 pesos) y en un 8,33% (de 4.800 a 5.200 pesos para un salario de 136 pesos). Luego de este último importe de 5.200 pesos no se cobra salario familiar.

El sistema ha sido virtualmente destruido. La función del salario por hijo es completar una canasta familiar para una familia tipo. En salarios, supongamos de 4.000 pesos, sería necesario un salario por hijo de 1.000 pesos cada uno para acceder a la actual canasta familiar de unos 6.000 pesos. La franja mayor del salario en blanco, de 2.800 a 4.000 pesos, se quedó con una asignación familiar de 204 pesos por hijo, un importe absolutamente alejado de cualquier necesidad de la crianza y educación de un niño.

Desde 2009, 600 mil chicos dejaron de cobrarlo, y este año ya dejaron de cobrarlo otros 400 mil que serán muchos más con la entrada en vigencia de las cuotas de las actuales y futuras paritarias, por bajas que sean. Se calcula que 1,5 millones de niños dejarán de cobrarlo desde 2008.

Se trata de una confiscación deliberada de un componente del salario, propiedad de toda la clase trabajadora, porque está financiado por un aporte patronal actualizado permanentemente, año a año, con los aumentos de salarios por paritarias. Semejante desactualización de los montos que percibimos los trabajadores, simplemente está operando una confiscación, por parte de la Anses, que este año alcanza 3.900 millones de pesos que hubieran ido a parar a los bolsillos de los trabajadores, solamente si los montos se hubieran actualizado de acuerdo a paritarias, o sea a la recaudación efectiva de la Anses por el concepto.

Con el Fondo de Desempleo ha ocurrido lo mismo. Su monto se actualizó por última vez en 2006 y no ha sido tocado ahora, por lo cual quedó clavado en la cifra (descendente, porque se reduce por trimestres) de 400 pesos, cuando de acuerdo a inflación debería estar en 2.000 pesos si su monto inicial del año 1992 se actualizara al día de hoy por inflación. Lógico de toda lógica porque, para sobrevivir, un compañero despedido mientras busca trabajo necesita como mínimo 2.000 pesos. El “ahorro” de Boudou y de Cristina, en este rubro es de 2.300 millones pesos en 2011, porque este ex-beneficio, también está financiado por un aporte patronal específico.

Entre salario familiar y Fondo de Desempleo, la confiscación suma 6.200 millones de pesos sólo este año.

La confiscación del asalariado no acaba ahí. Con la desactualización de la cuarta categoría del impuesto a las ganancias, 1,5 millones de trabajadores tributan esta gabela destinada a las ganancias patronales y nunca a los salarios, excepto gerenciales, que podrían ser superiores hoy a 15 ó 20 mil pesos. Y no podemos olvidar los 6 mil millones de pesos de deuda acumulada a las obras sociales que el gobierno no paga ni piensa pagar. Es plata también nuestra, que debiera fluir a nuestras familias en forma de salud, hoy crecientemente arancelada mediante los “coseguros” de la atención. Por lo tanto, otro rubro fiscal de financiamiento obrero al pago de las deudas con el capital financiero y a los subsidios a las privatizadas y a los capitalistas.

CGT y CTA, dibujadas

El golpe económico al movimiento obrero es enorme. Recordemos, además, que el salario mínimo fue fijado a dedo por la Presidenta en 2.300 pesos contra el reclamo de las centrales sindicales. La CGT y la CTA han quedado dibujadas. Yasky se ha quejado por todas las situaciones referidas aunque no tomó posición por nada de todo esto en el Consejo del Salario mínimo. Moyano ha dicho que “si al movimiento obrero se le intenta quitar derechos y avances, va a haber confrontación”. Pero no la hay.

Néstor Pitrola

ABSUELTOS: MENEM Y LOS PRIVATIZADORES

El choque y descarrilamiento de Flores dejó un saldo terrible, pero repetido. Son las muertes que traen el derrumbe ferroviario y el de todo el transporte público.

El desquicio lleva décadas. Sus beneficiarios son los mismos: los Roggio, los Cirigliano, los Cristóbal López o los Taselli.

