El Secretario de Cultura de la Municipalidad de Córdoba, Francisco Marchiaro, ha presentado ante el Concejo Deliberante el proyecto de ordenanza para la creación del Instituto Municipal de Cultura, el cual no es otra cosa que una fundación privada con funciones y facultades prácticamente idénticas a las de la actual Secretaría, sólo que... no va a rendirle cuentas de lo que haya gastado al Tribunal de Cuentas de la Municipalidad, sino que lo hará ante la Dirección de Personas Jurídicas de la Provincia de Córdoba, porque sería una fundación de carácter privado. Vale decir, quedaría en manos de empresas del espectáculo, grandes editoriales e inmobiliarias.
Hace algunos días, diversas asociaciones representantes de la cultura -Actores, artesanos del Paseo de las Artes, MUCC (músicos), fotógrafos, etc.- nos hicimos presentes en la sesión de la Comisión de Cultura del Concejo Deliberante. Los empleados municipales del área y los artesanos expresaron ante la comisión su rechazo al proyecto, y denunciaron el incumplimiento de los acuerdos con el Secretario de Cultura en relación al desarollo de las discusiones en una comisión conjunta.
La discusión fundamental giró en torno del tratamiento de preferencia, que tendría lugar el próximo jueves 19 de abril. El radicalismo cuenta con mayoría simple en el Concejo, por eso pretende que se apruebe el proyecto casi sin discutirlo.
El tema prioritario y que unifica a todos es la oposición a la privatización del área de cultura de la Municipalidad de Córdoba. Si se aprobara la creación del Instituto, implicaría:
1. discrecionalidad en el manejo de los fondos que recaude;
2. arbitrariedad en la selección de los representantes de la cultura que podrían participar en él;
3. selección unilateral de la programación de actividades culturales;
4. disponibilidad absoluta de los edificios públicos de la Secretaría de Cultura (arrendamiento, préstamo o venta),
5. vaciamiento de la estructura de la Secretaría, con cierre de las fuentes de trabajo;
6. exclusión de los sectores más carecientes de la sociedad, por los costos económicos de las actividades.
En pocas palabras: ¡NO MÁS FERIA DEL LIBRO, NO MÁS USO DE LOS CPC, CABILDO, ETC., PARA ACTIVIDADES INDEPENDIENTES!
Los trabajadores de la cultura debemos involucrarnos activamente en el rechazo a este proyecto de ordenanza, porque vamos a encontrarnos entre los perjudicados por esta medida política y porque el público más excluido de la actividad cultural (escuelas públicas, bibliotecas populares, centros vecinales, grupos independientes) va a recibir el impacto más crudamente. Además, las pequeñas empresas culturales (editores, salas teatrales, etc.) también van a ver cerradas muchas fuentes de trabajo.
TODOS tenemos que decir:
¡NO A LA CREACIÓN DEL INSTITUTO MUNICIPAL DE CULTURA!
Escritores y Artistas del Partido Obrero, en el Frente de Izquierda y de los Trabajadores.