13 de febrero de 2009

El tarifazo de Giacomino y Juez

Cuando los vecinos de la ciudad de Córdoba recibieron los cedulones del inmobiliario municipal (barrido, alumbrado y limpieza) estalló la bronca. Los centros vecinales (en general inactivos) convocaron a marchar a la sede municipal para rechazar el aumento.

El aumento respecto de lo que se pagaba, que va del 100% al 1.200% según las zonas, surge de un revalúo efectuado por la municipalidad. El revalúo traslada al impuesto la brutal especulación inmobiliaria que se desarrolló en la ciudad y que ya expulsó a miles de trabajadores hacia el Gran Córdoba, con el consiguiente aumento de los gastos de transporte, de energía y la carencia de servicios. Se deberá pagar, no de acuerdo con la realidad de la economía del contribuyente, sino si su casa está ubicada en una zona que en los últimos años fue el paraíso de los especuladores.

Este tarifazo fue dado a luz justo cuando la pelea entre Juez y Giacomino llegaba a su último capítulo: la quiebra del Frente Cívico y la expulsión de todos los funcionarios juecistas del Ejecutivo municipal. Pero este impuestazo no hubiera sido posible sin Juez, pues él controla el concejo deliberante (13 de los 16 ediles del FCyS le responden): el 12 de diciembre con el voto unánime del bloque del FCyS, es decir con el protagonismo del juecismo, se aprobó el revalúo que hoy es repudiado por los vecinos.

El Partido Obrero apoya la protesta vecinal y plantea:

1) Anulación del revalúo inmobiliario municipal.

2) Eximición de la tasas de contribución sobre los inmuebles para desocupados, suspendidos, despedidos, como así también a jubilados y pensionados.

3) Establecer una tasa por contribución sobre los inmuebles que no supere el 1% de los ingresos familiares a todos aquellos cuyos ingresos sean inferiores al valor del costo de la canasta familiar.

4) Impuesto extraordinario que grave la especulación inmobiliaria y los fondos y fideicomisos inmobiliarios. No a la especulación inmobiliaria.


Eduardo Salas