De Menem a Kirchner, de Cavallo a Boudou, el vaciamiento se mantuvo intacto.

¡Sólo los trabajadores lucharon contra él! Los ferroviarios, que pusieron en jaque la tercerización -el negociado que unía a los Pedraza, al Estado y a las privatizadas para lucrar con el trabajo precario.

Los obreros y delegados del subte, que han denunciado una y mil veces a Roggio por el mantenimiento deficiente de las formaciones, el trabajo insalubre y la inseguridad que soportan tanto los trabajadores como los pasajeros.

Sólo dos días antes de la inmensa tragedia de Flores, la Presidenta se refirió al transporte y, más precisamente, a los subtes.

¿Lo hizo para condenar la desinversión? ¿Llamó la atención a los concesionarios?

No: atacó a los trabajadores. Minimizó las enfermedades laborales que sufren. Y anticipó lo que se viene: un tarifazo en el transporte público.

Parece una burla, o una ironía. Pero mientras esto pasaba, la justicia de la Argentina K premiaba al gran privatizador, Carlos Menem, con la inocencia.

Los grupos capitalistas a los que él benefició también serán premiados, en breve, con aumentos de tarifas.

El kirchnerismo permitió que todos ellos sigan sirviéndose del patrimonio público.

Pero tampoco removió de la gestión ferroviaria a sus socios de la burocracia sindical. Los agentes de Pedraza siguen al frente de las oficinas que “controlan” las inversiones y el mantenimiento ferroviario. En suma, son los que hacen la vista gorda frente al derrumbe.

Otra tercerización, la que se ejecutó con la cooptación de Hebe Bonafini, ha dejado al desnudo un nuevo vaciamiento: el de la política de vivienda popular.

El gobierno que exige el voto para frenar “a la derecha” no sólo pactó con Menem, candidato a senador de los K. También rescató a los privatizadores que se “llenaron” en aquellos años. La “derecha”, principalmente, está adentro del gobierno.

Terminemos con el vaciamiento renacionalizando ferrocarriles y subtes, poniéndolos bajo la gestión de sus obreros y profesionales.

Reforcemos, con el voto, a los que han luchado, siempre, contra los privatizadores.

Al Frente de Izquierda.

11 de septiembre de 2011

Jorge Altamira visita la ciudad de Córdoba, a una semana de las elecciones municipales

El día lunes 12 de septiembre, Jorge Altamira, candidato a presidente por el Frente de Izquierda y los Trabajadores, visitará la ciudad de Córdoba para apoyar a los candidatos locales Daniel Báez, Leticia Celli y Manuel D'Alessandro, quienes participarán de las próximas elecciones municipales del 18 de septiembre, donde se elegirán el intendente y los concejales de Córdoba capital. Por la mañana, Altamira realizará una gira por los medios, y a las 17 horas brindará una conferencia de prensa en el bar Art Deco, ubicado en Humberto Primo y Jujuy.

Luego de las elecciones provinciales que ubicaron al Frente de Izquierda como la cuarta fuerza electoral, logrando retener su banca en la legislatura provincial, una semana después, en las elecciones primarias, el Frente de Izquierda creció en un 50 % su votación. El Frente obtuvo el 3,7% de votos para presidente y el 4% para diputados nacionales (68.150 votos). En la ciudad de Córdoba logró el 6 y el 6,5%, respectivamente, con barrios arriba del 10%. Estos resultados ubican al Frente de Izquierda con la posibilidad cierta de ingresar al Concejo Deliberante.

Altamira estará de regreso en Buenos Aires el martes 13 de septiembre, día en el que participará, a las 12 horas, de la conferencia de prensa organizada por las fuerzas que integran el Frente de Izquierda, donde se anunciará a todo el país los nuevos desafíos y planteos programáticos hacia las elecciones de octubre.

