6 de diciembre de 2012

7D, pelea de buitres

Finalmente, llegó el 7D.

Pero la “libertad de expresión” está más lejos que nunca.

El propio gobierno ya dio la receta del fraude: que los empresarios repartan las licencias entre sus parientes o socios.

El mismo “método” que usó Boudou para quedarse con Ciccone.

Los beneficiarios de esa estafa serán las enormes “K”orpos armadas al calor del gobierno: Cristóbal López, Vila-Manzano y otros.

Ese mismo recurso podría ser utilizado, finalmente, por el mismísimo grupo Clarín.

La guerra transcurre entre juzgados y conspiraciones de accionistas.

Son los métodos de los buitres capitalistas.

No está en juego la “democratización” de los medios: es apenas un nuevo reparto de negocios entre sus propietarios.

También es el intento oficial de monopolizar la palabra, para reforzar un régimen de gobierno personal.

Por eso, los dos -la Corpo y el gobierno- tienen un blanco común.

Por un lado, los trabajadores de prensa, igualmente perseguidos por Clarín y por el gobierno.

Por el otro, la población trabajadora, que seguirá sometida a la manipulación de las corporaciones mediáticas, oficialistas u opositoras.

La libertad de expresión exige poner fin al monopolio capitalista -o del Estado que sirve a esos monopolios- y asignar los recursos y medios de comunicación a las organizaciones y expresiones del arte, la cultura, la política y la vida social.

Luchemos por esta perspectiva.

Defendamos la libertad y la estabilidad laboral de los trabajadores de prensa.