El nuevo jefe de Policía de la Provincia de Córdoba, Julio César Suárez, no ahorró en una gran escenificación mediática, con 500 efectivos movilizados, montada, infantería, helicóptero, etc., para realizar razias en los barrios más humildes del gran Córdoba, especialmente en la ciudad de Villa Allende, el pasado jueves 24.
Suárez transmitía repetidamente ante los medios de comunicación que iba arrestando a “15, 17, 20, 25…”, sin explicitación de causa ni prueba concreta alguna. Le secuencia del circo represivo continuó con un corral donde mostrar, cual trofeo, a los supuestos delincuentes, listos para el flash. Los Berni de Cristina K y los Suárez de De la Sota se van haciendo el juego entre sí hacia una derecha sin retorno.
Rechazamos los planteos derechistas que reclaman “manos liberadas” para la policía, a fin de reforzar su accionar represivo. Ésta ya tiene sus manos liberadas por de más, y las mismas se encuentran ligadas al delito organizado: trata de personas, narcotráfico y también los robos. En los planes de De la Sota este operativo se presenta como “la oportunidad” de reconciliación del aparato represivo con la ciudadanía después de los acuartelamientos y saqueos; sin embargo, no es más que una burda pantalla de la vinculación del aparato policial con el delito, acompañada de una flagrante violación a los derechos humanos. En la misma orientación se encuentra todo el arco político patronal.
Sólo habrá seguridad ciudadana si el asunto está en manos del pueblo que trabaja, disolviendo las actuales fuerzas represivas y organizando una institución que cuide la vida, la integridad y los bienes del pueblo, reclutada por asambleas populares y de organismos de derechos humanos, con jefes electos y revocables, que rindan cuenta frente a las asambleas y que tengan prohibido reprimir la protesta social. Igual funcionamiento para la Justicia.
Para comunicarse:
- Adrián Flores -> Cel. 3543-310191
PARTIDO OBRERO DE VILLA ALLENDE en el Frente de Izquierda y de los Trabajadores