19 de diciembre de 2008

Crisis en la industria automotriz

Acuerdo antiobrero de la burocracia del Smata

Finalmente, el Smata firmó los acuerdos con Gestamp y Volkswagen convirtiendo los despidos en suspensiones hasta el próximo 31 de marzo. Falta aún acordar con la patronal de Iveco la situación de los 42 despedidos de esa fábrica.

Los trabajadores suspendidos cobrarán un salario mensual de 1.050 pesos, de los cuales 300 pesos los pondrá el Estado nacional. La reducción salarial implica una pérdida de más del 50%, que ya había tenido una caída muy fuerte por la pérdida de las horas extras. La burocracia defiende estos acuerdos como grandes victorias porque, según sostiene, lograron que las patronales reconocieran y asumieran responsabilidades sobre trabajadores que "no eran de ellos" (habían sido contratados por consultoras). Pero dice que la salida es "hasta marzo, luego Dios dirá" (palabras del secretario general, Omar Dragún).

Cristiano Rattazzi, presidente de la Fiat, habló de una "reestructuración" para esa fecha. ¿En qué consistiría? "No vamos a llegar a dos mil autos por día como teníamos previsto, estamos actualmente en 200 y vamos a quedarnos en eso... garantías de que no va a pasar nada, no hay" (La Mañana de Córdoba, 4/12).

Rattazzi reconoce la imposibilidad de volver a los 60.000 autos Fiat que por mes se vendían en Argentina y Brasil; por lo tanto, se propone frenar la producción y "desestoquearse". La producción cordobesa de autos (no autopartes) creció un 63% entre enero y noviembre de 2008 respecto de iguales meses del año pasado. Si se descuenta noviembre, cuando hubo una caída, el aumento de la producción fue del ¡75%! Es decir, las patronales se "sobreestoquearon" cuando la crisis estaba cantada.

El gobierno nacional, mientras tanto, anunció una promoción de la ventas de autos (que) "no es la panacea... es una herramienta que no va a solucionar el mercado", señaló el presidente de Acara (concesionarios de autos) (La Mañana, 10/12).

Para la burocracia, las suspensiones dejan a los trabajadores "enlistados" en el plantel de la empresa. Es falso, favorece la desvinculación. Ya 46 de los despedidos de VW aceptaron la indemnización y algo parecido está sucediendo en Iveco. Las patronales se han largado a ‘convencer' a trabajadores de que tomen la oferta monetaria porque irá bajando con los días.

La resistencia obrera, sin embargo, se mantiene. El miércoles hubo una caravana de más 100 trabajadores de Iveco, a pesar de que no hubo abandono de tareas. En Renault, la patronal tuvo que desarmar una carpa para anunciar un nuevo modelo por el malestar que provocó. Las patronales esperan que las vacaciones adelantadas socaven la resistencia obrera.

La política de las patronales y del gobierno no da una salida; para imponer una salida obrera es necesario mantener a los trabajadores dentro de las plantas. Por eso el objetivo es la incorporación de los suspendidos al trabajo, repartiendo las horas y sosteniendo los mismos salarios; es decir, pagando el 100%.

Eduardo Salas