De cara a las elecciones primarias, el escenario político en Córdoba presenta un cuadro de crisis en todos los alineamientos políticos. El kirchnerismo retrasa la designación a dedo de Carolina Scotto, la actual rectora de la UNC -que representa al sector ‘progresista’, en su mayoría nucleado en Unidos y Organizados, pero no cuenta con el aval de los sectores del PJ. Los K, ante esto, se han lanzado a la captación de intendentes “delasotistas”: el de San Francisco, Llaryora; el de Villa María, Acastello; y Olga Riutort, principal referente del PJ en capital.
De la Sota ha debido dejar a un lado su campaña nacional para concentrar esfuerzos y maniobras en el distrito. Ha tratado de unificar al PJ en una lista única detrás de Schiaretti (incluso dándole el segundo lugar a Riutort) y el ingreso a los ministerios de varios intendentes. Ahora pretende zanjar las disputas pejotistas en las internas abiertas. Macri ya anunció que el PRO iría con lista propia, encabezada por el ex árbitro de fútbol Héctor Baldassi.
En el centroizquierda el desbarajuste parece mayor. Juez ha dado un salvoconducto para que Binner intente una alianza con la UCR, un rival de Juez en Córdoba, aunque advirtiéndole que no llegará a buen puerto debido al acuerdo de hecho entre el gobernador pejotista De la Sota y el intendente de la capital, el radical Mestre. Mientras la UCR nacional pretende una alianza con el FAP, la de Córdoba la rechaza. La izquierda del FAP mira los enjuagues entre Binner y los radicales desde afuera: Libres del Sur entusiasmado con las ‘boinas blancas’ y el MST sin saber dónde apoyar el trasero.
De la Sota ha debido dejar a un lado su campaña nacional para concentrar esfuerzos y maniobras en el distrito. Ha tratado de unificar al PJ en una lista única detrás de Schiaretti (incluso dándole el segundo lugar a Riutort) y el ingreso a los ministerios de varios intendentes. Ahora pretende zanjar las disputas pejotistas en las internas abiertas. Macri ya anunció que el PRO iría con lista propia, encabezada por el ex árbitro de fútbol Héctor Baldassi.
En el centroizquierda el desbarajuste parece mayor. Juez ha dado un salvoconducto para que Binner intente una alianza con la UCR, un rival de Juez en Córdoba, aunque advirtiéndole que no llegará a buen puerto debido al acuerdo de hecho entre el gobernador pejotista De la Sota y el intendente de la capital, el radical Mestre. Mientras la UCR nacional pretende una alianza con el FAP, la de Córdoba la rechaza. La izquierda del FAP mira los enjuagues entre Binner y los radicales desde afuera: Libres del Sur entusiasmado con las ‘boinas blancas’ y el MST sin saber dónde apoyar el trasero.
La provincia se encuentra virtualmente quebrada. La deuda provincial ronda los 25.000 millones de pesos, con el agravante de que el 60% de la misma se ajusta por dólar. La carga fiscal somete ramas enteras como educación, salud u obras públicas. Se ha acentuado la precarización laboral en la planta provincial, en particular en los hospitales. El boleto educativo gratuito ya recibió los primeros recortes.
No se trata solamente de números que no cierran. La armaduría automotriz se encuentra atada al mercado internacional y particularmente a Brasil. Materfer (trenes) y Fadea (aviones) dependen de la marcha incierta de los acuerdos con China y Brasil. Hay despidos en todas las terminales y en muchas metalúrgicas, profundización de la precarización laboral, aumentos de los ritmos de producción. Las patronales utilizan los subsidios del Estado para pagar las indemnizaciones. Las patronales, con el aval del gobierno y de la burocracia de Smata y de la UOM (delasotistas), han desplegado una política de cooptación por un lado y persecución por el otro, contra el activismo que tiene su centro en VW.
Ante estos problemas, la respuesta de De la Sota ha sido, por una parte, continuar su disputa con el gobierno nacional por los incumplimientos fiscales y previsionales que le atribuye. Por otro lado, ha prometido el pase a planta de empleados públicos contratados, y logró cerrar la paritaria docentes con la burocracia local. Entre los trabajadores estatales afectados por el recorte jubilatorio, los obreros metalúrgicos y metalmecánicos y los choferes de UTA, se va planteando la necesidad de frenar los despidos, el ajuste y la privatización. En la semana se desarrollaron varios conflictos en fábricas metalúrgicas, con huelgas y piquetes, incluso la ocupación (Materfer).
Nuestro partido, en campaña desde principios de año, ha puesto en marcha una agenda de reuniones abiertas en barrios, ciudades del interior provincial y con sectores de gremios y fábricas. El desarrollo de nuestro programa y una agitación constante de nuestros planteos, junto al acompañamiento y apoyo metódico de las luchas, colocarán al Frente de Izquierda entre los protagonistas políticos de la batalla electoral que se avecina.
Jorge Navarro
No se trata solamente de números que no cierran. La armaduría automotriz se encuentra atada al mercado internacional y particularmente a Brasil. Materfer (trenes) y Fadea (aviones) dependen de la marcha incierta de los acuerdos con China y Brasil. Hay despidos en todas las terminales y en muchas metalúrgicas, profundización de la precarización laboral, aumentos de los ritmos de producción. Las patronales utilizan los subsidios del Estado para pagar las indemnizaciones. Las patronales, con el aval del gobierno y de la burocracia de Smata y de la UOM (delasotistas), han desplegado una política de cooptación por un lado y persecución por el otro, contra el activismo que tiene su centro en VW.
Ante estos problemas, la respuesta de De la Sota ha sido, por una parte, continuar su disputa con el gobierno nacional por los incumplimientos fiscales y previsionales que le atribuye. Por otro lado, ha prometido el pase a planta de empleados públicos contratados, y logró cerrar la paritaria docentes con la burocracia local. Entre los trabajadores estatales afectados por el recorte jubilatorio, los obreros metalúrgicos y metalmecánicos y los choferes de UTA, se va planteando la necesidad de frenar los despidos, el ajuste y la privatización. En la semana se desarrollaron varios conflictos en fábricas metalúrgicas, con huelgas y piquetes, incluso la ocupación (Materfer).
Nuestro partido, en campaña desde principios de año, ha puesto en marcha una agenda de reuniones abiertas en barrios, ciudades del interior provincial y con sectores de gremios y fábricas. El desarrollo de nuestro programa y una agitación constante de nuestros planteos, junto al acompañamiento y apoyo metódico de las luchas, colocarán al Frente de Izquierda entre los protagonistas políticos de la batalla electoral que se avecina.
Jorge Navarro