Fuga de capitales y devaluación

La fuga de capitales en lo que va de septiembre ha dado un salto cualitativo. En sólo tres días, el Banco Central debió vender 600 millones de dólares para satisfacer a los “grandes compradores”, no al chiquitaje. Hay una liquidación de divisas de las cerealeras, pero “no son pocos los exportadores que vuelven a recomprar los dólares” (Ambito Financiero, 8/9). A diferencia de otras “intervenciones” del Banco Central, en esta oportunidad las ventas de dólares no pudieron frenar la tendencia a la devaluación del peso.

Una tendencia general

La “corrida” parece inscribirse no en la incertidumbre electoral, sino en la certidumbre: allí apunta la ganadora de las ‘primarias’. A pesar de las declaraciones en contrario de Dilma Roussef hace poco tiempo, Brasil ha iniciado una movida devaluatoria: el real se devaluó un 6% el último mes. El gobierno suizo hizo lo mismo: acaba de atar la paridad del franco a la del euro, para parar su imparable revalorización, lo que condujo a que su cotización se derrumbara casi un 10% en un día. Está claro que nadie quiere pagar los costos de la guerra monetaria que ha desatado la desvalorización del dólar, o sea que todos devalúan contra todos. La pregunta es si la devaluación del real fue concertada con Argentina o si rompe las reglas del juego por parte de Brasil.

Argentina

En la Argentina de los K, sin embargo, esta tendencia devaluatoria tiene consecuencias explosivas debido a la inflación. Quizás haya un acuerdo para acompañar una devaluación acotada del real brasileño, pero hay que ver si esto no se desmadra. En cualquier caso, un retroceso de la demanda brasileña perjudicará fuerte a la exportación argentina, por eso CFK prometió redoblar el control a las importaciones. Al criticar la “falta de contundencia” oficial para frenar la fuga de capitales, el ahora duhaldista Redrado señala que el gobierno sólo logrará revertirla “con un programa económico solvente” (Clarín, 3/9), o sea con un ‘ajuste’. La burguesía quiere solventar una devaluación del peso con un superávit fiscal y el congelamiento de salarios.

¿Adónde va el gobierno? 

Los ataques de la Presidenta a las futuras paritarias, así como el salario mínimo “de pobreza” marcan señales muy claras, las que fueron aplaudidas por el “mundo industrial”. Lo mismo ocurre con el ataque a los trabajadores del subte, donde también se busca un ‘ajuste’ para compensar la disminución de los subsidios y para atenuar la suba del pasaje. La crisis mundial llega al Río de la Plata en plena campaña electoral y anuncia, antes de lo previsto, los colores de la política post electoral.

Marcelo Ramal

10 de septiembre de 2011

Néstor Pitrola y la actitud de Cristina ante la demanda de los trabajadores del subte

 "El problema no son los músculos y tendones de la clase obrera, sino los cerebros moldeados, cuando no comprados, de los políticos capitalistas”

Néstor Pitrola, dirigente del Partido Obrero y candidado a diputado nacional de la provincia de Buenos Aires por el Frente de Izquierda, se refirió a la polémica abierta en relación a las demandas de los trabajadores del subte. También aludió a los choques entre Moyano y la Presidenta.

Dijo Pitrola: "El problema no son los músculos y tendones de la clase obrera, sino los cerebros moldeados, cuando no comprados, de los políticos capitalistas. Es que la Pesidenta atacó estratégicamente al sindicalismo independiente que está cuestionando a la burocracia sindical de los Moyano, los Pedraza y los Yasky, que defienden el régimen de las privatizaciones subsidiadas en el ferrocarril y en el subte”.

Luego agregó: “En las últimas horas se conoció la ilegalización de una huelga docente de Santa Cruz, de 60 días de lucha. Estamos frente a un régimen que ataca al sindicalismo independiente y de bases, preparando los dedazos presidenciales contra las paritarias y el salario, como los ya sufridos en el salario mínimo y las asignaciones familiares, rebanadas ante la inflación”.

Y concluyó: “Los choques de Cristina Fernández de Kirchner con Moyano no se dirigen a cuestionar la burocracia de los sindicatos, sino que explota la falta de autoridad moral, social y política de esos dirigentes para avanzar en el recorte de conquistas sociales y continuar flexibilizando, tercerizando y precarizando a los trabajadores”.