La movilización, convocada por la Coordinadora Provincial por la Soberanía Popular del Agua y la Tierra, tuvo desde el inicio un contenido profundamente anticapitalista. Las consignas tuvieron como eje el rechazo a la instalación de Monsanto; la responsabilidad del gobierno provincial por las 100 mil hectáreas arrasadas por el fuego en el marco de los negocios inmobiliarios y del agro, que desmontan indiscriminadamente, provocando la crisis hídrica que azota a decenas de pueblos del interior cordobés.
Como si no sobraran razones para marchar, la convocatoria adquirió nuevo impulso ante el brutal intento de desalojo de los asambleístas y demás organizaciones sociales, ambientales y políticas que sostienen el bloqueo a las instalaciones de Monsanto para impedir la continuidad de la construcción de la planta en la localidad de Malvinas Argentinas.
Los miles que se manifestaron en las calles dieron una contundente respuesta al armado político-patronal que se desarrolla para garantizar la instalación de Monsanto, conformada por el PJ, la UCR y el kirchnerismo, las cámaras empresariales de Córdoba y la burocracia que conduce la CGT regional, que bajo una supuesta defensa de la fuente trabajo intenta enfrentar a trabajadores con trabajadores para pavimentar la construcción del predio de la multinacional. Mientras tanto, esa misma burocracia es cómplice de los despidos y suspensiones en las terminales, las metalúrgicas, los frigoríficos y otras ramas industriales.
La marcha tiene como telón de fondo la crisis política de los “narcopolicias”, la situación industrial, la lucha de judiciales y la crisis sanitaria que ha desencadenado un proceso asambleario. Esta situación hace evidente la necesidad de una alternativa independiente ante todas las variantes patronales, para satisfacer las aspiraciones del pueblo trabajador.
Desde el Partido Obrero en el Frente de Izquierda y los Trabajadores hemos acompañado cada uno de los tramos de la convocatoria a esta extraordinaria movilización, como punta de lanza al proceso abierto de organización independiente de los trabajadores. Asimismo, convocamos a reforzar activamente la consolidación de un bloque de izquierda en el Congreso, para defender los intereses de la población trabajadora frente al saqueo capitalista.
Soledad Díaz García