25 de julio de 2013

Interior de Córdoba: La juventud, motor de la campaña

La campaña del Frente de Izquierda se extiende y afirma al interior de la provincia. En ciudades tan importantes como Villa María, Río Cuarto, Alta Gracia, por nombrar algunas, se han constituido núcleos organizados para reclamar el voto al Frente de Izquierda.

Desde el Partido Obrero, encaramos una serie de charlas y reuniones que han dado lugar a estos nucleamientos. El dato distintivo de todos ellos es la presencia casi exclusiva de jóvenes (muchos de ellos votantes por primera vez).

El método empleado nos permitió verificar y precisar algunas caracterizaciones. En el debate se percibe con toda claridad la existencia de un vacío político. En la provincia el oficialismo (De la Sota) resulta “poco atractivo”; es el responsable de una carga de pesada de impuestos, de claros indicios de corrupción y arbitrariedad. Por eso, y a pesar de liderar las encuestas, lo hace con una pérdida importante de votantes.

El factor que impulsa el acercamiento al Frente de Izquierda es la declinación total de la llamada centroizquierda (fundamentalmente el derrumbe del juecismo y el kirchnerismo).

Aunque el Frente de Izquierda registra adhesiones sin distinción de edad (es fuerte el apoyo de los jubilados en las recorridas por plazas y barrios, de los trabajadores activos en las puertas de fábricas, o en las movilizaciones, de la docencia en las escuelas) no es casual que sean los jóvenes los que más se sumen a impulsar la campaña.

La juventud cordobesa soporta condiciones brutales de agobio por la miseria salarial, la precarización laboral y la arbitrariedad patronal, protegida por los gobiernos; tiene limitaciones para el acceso a la educación, y es particular víctima de la represión policial.

A través de las reuniones y charlas establecemos una actividad común (en comités de apoyo, con corresponsales, con fiscales) con una juventud que se suma a la lucha por una verdadera alternativa política.

Eduardo Salas