“Paso a desarrollar los argumentos en los que se basa nuestro voto.
Es inocultable que la educación pública argentina, las Universidades del país, en particular la Universidad Nacional de Córdoba, atraviesan una profunda crisis, producto de años de asfixia presupuestaria y políticas antieducativas desarrollada por los sucesivos gobiernos nacionales desde el 76´ a 2008.
Es en el marco de la crisis de la educación y de la producción científica que se desarrolla esta elección de decano de la Facultad de Matemáticas, Astronomía y Física.
La política que el decanato impulsó durante estos 4 años no ha dado respuesta a los problemas básicos de la facultad ni ha intervenido en la perspectiva de darle una salida a la crisis de la UNC.
Por el contrario, ha desarrollado la política del gobierno nacional, de transferencia de recursos públicos a empresas privadas y de adaptación a la miseria presupuestaria en contra de los intereses de los trabajadores y estudiantes universitarios.
Lejos de defender la gratuidad y la educación pública, el aumento presupuestario, para defender la calidad académica, esta gestión impulsa la política de autofinanciamiento frente al ahogo presupuestario al igual que la adaptación a la miseria.
Expresión de esto son los posgrados arancelados, la contribución estudiantil, los convenios con terceros a cambio de recursos que el estado no direcciona a la educación, que resultan en beneficios para los grupos empresariales con los que se establecen los acuerdos (mientras los gobiernos provincial y nacional los premia con exenciones impositivas). Producto de esta política es la subordinación de la actividad científico-académica a los intereses de estos privados, cuyos intereses distan de ser desarrollar la ciencia, la técnica y la producción en relación a las necesidades de industrialización de la población, sino que se limitan a sus ambiciones de lucro.
Con el impulso de apoyo al documento del CUCEN, la gestión demuestra que su política es la de transferencia de recursos públicos al sector privado. Ha favorecido la injerencia privada dentro de la Universidad y en particular en Famaf, donde se creó un doctorado a medida de las necesidades de Intel, multinacional cuyos intereses son el desarrollo de software para obtener ganancias y bajo ningún punto de vista el desarrollo de la informática-computación en relación a las necesidades de la población.
La política general impulsada por la gestión ha fracasado en resolver los problemas fundamentales de la facultad, así como la política del gobierno nacional que apoya este decanato ha fracasado en resolver los problemas del sistema educativo, y de la producción científica.
Todos los problemas que los estudiantes, docentes y no docentes planteamos en las movilizaciones de 2005, siguen sin resolverse e incluso se han agravado.
En nuestra facultad los trabajadores de la limpieza tienen condiciones laborales precarias porque se mantiene tercerizado el servicio. Los estudiantes de primer año, siguen sin aulas para cursar en la facultad, las becas son insuficientes y escasas. Los estudiantes de Astronomía cursan en el Observatorio en condiciones que atentan contra cualquier proceso de aprendizaje. Los estudiantes que trabajan no tienen turnos alternativos para cursar y a pesar de que sostiene que se impulsa “la relación de la ciencia con la producción”, se atacan las posibilidades de que los estudiantes que trabajan puedan desarrollar su actividad académica.
Más allá de que se repite que se intenta combatir la deserción, durante esta gestión los alumnos libres perdieron la posibilidad de anotarse en las materias, incluso el derecho a hacer los laboratorios de algunas materias, por falta de espacio y por una política restrictiva de adaptación a la miseria presupuestaria.
La planta docente sufre años de postergaciones respecto a ascensos y reconocimiento de su trabajo en las aulas, además de que la mayoría percibe salarios incoherentes con su actividad que no alcanzan para la constante formación, y en muchos casos para garantizar las mínimas condiciones de vida.
Los no docentes sufren la política de ataque a sus condiciones laborales que impulsa esta gestión como parte del gobierno de la UNC, que intenta recortar conquistas como el 3% por antigüedad y los adicionales por permanencia, así como el régimen de licencias. Al igual que los docentes, los no docentes sufren años de postergaciones en ascensos y reconocimiento a sus tareas así como la miseria salarial.
Frente a la situación de crisis de nuestra Universidad, la política que defiende el decanato es la del rectorado y del gobierno nacional, que consiste en la adaptación a la miseria, basado en las restricciones y arancelamiento al grado y posgrado, en el ataque a las condiciones laborales de los trabajadores universitarios y en favorecer la injerencia de capitales privados en la actividad científica pública, sometiendo la investigación y educación a los intereses de lucro de distintos grupos capitalistas.
Esta no es una salida a la crisis de la Universidad, ni una política que defienda el desarrollo científico y de la actividad académica de nuestra facultad.
Puesto que no hay un candidato que defienda la planificación científica y académica de la facultad, que proponga un plan de desarrollo de los grupos de investigación en relación con las necesidades sociales, que impulse la defensa del salario docente y no docente, que batalle por garantizar el acceso a la formación en las carreras de la facultad, es que nuestro voto es en blanco”.
Florencia Orosz
Consejera Estudiantil de OKTUBRE-UJS-PO - Facultad de Matemáticas, Astronomía y Física.