La patronal amenaza despedir a suspendidos y no deja entrar a delegados
A las 5 de la mañana del martes 7, los compañeros suspendidos de Iveco (efectivos y contratados) se apostaron para bloquear la puerta de fábrica. El bloqueo fue exitoso: la inmensa mayoría de los trabajadores convocados por la patronal para iniciar la semana de trabajo del mes no entró a fábrica, lo cual produjo un parate de la producción.
Esta fuerte reacción de los trabajadores surgió ante dos problemas fundamentales. Uno, el impedimento de la patronal al ingreso a fábrica de dos delegados (opositores a la burocracia), esto a pesar de un pronunciamiento de la Justicia que los habilitaba para ello. El ataque a los delegados cuenta con el apoyo de la burocracia del Smata; recientemente decidió sancionarlos y promover su expulsión en el congreso nacional del gremio, en noviembre próximo. El otro hecho fue que, el lunes, una gran parte de los efectivos suspendidos fueron notificados oficiosamente de que no entrarían más a fábrica, que estaban en una “lista negra”.
Una asamblea de más de 200 trabajadores efectivos y contratados, suspendidos y en actividad, ratificó a los dos delegados sancionados y exigió la rotación de las suspensiones. La asamblea mantuvo el bloqueo unas horas y luego resolvió marchar hacia el Smata. Cuando llegaron, el local estaba “cerrado por desinfección”. La burocracia había huido.
Los delegados convocaron a una conferencia de prensa para el miércoles 8.
El martes por la noche, el Plenario Abierto en Defensa del Trabajo y el Salario votó la solidaridad con los delegados, repudió el ataque de la patronal y la burocracia, y convocó a participar de la conferencia de prensa. Para el martes 14/04 convoca a una movilización hacia la Unión Industrial de Córdoba y la Casa de Gobierno.
E.S.
REGIONAL CÓRDOBA
