Famatina pudo, todos podemos". La tapa del número anterior de Prensa Obrera anticipó un crecimiento de las luchas. En Andalgalá, en Belén y en otros pueblos de Catamarca y Tucumán, los piquetes contra Minera La Alumbrera han ganado las rutas.
Lo mismo ocurre en Cafayate (Salta) y en Bariloche y Esquel.
Rechazan la explotación minera depredadora gobernada por el lucro capitalista.
Un sistema basado en la tercerización, el hacinamiento y la insalubridad laboral, en la destrucción del medio ambiente en gran escala, y en el saqueo de recursos estratégicos.
Varios de los Estados imperialistas que albergan a los accionistas de estos pulpos han prohibido la explotación a cielo abierto, con explosivos y cianuro.
Por eso se encuentra en marcha una rebelión continental, de Panamá a la Patagonia, del Amazonas a la Cordillera.
El gobierno ha elegido su campo hace mucho, con Xstrata, Barrick Gold o Anglogold -o sea las Bolsas de Londres y Nueva York.
Mientras se invoca la soberanía nacional en Malvinas, las mineras copan los medios de la región y organizan la 'seguridad' contra el pueblo en lucha.
Los piratas dominan el NOA con sus gurkas (gobernadores) 'nacionales y populares'.
Los Kirchner, Gioja, Corpacci o Urtubey quieren salvar sus presupuestos con las migajas que dejan los pulpos mineros, aunque descapitalicen a la Nación.
Es otra manifestación del ajuste en marcha. La rebelión del Norte vuelve a colocar sobre el tapete la cuestión de quién paga la crisis.
Apoyemos la rebelión de los pueblos del norte, impulsemos una gran lucha nacional contra los monopolios mineros, los tarifazos y el ajuste.